Bridget Sarttelee como Venice Thompson
VENICE
-– ¿Para quien mierda trabajas? –- le grito en la cara mientras lo sostengo del cuello de su camisa.
-– Para nadie. Te juro que estoy solo en esto. –- me dice él con miedo en su voz.
-– Sheriff, ya está, no hablará. –-
Thomas trata de convencerme.-– ¡No me iré de aquí, hasta que este malnacido confiese! -– le grito.
–- ¡Ya te he dicho que no trabajo para nadie! –- me grita él, con furia en sus ojos mientras se deshace de mi agarre.
Doy un gran suspiro -– ¡Bien! Si no hablaras por la buenas, tendrás que hacerlo por las malas. -– saco mi arma de la funda y le pongo una bala. -– Esta bala, irá a parar allí -– apunto hacia sus partes nobles -– Si no me dices para quien mierda trabajas. -– le digo con total seriedad.
Él levanta las manos en forma de rendición -– ¡Esta bien! Te diré todo. –- dice con bronca contenida.
Sonrio de lado mientras tomo asiento en una de las sillas que hay en la sala de interrogatorios. Thomas se sienta al lado mío y en frente se encuentra el sujeto que cometió el robo.
-– ¿Podrías dejar de apuntarme como una loca? -– dice el sujeto con miedo.
-– No, no confío en ti. -– expreso directa.
-– Bueno, pero al menos ¿Podrías dejar de apuntarle a mis partes? -– me suplica.
-– ¡Okey! -– le apunto directamente hacia la cabeza -– Sólo te aclaro que yo sé perfectamente cuando una persona miente. -– lo amenazo -– Más te vale decir la verdad, si no quieres que te descabece.
Traga saliva -– Cua-cual -– lo interrumpo antes de que termine su estúpida pregunta.
-– Si, de ESA -– resalto está palabra -– cabeza. -– lo amenazo con total seriedad mientras él se lleva sus manos hacia sus partes.
(...)
-– ¿Esta demente o que, Sheriff? -– me pregunta Thomas, luego de salir del interrogatorio.
-– Thomas, ¿Me puedes dejar hacer mi trabajo tranquila? –- me siento en mi escritorio. –- Además, ¿De qué te quejas tu? Le sacamos todo lo que sabia a ese malviviente.
–- ¡Si! Pero no puedes interrogar con es tipo de métodos, Venice. –- me recrimina molesto.
–- Tu ocupate de tus asuntos, yo se perfectamente bien como hacer mi trabajo. –- lo miro amenazante.
–- ¡Okey! Tu mandas. –- traga saliva.
Lo observo detenidamente y me doy cuenta que fui demasiado dura con el niño –- Soy la Sheriff de este pueblo y ¿Sabes como llegue hasta aquí? –- él niega con la cabeza –- La clave, es no dejar que nadie te diga cuantas veces puedes romper las reglas. –- le sonrio.
–- Tu eres muy respetada en este pueblo, por eso puedes darte el lujo de hacer ese tipo de cosas. –- agacha la cabeza desilusionado.
–- Thomas, ¿Cuántos años tienes? –- le pregunto tratando de ser lo más suave posible con él.
–- El otro día cumplí 20 años. –- me informa.
–- Ja! Yo a tu edad, ni siquiera había llegado a ser segundo oficial, como lo eres tu. –- lo aliento. –- ¡Quédate tranquilo que vas por buen camino! –- Él me sonrie. –- ¡Bueno! ¡Nos vemos mañana vaquero! –- él acomoda su sombrero en forma de saludo y yo salgo de la comisaría.
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Mi Mejor Partido
RomanceJeremy Suns, a sus 29 años, es el mejor jugador de fútbol americano del país. Es egocentrico, arrogante, guapo y mujeriego (a pesar de que se casará dentro de seis meses). Según él "Posee la vida, que cualquier hombre quisiera tener". ¿Será tan así...