Capítulo 9.

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Benny en multimedia.

He escuchado tantas veces en mi país natal esa frase de "no tengo sentimientos y soy de piedra", cuando la verdad es que eres una persona tan vulnerable que con solo tocarte un sentimiento ya estás perdido. Sólo que era la primera vez que sentía tanta frialdad en esa voz, era hielo y me asustaba. Sí, haberme devuelto a verle la cara y observar esos ojos azules de bebé pero a la vez del mismo demonio, parecía hacerme caer en cuenta que no estaba hablando ante una chica que podía denominar mi amiga porque no lo era, era Rylie y de buena persona parece no tener algo.

-No entiendo porqué me sorprendo, sinceramente -dije cuando la miré a lo que ella alzó una ceja-. Sólo te diré que tu broma del agua me tomó por sorpresa y supongo que hubiese podido morir de hipotermia pero tu hermano me salvó la vida por así decirlo. No lograste tu objetivo -le sonreí.

-Mi objetivo no era matarte -dijo ella de inmediato.

-Sinceramente no me importa tu objetivo -suspiré y comencé a retroceder para irme de aquí-. Lamento haberte dejado plantada, pero si no tienes sentimiento como dices, no entiendo porqué te afecta mi actitud contra ti -el silencio reinó entre nosotros y vi como presionaba sus labios, abría su boca pero de ahí no salí nada. La dejé sin palabras y eso me hace sentir bien-. Ya que no tengo respuesta pues me iré, después no digas que te dejo plantada -sin esperar respuesta me fui.

Me divertía mucho, demasiado pero me quería ir de aquí. No me pensaba engañar y decirme "Wow Corey, no te interesa Rylie", cuando la verdad es que sí me interesa y de vez en cuando ella viene a mi mente, pero me parece bastante emocionante hacer mis salidas dramáticas y hacer de cuenta que esto se quedará así cuando ella no sabe que también se metió con un chico que le gusta jugar, de pronto así lograré que me saquen de aquí.

-¡Corey! -escuché que gritaron atrás mío-. Espera un segundo.

-¿Sí? -dije cuando vi a Ben.

-No entiendo qué pasó -dijo y reí.

-No es nada, Rylie me hizo una pequeña bromita que se la cobraré -le guiñé un ojo.

-Veo que están muy unidos -murmuró y agachó la cabeza.

-¿A qué te refieres? -fruncí el ceño.

-Me refiero a que temo que ella te esté influenciando para abandonarme -dijo en voz tan baja que apenas le entendí.

-Creo que no tienes derecho a opinar, ¿sabes? -lo miré mal-. Tú fuiste quien me metió mucho cuento sobre tu accidente y ahora Rylie y yo estamos unidos gracias a que a ti te dio por mentirme...Deberías de saber que odio las mentiras y a las personas que me las dicen.

-Al menos eres sincero -miraba al suelo.

-Es una de mis virtudes -sonreí-. Y por mi trato no te preocupes, no soy una persona que se deje influenciar fácilmente, sólo te mantendré al margen, nuestra amistad tuvo un bonito principio y un trágico final -en ese instante me acordé del meme que vi en instagram-. Muy rico y todo pero no eras lo que esperaba.

-Dame otra oportunidad -fui la primera vez que me miró a los ojos.

-¿Disculpa? -dije en español pero luego se lo repetí en inglés.

-Sí, perdóname, puedo ser un gran amigo, lo puedo intentar. Siento que te debo algo por salvarme de cierto modo -suspiró y cerró los ojos-. Lamento haber mentido en serio.

-Que rápido piensas que se perdona -digo con los ojos abiertos.

-Yo sé que no se perdona rápido pero todos merecen una segunda oportunidad -agachó su cabeza y luego me miró seriamente-. Puedo ser un buen amigo, en serio.

Era extraño, esto nunca lo había vivido, de cierto modo me sentía como una chica y eso me daba escalofríos. Por otro lado, Benny tenía razón, porqué no una segunda oportunidad, yo tenía la gran especialidad de hacer buenas personas, podía lograrlo.

-Okay -dije al final-. Esto se vuelve muy raro e incómodo para mí -sonreí incómodo-. Te doy una segunda oportunidad, si así lo quieres.

-¿En serio? -me miró bastante raro-

-Claro -le golpeé el hombro.

-Vaya, gracias -dijo y se hizo a mi lado-. Cambiando de tema, tengo curiosidad... ¿Te gusta Rylie? -eso me tomó fuera de base, abrí mi boca para responder pero era algo que sinceramente no le tenía respuesta.

-Supongo que gustar no, sólo me interesa o más bien me llama la atención en la forma en que me intenta sacar de quicio haciéndome bromas pero nada más.

-Entonces sí te gusta -dijo en modo de confirmación y yo tragué en amargo.

-Supongo.

-Eso es difícil para mí de asumir -rió sin gracia-. Lo siento pero con esa chica no creo que pueda ayudarte.

-Oh, no quiero ayuda, si algo debemos de tener las cosas se darán solas -dije con desdén.

-Claro, el día que quieras hablar de la chica conmigo lo puedes hacer -sonrió.

-De hecho si me puedes ayudar con algo de lo que no te daré créditos para que no ganes más problemas con los Ry -dije uniendo alguna broma sencilla en mi cabeza pero no había aún algo concreto.

-¿Es algo bueno? Porque en serio me asusta hacer algo mal que dañe la paz que llevan con todo el instituto -dijo rápidamente y yo reí.

-No te preocupes, yo me echaré toda la culpa.

(...)

Llevaba unas cosas que necesitaba para mi pequeña broma pero algo en el pasillo me había retrasado bastante, un pequeño mojado suelo que me hizo caer, no entiendo dónde dejaron el aviso amarillo de "cuidado, suelo mojado", y eso me daba un poco de rabia pero daba igual, nadie me vio.

Pero estaría seguro que mamá me llamaría chismoso en este momento por lo que me encuentro haciendo porque nunca hago esto pero aquí estoy atrás de unos casilleros oyendo una conversación que no debería pero las dos voces que son partícipes me obligan a escuchar.

-No creo que sea posible que yo haga eso... -decía la voz en susurro de Rylie.

-Tienes que hacerlo, no tenemos más opción -le respondía Ryan-. Pronto termina el año y podremos librarnos de todo este infierno.

-El precio es muy alto Ryan, en serio eso me va hacer sentir más despreciable de lo que yo me siento -escuché que se escapaba un sollozo de sus labios y eso me puso la piel de gallina.

Tenía que salir de ahí en serio, creo que no era de mi incumbencia saber el infierno en que esos dos se habían metido, sólo tenía seguro que aún tenía tiempo de salir de la vida de esos dos. Mi vida sin ellos estaba perfecta...

...Pero qué sería la vida de Corey Clayton sin un poco de riesgo como el que se me acaba de presentar. Mi corazón y mente gritan que salga de ahí antes de que algo muy malo pase, los dos están de acuerdo pero mi alma grita que no, qué sería de mi personalidad si no desobedezco cada advertencia. 

Así que con una sonrisa en mi rostro salgo de los casilleros sin que los Ry me vean y decido tirarme al abismo para acercarme más a lo que le da emoción a mi corazón.


Los Hermanos RyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora