El nuevo || Minsung

[05]

El sábado ya había llegado y digamos que Felix estaba a punto de hiper ventilar, él pobre rubio se estaba comenzando a arrepentir de haber tenido él celular en esa posición y maldecía su cara por ser ella la que envió él mensaje [al momento en él que él celular le golpeo claro] si no fuera por eso, se abría librado de todo él lío que estaba pasando en su cabeza en estos momentos.

¿Asi se sentía estar estúpidamente enamorado?

Porque Felix jura que jamás en la vida se había sentido tan idiota con respecto a un chico, jamás le había dado un flechazo en él corazón a primera vista; él rubio no creía en el amor de esa manera y mucho menos imagino que algún día iba a estar casi temblando solo por verse con una persona, pero en él momento en que vio a MinHo entrar al aula, sonriendo tímidamente, hablando súper bajo y con ese ligero rubor en las mejillas, se salió de todas sus casillas y juro ver a la perfección hecha en persona. Supo que desde ese día iba a cambiar completamente.

Porque MinHo hizo delirar a Felix, eso sin duda. Pero él rubio seguía pensando que solo era una simple atracción, que lo que sentía por su hyung se le iba a pasar en unas cuantas semanas más.

Sin embargo, desde que vio que JiSung se mantiene como garrapata encima de MinHo, comenzó a creer que tal vez no iba a tener tanta oportunidad con él. Por él amor de Dios, JiSung aparte de ser popular, era sociable, amable, lindo, se llevaba bien con todos y hacia suspirar a más de una chica. Era algo así como él chico de tus sueños, súper guapo e inalcanzable. Y comenzaba a creer que no solo él le había puesto él ojo a minho. Felix es una persona muy observadora aunque no lo parezca.

JiSung ha sido su mejor amigo desde que entraron a ese instituto, prácticamente. Cuando él rubio llego como nuevo ingreso, podría jurar que era igual de tímido que MinHo. Bueno no, exajera. Pero si tenía pena para todo, en especial para hablar, ya que como es extranjero, todavía le costaba él idioma coreano en las pronunciaciones de las palabras y no se había adaptado del todo.

Su mejor amigo fue él único que no lo forzaba a hablar, el lo comprendía y no le decía cosas que lo pusieran triste o incómodo tipo: "Haber nuevo, decime la palabra dirección" o también "¿Es cierto que te cuesta él coreano? Pff, ridículo ¿Para que vienes a vivir a un lugar al cual cuyo idioma no sabes hablar bien?"
JiSung le tenía paciencia, había sido muy amable con él y de ahí creció una linda amistad.

Se volvieron inseparables, eran como uña y mugre.

Claro que después se les fueron uniendo los otros seis animales de sus amigos. Y actualmente su ángel: MinHo. Debido a esto no quería tener "rivalidad" con JiSung, Felix desde ya se declaraba el perdedor. Había visto como MinHo se sonrojaba con la cercanía de JiSung, como sus ojitos brillaban cuando este le defendía del resto de su aula por burlarse de él -tal como alguna vez le paso a Felix- como MinHo parecía tan seguro a lado de JiSung. No se quería meter entre ellos dos, Felix no es de ese tipo de personas, así que fue eliminando de apoco sus esperanzas. O almenos eso quería intentar.

Todo por no querer salir herido, así como en su pasado lo fue.

De igual modo le había escrito ese mensaje al peli negro, mandando toda razón a la mierda. Por primera vez quería ser él motivo de las pequeñas risitas de su hyung. Por primera vez no quería ver que ese motivo era JiSung. Quería ser él.

Y por eso en estos momentos se encontraba dando vueltas en su habitación, debatiendose mentalmente si cancelarle o no a último momento, y todo por los malditos nervios. Aparte de que no se sentía seguro del todo. ¿Quién lo diría? Felix nunca se había puesto así solo por salir con un amigo.