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LA RUBIA MIRABA POR ENCIMA DE LAS CABEZAS DE LAS PERSONAS, tratando de localizar a su castaño amigo. Llevaba un par de minutos esperándole pero era muy desesperada. Por lo cual no tardo en mandarle varios mensajes al chico.
Go Flex de Post Malone se escuchaba a travez de sus audífonos. Sus ojos azules se encontraban con unas ligeras ojeras debajo de estos, no había podido descansar las 7 horas de vuelo. Había preferido ver las películas de Harry Potter, solamente alcanzó a ver dos, por lo que seguiría viendo las que faltaban cuando llegara a la habitación del hotel. Clary amaba Harry Potter.
Soltó un gran bostezo para después sentir unas manos cubrir sus ojos.
— ¿Quien soy? — Pregunto la persona fingiendo voz de Batman.
— ¿Tony Stank? — Pregunto la chica.
El chico quito sus manos de su rostro para ponerse frente a ella.
— Soy ¡BATMAN! — Volvió a imitar la voz. Causando que la rubia sonriera divertidamente. — y sabes le informaré a los Russo que volviste a decir un spoiler...
— ¿Que spoiler? — Pregunto fingiendo que no sabía la chica. — No se de que me hablas tommy. Oh espera. ¿Escuchaste eso? Si, es mi estómago pidiendo comida y mi mente pide dormir.
— Solo por esta te salvas — Sonrió Tom. — Venga Haz no está esperando en el auto. Además te tengo una sorpresa.
— ¿Haz? ¿Sorpresa? — Pregunto la rubia comenzando a caminar.
— Ya lo verás — Aseguró Tom tomando el equipaje de la rubia.
— Puedo sola, ¿sabes?
— Y me consta. — Sonrió Tom arrugando un poco sus ojos.
Clary se dedicó a seguirle, antes de que llegaran al auto, un par de fans los detuvieron pidiendo un par de autógrafos y fotos.
— Hola pequeña — Saludó la rubia a una niña de al parecer 10 años. — ¿Una foto?
La niña negó con la cabeza. — Solo quiero un abrazo.
— Oh — Soltó sorprendida la rubia. Pero se dedicó hacer lo que la niña pidió.
Tom se dedicó a observar a su amiga con una sonrisa. Era buena con sus fans. Ojalá así hubiera sido con el desde un principio.
— Gracias. — Se despidió la niña con una gran felicidad.
— A ti. — Murmuró Clary.
Se alejó de ahí un poco consternada.
– ¿Estas bien? — Pregunto Holland abriendo la puerta del auto.
— Si, es solo que muy pocas veces pasan estas cosas. — Responde la rubia mirándolo con sus orbes azules. —Es lindo.
Y subió al auto. Su cuerpo fue aventado un poco hacia atrás al sentir a alguien subirse sobre ella.
— Veo que le agradaste a Tessa. — Soltó una voz desconocida.
La rubia abrió los ojos sorprendidos viendo al perro frente ella. Era Tessa.
— Así que tú eres Tessa eh — Comenzó acariciarle todo el cuerpo. – No sabes cuánto le hubiera gustado a Toto conocerte. — Su mirada cambio hacia un chico que desconocía.
— Soy Harrison, pero dime Haz. — Saludó un chico de ojos azules y cabello un tanto rubio. Era lindo. Demasiado.
— ¿Todos los británicos son así? — Pregunto Clary en voz alta.
Demonios, pensó.
— ¿Como? — Pregunto Tom desde el asiento delantero poniendo andar el carro.
