Harmione - One shots

Te fuiste de aquí...

Aún recuerdo lo que sentí esa noche... Tus palabras eran música para mis oídos, Harry, tu también me amabas...

—Hermione, me duele verte triste porque te amo. Nunca te lo he dicho porque sé que Ron te ama, pero no puedo seguir ocultando esto, yo... Te amo con toda mi alma, te amo desde que somos unos niños, siempre he odiado verte sufrir por Ron. Cuando me di cuenta de que le gustabas tuve que hacerme a un lado, traté de fijarme en Cho, en Ginny, pero cada vez que te veo con él me hierve la sangre como no tienes una idea, Ron tiene razón, te amo, lamento que sea tan tarde para decirtelo.

Pero no era tan tarde, te besé, yo también te amaba. Esa noche nos entregamos el uno al otro sin dudarlo. Las frases que de pequeña me planteaba no tenían sentido "No hagas amigos", "No tengas amor" No tenía sentido, me preguntaba porqué me las decía, si tú primero habías sido mi amigo, después el amor de mi vida y ahora mi novio.
Esas noches solos ensimismados en nosotros mismos eran las mejores, ir, conseguir comida juntos, era la gloria, estábamos en una guerra, pero estábamos en ella juntos, no nos separábamos el uno del otro, yo ya me estaba imaginando nuestra vida juntos, los nombres de nuestros hijos... Por fin yo era suficiente para el salvador del mundo mágico.
Hasta que llegó Ron... Yo intenté no hacerle caso, te besaba cuando el no nos veía y procuraba decirte que te amaba, tu solo sonreirás y acariciabas mi cabello, todo estaba bien, o eso esperaba.

Pero no... No, no todo estaba bien, o no lo estaría por mucho tiempo, cuando fuimos avanzando en la búsqueda de Horrocruxes solo tenía un temor, perderte, y jamás me pasó por la cabeza que te perdería justo en el momento en el que pisamos Hogwarts.
Cruzamos el retrato y todos aplaudían, todo estaba tan diferente... Me quedé aturdida, pero me quedé aún más paralizada cuando la vi a ella llegar, su cabello pelirrojo, sus perfectas pecas, el comentario de Seamus. Mi mundo se vino abajo al ver cómo le sonreías, me quedé sin respiración y quería llorar, pero no iba a dejar que nadie viese que me afectaba, ni siquiera tú si no te importaba.

Toda la guerra fue difícil, yo trataba de cuidarte y tu de defender a Ginny, no podía más, estaba exhausta, y cuando Ron me besó... Fue raro, diferente, pero no me gustó, yo aún seguía siendo tu novia y él tu mejor amigo, lo aparté de mi... Cosa que tu no hiciste, a ti no te importó besar a Ginny antes de irte, y cuando volviste... Cuando Hagrid te traía en brazos... Mi mundo se volvió a desestabilizar, lloré a mares intentando no creerlo, sabía que no estabas muerto... Y no, no lo estabas, saltaste y derrotaste al señor tenebroso. Una vez todos fuera de peligro fui a buscarte, y te vi correr hacia Ginny y besarla.
Esperé que todo fuese solo la emoción del momento, que esto sólo fuera una simple ilusión creada por el estrés de la guerra, pero no, te fuiste de aquí, sin pensarlo.
Una semana después te busqué para hablarlo...

—¡Harry! ¿Qué tal te fue? —Te sonreí, ibas saliendo de solicitar empleo como auror y por tu cara todo había salido bien.
—Excelente. —Dijiste un tanto distante pero no presté demasiada atención a ello debido a que seguiste hablando. —Sé porqué estás aquí, pero... Herms, ahora estoy con Ginny.

Mi corazón se rompió, pero aún no habías terminado de lastimarme.

—No es lo que quiero, pero es lo correcto, tu debes estar con Ron y yo con ella, ambos lo sabemos, si yo no estoy con Ginny, ellos, su familia, la única familia que he conocido... Nos odiarían a ambos y no quiero eso...
—Harry porfavor no me hagas esto. Podemos ser felices juntos yo lo sé, por favor quedate aquí, yo no sé que haría sin ti... No creo soportarlo.
—Es inútil Hermione, no insistas más por favor, no quiero verte llorar, odio verte llorar, no quiero verte llorar, por mi. Seamos solo amigos, ¿Si? Es lo mejor para los dos...

Miré al suelo y me quedé en silencio, no daba crédito a lo que oía, esto no podía ser cierto.

—¿La amas?

Fue lo único que pude murmurar con la poca voz que me quedaba. Negaste con la cabeza apenado.

—No, no lo hago, jamás podré amarla tanto como te amo a ti.

Dijiste y no pude con tu cinismo, me desaparecí de ahí más rápido de lo que esperabas. Fui al bosque, otra vez era todo diferente, pero esta vez el bosque y hasta yo misma eramos diferentes porque a ambos nos faltabas tu.

Un año... Tan solo un año te fue suficiente... Todo había acabado definitivamente. Gracias a mis presentimientos no había ido en navidad a la casa de los Weasley ese año. Pero igual duele, no se te ocurrió mejor fecha que la nuestra para pedirle matrimonio frente a toda la familia... Lloré, cuando me enteré lloré en completa soledad, la vida me puso junto a ti, nunca pude predecir, que un día yo sería sólo una parte tu pasado...
Te fuiste de aquí y al segundo encontraste otra vida, te fuiste de aquí y enterraste la mía, y aunque no estés, yo sigo respirando este amor, tu recuerdo sigue aquí, como una tormenta incesante dentro de mi, rompe fuerte sobre mi, y quema y moja por igual, y ya ni se lo que pensar, si este recuerdo de lo que un día fuimos me hace bien o para mi es fatal...
Te fuiste de aquí, descubriste otros brazos, borraste mis besos, me hiciste pedazos... Y duele mucho ver El día de hoy... Otro año más, en invierno, en nuestro bosque... Como ahora en tu boda, en nuestro bosque, le entregas a otra el corazón.
Te fuiste de aquí, todos es silencio en mi mente pero todos es un caos en mi corazon, gritos de dolor salen de ahí con tal intensidad que ya no sé si te odio o aún te amo. Pero creo que te amo porque que aún quedan las huellas de nuestro amor.
¿Sabes? A veces creo que sueño que te abrazo una vez más, o tal vez no es un sueño y de verdad estás ahí, pero siempre me despierto y ya no estás...
Me estoy ahogando en el vacio que dejaste en mi alma... Verte en un traje negro y a ella en un vestido largo, no lo merezco, no... No es justo. Aún siento en el aire que me acaricia tu voz, me robaste la luna, el cielo y las estrellas, y hoy todo eso y más se lo das a ella. 
Me estoy muriendo, muriendo por volver a tenerte, agonizando, tan lento... Tan fuerte, cariño mio, sin ti yo me siento vacía, mi vida sin ti es un laberinto, y las noches me saben a puro dolor. Quisiera decirte que me estoy de maravilla, Que no me afectado tu partida, pero con un dedo no puedo tapar el sol. No puedo curar la herida de que le entregaste a ella tu corazón... Y me duele aún más verte decir el, "Acepto." mirándome a los ojos... Pero me duele más que aún así te sigo amando con cada pieza pulverizada de mi roto corazón...