LA LÍNEA [editando]

Capitulo 14

Otra canción comenzó a sonar. Me separe de Henry y me enjugué las lágrimas.
—Vaya...Te he arruinado el traje.—murmuré.
—Ah qué va, no importa.—Rió tocando su hombro mojado.
Sonreí.
De pronto tuve su rostro muy cerca de mi. Podía ver sus marcas de edad, su corta barba me raspaba la nariz; podía ver perfectamente las pestañas sobre sus ojos claros. Su aliento y respiración me provocaba calor.
Me acerqué lentamente a el, dudosa junté mis labios húmedos con los suyos.
Recorrí el contorno de sus suaves labios con mi lengua. Exploré cosas que jamás había sentido. El no se movió ni un poco, solo sus labios tenían el poder de hacerlo.
Se separó de mi unos momentos después.
—Jules...yo...no sé que decir—Vaciló, parecía algo arrepentido, no estaba seguro de que hacer o que decir.
Tomé su vacilar como una forma de decirme que eso había estado mal.
—Oh —Mascullé. —Lo lamento, no quería hacerte sentir incómodo.
—¡No no!—Se apresuró a decir—¡De ninguna manera!
Agaché mi cabeza decepcionada de mí misma.
Me tomó de las manos y luego me levanto el mentón para mirarlo a los ojos —Jules, he esperado ese beso desde cuarto año. —Sonrió.

Ian estaba parado justo a nuestro lado, bastante incómodo por la escena que acaba de suceder. Henry y yo nos miramos avergonzados.
—Ian, creí que estabas con Bella—Murmuré.
Parecía que no estaba en su mente pero al hablarle reaccionó.
—Oh ¡Claro! —Exclamó—Ella... decidió irse a la cama temprano.
—Los dejaré hablar a solas—Dijo Henry con la cara como un tomate. Se despidió con un tierno beso en mi mejilla y se retiró.

—Veo que te la pasas bien—Bromeó Ian un tanto raro.
—Si, claro. —Suspiré.
—Ehhh, venía a hablarte sobre algo.
—Dime.
—Como sabes... mañana escogeré a cinco de ustedes y... quería saber, si querías estar en mi equipo—Dijo mirando hacia otro lado.
—Wow... Ian, no sé que decirte—Balbuceé.
—Si no quieres...
—¡No no! ¡Claro que quiero!
Ante mi respuesta sonrío.
—Gracias.—Puse una mano en su hombro.
— Bienvenida al pelotón 156.

Las explosiones en el cielo comenzaron a destellar en la oscuridad.
Sonriente deje a Ian disfrutar del espectáculo y me acerqué a Gigi para agradecerle.
—¡Fuegos artificiales! ¡es una locura!—La abracé.
—Jules llama a Grace—Dijo desconcertada.
—¿Por qué?
—Esos no son fuegos artificiales—Dijo Ian sacando su portátil del bolsillo.
—Por los Cielos—Murmuré mirando las explosiones que se dirigían a nosotros.

Todos los agentes en la fiesta
comenzaron a correr hacia sus casas para cambiarse el elegante atuendo, por uno de combate.

—¡Vamos!—Me jaló Majo hacia la casa.
Corrimos e inmediatamente me subí para vestirme. «Vaya graduación» pensé.
Cuando bajamos la gente ya estaba tranquila, y Grace había llegado en su brillante auto plateado .
—¿Que sucedió?—Pregunté.
—El gobierno Norteño, eso es lo qué pasa—Espetó Grace enfadada.
—Pero...
Me interrumpió con una señal y llamó a Ian con la mano.
—Junta a tres agentes graduados, y un capitán, irán a la zona de los Despojados inmediatamente. Traigan a Isaac.
Ian asintió y movió su cabeza para que lo siguiera.
—Llama a Henry, irá con nosotros—Dijo mientras sacaba su portátil, buscando el contacto de Bella.

Busqué entre la multitud, llamando por su nombre entre gritos. De pronto Henry me tomó de la mano y me llevó a donde estaba menos concurrido.
—¿Que sucede? ¿Estás bien?—Preguntó alarmado.
—Claro, ni un rasguño. Pero hay algo más importante.
—¿Algo más importante que tu? Pff—Bufó.
—Henry, te necesitan en un explore.
Abrió sus ojos como platos y comenzó a reír a carcajadas.
—¡Lo logre!—Rió levantándome en sus brazos y dando vueltas— ¡Pude convencer a alguien!
—Nos vamos ahora
—¿Vamos? ¿También te seleccionaron?¿como? —Preguntó confuso.
—Que no te sorprenda, tonto.
–Bueno y ¿A donde vamos?
—A la zona..hmm—Dude de mis recuerdos— Algo sobre algún Isaac.
Henry abrió los ojos como platos y tragó saliva ruidosamente.
—¿A la zona de los Despojados?
—¡Exacto!
—Oh Jules no dejaré que vayas a ese lugar—Murmuró casi inaudible.
—¿Y por qué no? Soy la mejor de mi clase—Presumí.
—Jules, ahí es donde mandan a todas las personas que cometieron crímenes, ¡de todo el mundo!.
—¿Que? ¿Y como es que jamás he escuchado de ella?
—Solo es para Los crimínales más peligrosos, Isaac es uno de ellos.
—Claro que ire, no me perderé mi primera misión.
Henry puso los ojos en blanco y estuvo a punto de replicar cuando Ian, Bella y otro chico apareció.
—¿Vamos? —Dijo Ian con tono serio.
—Por supuesto.

Caminamos hasta la base, donde Grace estaba estresada al máximo, enfadada como nunca.
—¿Ya están preparados?—Pregunto mientras veía sus hologramas con impaciencia.
—Así es—Contestó Bella. Tenía el cabello recogido en un moño, como cuando la vi por primera vez, bajo sus ojos había dos grandes líneas moradas, se veía cansada pero decidida.
—Bien, toma—Extendió su largo brazo, y le dio unas pequeñas pulseras a Ian.
Ian se dirigió a nosotros y nos dio una pulsera a cada uno.
—Tenemos motocicletas, pongan sus huellas dactilares aquí, y ellas responderán a ustedes.—Dijo mientras nos mostraba cómo hacerlo.
Después de colocar las huellas, nos despedimos oficialmente de Grace.

Salimos callados en la fría noche. Estaba emocionada, exaltada, al fin serviría para algo.
Al llegar a la puerta Gigi y Majo me esperaban impacientes.
—¡No sabía que te irías!—Me abrazó Majo preocupada. Apreté su cuerpo con cariño y luego me separé de ella.
—Estaré bien—La consolé acariciando sus rizos castaños.
Por otro lado Gigi estaba al borde de las lágrimas.
—¡No y no!—Gritó como una niña—¡Eres inexperta aún!.
La abracé con lágrimas en los ojos.
—Tranquila, lo hiciste bien.
—Cuídate mucho—Me plantó un beso en la gente y me acarició la mejilla.
Asentí y llamé a la motocicleta.
Llegaron solas como rayos, plateadas y eficientes.
Me subí, coloque el casco y me despedí con la mano de mis nuevas hermanas.
El resto del pelotón 156 hizo lo mismo.

Corrimos por la costa hasta el aerodeslizador que se nos fue asignado.
Entramos y estacionamos las motos. Subimos al área de control, dirigiéndonos hacia la isla donde se encontraba la zona de los Despojados.