(19)
—Tengo la mejor idea de todas, mi querido Tae.
Miré en sus ojos y vi el reflejo de la luz solar en sus ojos, lindo lindo color miel.
—Dime cuál es. — sus labios están llenos de jalea de fresa y en su boca se encuentran todavía trozos de panqueque.
—Cuando me sentía un poco triste, iba a un alcantilado cerca de aquí a ver el atardecer y así podía sentir que tenía un lugar en el mundo, ¿Quisieras venir conmigo?
Sonrió, y alegremente asintió con la cabeza.
—¿Cómo se te ocurrió ir allí? Digo, hoy en la noche nos vamos, ¿Por qué lo dices hasta ahora? —su mirada curiosa observaba mi torso desnudo, levantó la mano para trazar círculos en mi hombro y sus ojos subieron de repente a mis labios. Aproveché su pequeña distracción para pasar mi lengua sobre mi labio inferior.
Entonces su mano pasó a mi cuello y me acercó a él para besarme. Un beso suave, lento y profundo. Segundos y minutos, nunca me cansaré de sus dulces labios.
—Anoche soñé con ese lugar y apenas pude recordarlo, simplemente se me ocurrió. Si te parece mala idea está bien, descansemos hoy.
—No, no... Deseo estar contigo, sólo contigo.
"hizo tu cuerpo alegre, tus luminosos ojos y tu boca que tiene la sonrisa del agua."
Ya estando en el alcantilado, pudimos ver algunos pajaritos saltando de árbol en árbol, un par de ciervos caminando cerca al lago buscando agua.
Estábamos sentados en la punta del alcantilado, con nuestros pies en el aire y disfrutando del aroma de la naturaleza.
Nuestras manos están entrelazadas, acaricio sus nudillos mientras veo como disfruta del sonido del aire con los ojos cerrados.
—Esta fue una idea genial, cariño.
Me dice aún con los ojos cerrados, los abre de a poco y veo como el sol hace que sus ojos se vean verdes. Le sonrío.
—Lo fue.
Recostamos nuestras espaldas sobre la roca, Tae busca mi pecho para poner su cabeza. Deshago el enlace de nuestras manos para ayudarlo a ubicarse. Comienzo a acariciar su suave cabello.
"Mi corazón sombrío te busca, sin embargo, y amo tu cuerpo alegre, tu voz suelta y delgada."
—¿Sabes algo, JungKook?— se levanta apoyándose sobre mi pecho, y me mira a los ojos. —Nunca me había sentido tan bien con alguien.
Sonrío al igual que él, pero hay algo extraño en sus ojos. Agua.
—Pero incluso así, nunca podré ser feliz.
Mi gesto cambia, no le entiendo.
—¿Sabes? Las personas a veces suelen ser muy crueles, incluso aquellas a las que le tienes tanta confianza, tanto cariño, tanta fé. No es tu caso y me siento satisfecho así. Pero sentir que no tienes apoyo de aquellas personas que te vieron crecer, que no creen que puedes crecer en un proceso que te están enseñando en el trabajo, cuando sientes que nada te motiva, cuando sientes que no tienes vida... Nada vale la pena. Tú sí vales la pena, pero...
Mis ojos comenzaron a aguarse, sentía que el alma se me estaba yendo. Que no podría volver a hacer nada más después de las cosas que me habían hecho a estar aquí y después de quien me ayudo en el proceso se fuera como si nada.
—Tú no me mereces a mí, estoy perdido en un lugar lleno de sombra y sangre. Tan contaminado por mí mismo que aunque lo intentes, volveré al mismo lugar, con las mismas costumbres y el mismo pensar.
Se levantó, de pie miró como el atardecer se ponía tras las montañas. Sonrío con lágrimas en los ojos y me miró.
—Siempre he querido hacer esto.
Yo me incorporé, expectante a lo que quería hacer. Se agachó para que nuestros rostros quedaran al mismo nivel.
—Pero primero necesito que sepas, JungKook, que te amo. Y me diste felicidad instantánea.
Me besó, y lo besé como nunca antes. Acomodé mi mano en su nuca, haciendo la inútil señal de que no se fuera, intentando agarrarme a lo más preciado. Pero simplemente se movió y salió a correr.
"Un sol negro y ansioso se te arrolla en las hebras de la negra melena, cuando estiras los brazos."
Mi mirada quedó fija hacia el lago, donde hace más de una hora se lanzó Tae. Y no volvió a salir.
Bajé, queriendo recuperarlo. Abajo no lo vi, arriba tampoco. Se fue y ya no hay vuelta atrás.
Los ojos me arden, siento mi cuerpo débil y ya no tengo una razón para vivir. Ya no tengo una motivación. Si vuelvo a Seúl sólo seré un estorbo para mis amigos, no tendré de dónde vivir.
La vida es más fácil cuando se carece de ella.
Uso mis últimas fuerzas para levantarme, me hago en la punta del alcantilado y levanto la vista, miro las estrellas para que iluminen mi camino hacia Tae.
Voy por ti. Y espero encontrarte.
"Eres la delirante juventud de la abeja, la embriaguez de la ola, la fuerza de la espiga."
Las lágrimas casi no me permitían ver la carretera, sólo quería llegar a aquel lugar tan especial. Recordar su sonrisa, su aroma, su rostro. Recordar cómo era cuando lo conocí.
2 kilómetros para llegar, el radio prende solo, debió ser el pequeño salto que di, tal vez algunos cables se movieron.
—En últimas noticias, fue hallado el cuerpo de un joven en el Lago MinSing, en Busan, hace un par de horas. Los médicos forences no han querido dar muchos detalles, pero por las condiciones en las que se encuentra el cuerpo su hipótesis es que se trató de un suicidio.
Tae, espero que tu cuerpo vaya con quienes más amas, pero tu alma es mía.
Acelero, entre más pronto más fácil lo encontraré.
Un par de calles y allí estaré.
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"Poems..." ↝ JK & TH ↜
Fanfiction"Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos." Y Taehyung cantaba en su oído, y Jungkook durmió. "Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido." Y Taehyung se fue. Y Jungkook se fue. . . . ∆ La obra es completamente mía, pero le debo la insp...