El amor a veces es tan complicado, así como otras veces no lo es. Lo normal, lo simple y fácil aburre muy rápido y mucho de nosotros sin darnos cuenta nos llegamos a complicar tanto y a complicar todo de una manera tan increíble. Tratando de arreglar algo que no tiene arreglo, tratando de conseguir una respuesta a cada pregunta que pasa por nuestra cabeza. Creo que es más el hecho de que en el interior todos somos algo melodramáticos y queremos, de alguna manera, sentir que nuestra vida romántica es tan trágica y complicada que las de las telenovelas.Entendí todo eso dos días después de mi llegada a Tailandia. Aquella suavidad en mis labios, aquel calor reconfortante recorriendo todo mi cuerpo, aquel olor dulce embragiandome, aquella suavidad en mis manos. Allí, en ese instante supe que había sido una tonta todo este tiempo.
—¡Lisa!
Me desperté y mire Jisoo sonriéndome como siempre mientras sostenía dos taza de, lo que intuí debido al olor, café en sus manos. Esta chica es el epítome de la felicidad.
—¿Qué haces despierta tan temprano, unnie?
—Bueno, no estamos aquí de vacaciones ¿no? Vamos, tenemos una entrevista. Luego Unnie dijo que podremos pasear o ir a tu casa a ver a tus padres.
Sonreí ante sus palabras ¡eso sonaba fantástico! Pues sentí que el día anterior había pasado muy rápido y las horas que pasé con mis padres fueron mas bien minutos.
Mas animada que nunca de estar nuevamente en mi hogar y sentir la calidez de este mismo, me levanté, tomé un sorbo del cafe que Jisoo me extendía en aquella pequeña taza blanca y luego se lo devolví de nuevo. Para luego disponerme a buscar mi telefono, pues quería avisarle a mi madre de mi visita para fueran preparandose para recibirme con esos platos deliciosos de mi padrasto que tanto había hechado de menos, y obvio, para que Jisoo supiese lo que es buena comida en realidad.
—¿A quien llamas? —Me preguntó Jisoo al verme marcar con rapidez en el telefono y colocarmelo en mi oreja una vez lo encontré entre las sabanas. La miré y podía imaginarme cuan radiante y grande era mi sonrisa al verla sonreírme con calidez, casi sentía que era mi segunda madre.
—A mamá, voy a decirle que mas tarde iremos para allá a cenar.
Estoy tan cansada, dios, pensé que sería solo una entrevista, pero había sido una sección de fotos también. Bueno, al menos ya salimos y ahora estamos llegando a la casa de mis padres. Estoy tan emocionada, apesar de que los vi ayer y pasé 6 horas con ellos, siento que nos no alcanzó el tiempo para hablar de todo, para deleitarme con sus risas y sus abrazos.
Al llegar Jisoo y yo bajamos del auto junto a nuestra manager. No puedo evitar caminar rápido hacia la entrada de mi casa, mi sonrisa se hace más grande y los latidos de mi corazón se vuelven más rápidos. Hasta que algo, o más alguien me detiene en seco.
—¿Donde estás? Estoy afuera esperándote.
Su voz, oh, su preciosa voz jamás podría compararse escucharla en persona que por línea telefónica. Su voz que me hace estremecer y mi corazón detener, esa voz que resonaba constantemente en mi mente pronunciando mi nombre en mis momentos de soledad.
Me armo de valentía y miro a dónde provenía aquella voz que yo tanto amo y entonces la vi.
Ella, saliendo de su casa tan hermosa como siempre. Su rostro tan perfecto, su cabellera larga suelta como le gustaba a la mayor, con sus ojitos pequeños mirando sus pantuflas de aquel juguete de la película de "Toy's Story". Un puchero se forma en sus labios mientras sostiene su teléfono en su oreja, parecía estar escuchando lo que la otra persona decía a través del teléfono. Y esas mejillas, ugh, esas mejillas llenitas que siempre me provocaba besar y pellizcar sin piedad. Su atuendo no era para nada glamuroso, aunque todo lo que se pusiese pareciera que así fuese en realidad. Pero de hecho, parecía que acaba de despertar, pues traía aquel pijama que le regalé la navidad pasada y que es secretamente un pijama de parejas.
Me le quedo mirando por lo que parece ser una eternidad y es que no puedo dejar de hacerlo, mis ojos están encadenados a ella y es tan difícil quitarme estas cadenas, aún más cuando en realidad no quiero hacerlo. Mi corazón comenzó a latir aún más rápido, la sangre subiendo a mis mejillas sin razón aparente y mis manos aprieto en puños al sentirlas picar tan mal por querer sostenerla en mis brazos, por querer agarrar su rostro y hacerla mirarme a mi y solo a mi.
Puedo sentir la mirada de Jisoo en mi persona, se que sabe que ella es Jennie, de la chica que le hablé y le dije todo lo que debería de decirle a Jennie, la chica que aparece en el 60% de imágenes en mi galería. Ella lo sabe, por eso siento su mano en mi hombro queriendo reconfortarme y su voz llamándome suavemente.
—Lisa...
Pero no puedo quedarme aquí parada, necesito... Necesito abrazarla, necesito...
Bajo los escalones alejándome de Jisoo y mi manager, quien parecía estar mas pendiente de su celular que de nosotras, y me dirijo lentamente hacia Jennie, mi preciosa Jennie. Quiero disfrutar de la vista, quiero darme el tiempo para llegar a ella, contemplarla desde lejos nunca se me había hecho tan placentero como lo es ahora.
La adrenalina sube por mis venas, siento mis manos temblar y mi corazón siguiendo latiendo ferozmente en mi pecho, mis propios latidos aturdiéndome.
Jennie despeja su vista de la calle, mira el auto en el que vine y lentamente, como si fuese en cámara lenta, ella posa sus ojos en los míos. Su boca se abre lentamente y sus ojos parecen brillar y abrirse un poco mas al verme. Entonces, sin parpadear o moverse tan siquiera, deja caer su celular al suelo, sus ojos jamás dejando los míos a pesar de escuchar como el aparato caía al suelo.
—Lisa...
Jennie baja los escalones de la entrada lentamente, sus ojos volviéndose mas brillosos ante las lagrimas eminentes, pero en su mirada se podía notar la incredulidad ante lo que veía, pero cada vez que me acercaba mas a ella, mis pasos acelerándose al ver como lagrimas comenzaban a caer en sus mejillas, su mirada cambiaba a una diferente, una que no puedo explicar, pero sus ojos se agrandaron y, antes de que me diera cuenta, ya la tenía entre mis brazos.
—¡Lisa!
Sus sollozos son fuertes y su respiración errática, pero no es la única, pues no pude evitar soltar mis lágrimas al verla frente a mi, al por fin sentirla en mis brazos, al por fin sentir su corazón latiendo junto al mío y oler su dulce aroma.
—Estas aquí... Estás aquí. No es un sueño... ¿Verdad?
Su voz golpeando mi cuello me hizo estremecer. La apreté aún más en mis brazos y después de depositar un beso en su cabeza le susurro un bajo:
—Aquí estoy, Unnie. Contigo, ahora y por siempre.
*
BUENAS NOCHES, CHAMAAS
Miren quien regresó 😁✨Vine con drama y más drama. Al menos por fin se encontraron de nuevo😭💕
¡Bueno, espero que les haya gustado! No olviden comentar y hacerme saber sus opiniones. 😘❤️
Pd: casualmente se reprodujo en mi playlist "A year without rain" de Selena Gomez y quedó tan perfecta esa canción con esta historia que quedé loca. 😂😂
Así que esa es la canción oficial de esta historia. 😁👌🏻
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Aʟʟ I ᴡᴀɴᴛ | 𝐽𝑒𝑛𝑙𝑖𝑠𝑎
FanfictionLisa tiene una agenda muy ocupada y Jennie un corazón roto. • Advertencias: » Relación homosexual. » Capítulos cortos.