Os fuisteis de la piscina ya tarde.
Estuvisteis en la pequeña sala hasta que cada uno subió a sus habitaciones.
Sólo quedaban Julia y Liam.
Empezaron a besarse apasionadamente.
Liam desabrochó la camisa dejando al aire su perfecto abdomen.
Liam metía las manos bajo la camiseta de Julia.
Julia lo interrumpió.
-Quizás sea mejor que continuemos en la habitación.
Liam sonrió y llevó a Julia de la mano en la habitación.
Entraron y Liam cerró la puerta. Apoyó a Julia contra ella, y Julia lo llevó hasta la cama.
Él se posó sobre ella sin dejar caer su peso.
Se metieron bajo las sábanas y Liam empezó a besar el cuello de Julia, y a morder su oreja. Julia no pudo contener un pequeño gemido.
Liam le quitó la camiseta, y más tarde el sujetador, y comenzó a besar sus pechos.
Más tarde los dos estaban sin ninguna prenda de ropa.
Liam dió un pequeño beso a Julia y sobre sus labios preguntó:
-Estás...¿segura de esto?...
Julia sólo sonrió y lo terminaron haciendo.
Julia al principio notaba un poco de dolor, pero el dolor desapareció y empezó a sentir placer.
Liam suspiraba muy rápido, y ella gemía; sobretodo, cuándo éste besaba su cuello.
Terminaron y él cubrió a Julia con tu camiseta y ropa interior.
Se colocó los boxer.
Estaban los dos abrazos, mirándose.
Liam le daba pequeños besos al rededor de la boca.
-¿Estás bien, te he echo daño?.- Preguntó él.
-No... ha ido todo bien.- Julia sonrió.
Él la besó y quedaron dormidos.
