La hermana de Niall Horan ➳One Direction

Capitulo 25

Narra Samanta

Me recosté en el sofá de mi casa con pesadez y bloqueé el teléfono tirándolo a un lado, ya había comenzado a recibir bombardeos en mis redes sociales desde que Harry y yo comenzamos a salir juntos públicamente y más cuando confirmamos nuestra relación oficialmente, pero ahora que Harry confirmó mi embarazo todo se había vuelto aún más loco, habían pasado solo unas horas y ya veía mi cara en todos lados, especulaciones diciendo que era de Luke y cuanto chisme se les ocurría.

A eso hay que sumarle las decenas de mensajes que tenía de los chicos de 5 seconds of summer, de mis amigos y de familiares que ni recordaba tener.

Intenté alejar los malos pensamientos de mi mente y respiré profundo mientras acariciaba mi barriga intentando relajarme.

Sentí que Harry se sentaba junto a mi y abrí los ojos encontrándome con la mirada preocupada de mi chico con rulos, le di una media sonrisa acariciando su mejilla y empezó a acariciar mi barriga.

- ¿Estás bien?

-Sí-asentí- Ya me estoy acostumbrando a las especulaciones y los insultos, no te preocupes.

-Lo siento, de verdad. -me miró triste y negué con la cabeza

-No te preocupes cariño, estoy bien, es imposible que todos estén contentos.

-Si supieran lo maravillosa que eres te querrían más que a mí.

-Pues mejor que no lo sepan, a ver si luego viene otro hombre más guapo y fuerte y me enamora.

Frunció el ceño y negó con la cabeza.

-Ni se te ocurra, tienes a mi hija adentro, ya de mi no te libras en la vida.

-Genial, porque tu tampoco vas a librarte ya de mi-reí y le di un beso en la nariz- ¿Ya tienes todo listo?

Volvió su mirada triste y asintió con lentitud.

-Si... ya está.

-No estés triste, estaremos juntos de nuevo en un par de semanas. -le sonreí, pero el a mí no-Amor vamos, no te pongas así.

-Es que no quiero irme, no entiendo por qué no puedes venirte conmigo-lloriqueó. – No quiero dejarlas solas Sam, en serio.

-Oye todo estará bien, solo quiero aprovechar los mimos de mi familia antes de irme, además, tienes que ver la casa que acordamos-asintió con cara de niño regañado. -Anda quita esa cara.

-Te dije que podíamos quedarnos en mi casa mientras encontrábamos una que nos gustara, pero no quieres.

-Harry por favor, ya lo hablamos.

-Está bien, está bien. Pero dos semanas-me apuntó con un dedo.

-O 3. -lo miré y frunció nuevamente el ceño- Amor que voy a irme, deja de presionarme, de todas maneras, a las 30 semanas ya no puedo viajar. Así que lo haré antes de cumplirlas, no te preocupes ¿ok?

-Te voy a estar vigilando, lo sabes, ¿no?

-Que sí. - me miró no muy convencido y se puso de pie.

-Ven vamos arriba a ver una película.

- ¿Película? -lo miré con una ceja enarcada, el soltó una carcajada y me tomó la mano para ayudarme a ponerme de pie.

-Para todo hay tiempo-sonreí como niña pequeña sin mostrar los dientes y lo acompañé arriba, yo no quiero ver una película.

Escuché la alarma sonar y me quejé con pesadez, era hora de que Harry se fuera.

Me tallé los ojos comenzando a despertar y me cubrí con la sábana mirando un poco desorientada mi entorno, Harry estaba saliendo de la ducha con una toalla en su cintura, sonreí con picardía y rio cuando me vio.