Es mi turno, Lady Castle.

431 14 3
                                    

Al día siguiente ya en la mañana, Kyle y Camille se encontraban un tanto más tranquilos.

Aún no entendían porque habían dejado libre a Kyle, pero lo bueno era que ya estaba allí.

Ambos se encontraban mirándose frente a frente, conversando de Angelique, de lo mala que podía ser. Luego de esa corta charla, almorzaban una deliciosa comida preparada por la dulce Camille.

-Kyle...

-Dime

-¿Ya conseguiste el dinero...?

-Hey... Se fue mi apetito-, dijo Kyle dejando sus cubiertos sobre la mesa-,... Ah, no es fácil-, suspiró mirando al horizonte-, Si no pago esta semana, las cosas se vana  complicar y... 

En ese momento la madre de Camille salió desesperada al pequeño jardín donde se hallaban Kyle y Camille.

-¡Kyle, Camille!

-¿?-, ambos se miraron confundidos.

-Grandes problemas, tenemos que irnos de casa. 

-¿Ah?

-¿Como dice Sarah?

-Desde hace algunos día la casa cambió de dueño-, explicó ella preocupada-, Dicen que tenemos que vaciar el lugar para mañana... ¡Van a derribar esta lugar! 

-¿Tiene sentido? ¿Como vamos a mudarnos con sólo un día de anticipación mamá?-, inquirió Camille poniéndose de pie-, ¿Como pueden hacer eso? 

-Eh... ¿Quien es el nuevo dueño?-, cuestionó Kyle, frunciendo el ceño.

Sarah se rascó la cabeza tratando de recordar el nombre, pero no lo conseguía.

-Ah... ¿Cuál era el nombre? ¡Ah! Grupo EverWill...

-¿Grupo EverWill?-, dudó Kyle mirando a Camille.

-¿Grupo EverWill?-, volvió a dudar Camille, devolviéndole la mirada a Kyle

Entonces Kyle recordó algo, se dio cuenta de algo que le hizo hervir la sangre de furia, de rabia.

-¡Esa chica es realmente...!

Se levantó de la mesa y echó a correr mientras Camille y Sarah le preguntaban a que chica se refería. Claro, esa chica tenía que ser Angelique Everdeen.

__________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

En la mansión Everdeen-Willson, los mayordomos de Miss Everdeen y el Presidente Everdeen, comentaban lo sucedido el día anterior, el secuestro, el castigo de la señorita, entre otras cosas. Mientras tanto limpiaban las finas y elegantes copas de la mansión. 

-Oh, cierto, ¿oyeron la noticia?

-¿Cuál?-, inquirió Bill, uno de los jóvenes mayordomos.

-El Sr. Geof-, el mayordomo principal-, esta buscando reemplazo, ese trabajo tiene que ser tuyo Bill, sin duda alguna. 

Ambos rieron mientras el otro joven los miraba, confuso.

-No sabemos quien será escogido como mayordomo personal de la Srta. Angelique, pero ese hombre debe ser capaz de manejarlo, ¿no?

Bill lo miró algo ofendido por sus palabras.

-¿Qué dices?-, cuestionó Lucas, el mejor amigo de Bill-, Basándose en experiencia y conocimientos, ¿Quien mejor que él? 

Siguieron conversando sobre quien sería más capaz de ser el mayordomo personal de Angelique, una mujer de armas tomar. En ese momento recibieron un aviso de intruso en la entrada principal de la propiedad.

Lady CastleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora