Se quedó mirando por un rato por la ventana de su habitación, todavía pensando en el lugar mágico que ayer había visitado.
Estaba incrédula, era difícil de asimilar que fantasías así eran reales y ella era afortunada en poder experimentar una.
Vio el cristal amarillo entre sus manos. Antes solía ser muy frío, ahora se sentía caliente, como el calor de una persona, era como si el cristal tuviera vida.
――Él dijo...“Esto conecta tu mundo con el mío”. Como en esas series animadas donde dos realidades coexisten pero... Esto de verdad está pasando.
Suspiro metiendo el cristal en su bolsillo y preparó sus cosas para ir a la escuela, aunque no tenía muchos ánimos de ir.
Lo más seguro es que todos sus compañeros mantenían el recuerdo de la experiencia humillante que vivió ayer, esa donde frente a todos Abigail admitió que nadie la necesitaba.
“Tu me salvaste, ahora yo solo te miraré a ti”, pensó en las palabras del atractivo no-príncipe.
――Al menos conocí a alguien nuevo y debe ser mejor persona que la gente de este mundo.No fue nuevo para ella llegar a la escuela sola y tomar sus clases de la misma manera. A decir verdad, podía atreverse a decir que se sentía mejor así, con todo lo que ahora sabía.
――Erin..¿Podemos hablar?
Minhyuk rogó cuando la vio entrar al Salón.――No tengo nada que hablar con ninguno de ustedes.
Dijo al ver que Jun también estaba ahí.――Por favor.
No fui yo quien hice nada malo, eso lo tenía en claro, yo no pedí su lástima, pero aún así no pude levantar la mirada para confrontarlos como debía.
Las palabras que mi madre decía cuando era pequeña jamás habían tenido tanto sentido. El único verdadero amigo que tenemos es a nosotros mismos, pero yo creí que ellos de verdad me querían. Y yo los quería a ellos.Pero eso no importa más. Porque el estar aquí de nuevo, en este mundo donde todo era reluciente y de paleta de colores pastel compensaba el capítulo amargo que he vivido ayer.
Y mi tristeza se marcha en cuanto veo al no-príncipe de pie, usando otro atuendo, sin su capa, pero igual de atractivo que ayer.
――Me alegra que hayas decidido volver.――Dudaba en hacerlo, pero no tengo muchos sitios a los cuales ir. ――Levantó los hombros fingiendo resignación.
――Pues así vengas porque no tienes nada mejor que hacer, para mi es un placer tener tu presencia aquí. ――Hace una reverencia. Dijo que no era el príncipe del lugar, pero vaya que tenía facha de ser un caballero o algo por el estilo. Yo solo se que nunca me había tipado con un sujeto que desprendiera tanta amabilidad.
――Así que... ¿Jun ha sido uno de los que te han tratado mal?
Sus cabellos platina dos volaban a la par que el viento nos golpea levemente.Era bueno escuchando, no se qué tanto de mi vida ya le he contado, al contrario de otras personas él no se ve frustrado de que no pare de hablar, de hecho, me pregunta más y da consejos conforme me expresó.
――Sí y... Él me gustaba, mucho.――Ah. ――quejó——¿Cómo debería sentirme ahora? Con esa información, me siento un poco celoso.
――¿Celoso?——Solté una carcajada ruidosa por lo absurdo que ha sonado. ――¿De qué hablas? ¿Por qué deberías sentirte celoso?
――Porque él ha llamado tú atención, y quiero ser yo él único dueño de esta misma.
Entrecerré los ojos, ¿Cómo es tan expresivo? Sus ojos brillantes se veían sentidos por mis palabras. ――No tiene sentido que los tengas. O que sientas que debas sentirlo solo porque te salve, no me debes nada.
――Te debo mucho en realidad. Y no es por obligación.
――Da igual, aquí debe haber un montón de seres igual de perfectos que tú, apuesto a que las mujeres aquí deben verse lo más parecido a diosas encarnadas.
――Pero yo te deseo a ti. ――Sonrió coqueto. ――Creo que nos conocemos muy poco y esa es otra de las causas que provocan tu inquietud, ¿No es así?――Asiento con la cabeza, ¿Que me leía la mente? ――¿Qué edad tienes?
――16.
Pronunció con algo de torpeza.――Oh, eres muy joven. Yo también lo soy, apenas hace unos meses he cumplido años.
――¿Cuántos?
――¡1,500! ――Dice emocionado. Bueno, otra cosa diferente de este mundo, las edades parecen funcionar de manera distinta.
Quizá demasiado.――Vaya, eso en mi mundo sería mayor...Dema-demasiado mayor, si me atraparan contigo pensarían que eres un pervertido.
――Pues que fortuna la nuestra de que no haya nadie más que tú y yo, ¿O no?
–¿Y nosotros?
–¿Que hay de nosotros?
Unos destellos sobrevolaron a nuestro alrededor.
――¿E-Esas luciérnagas hablan?――Así es, son los mediadores, nos acompañarán en algunos momentos. Son parte de este mundo. Volviendo al tema de conocernos, aún no me haz dicho tú nombre.
Por fin dejamos de caminar para sentarnos debajo de un árbol grande que daba flores, pero como todo en ese mundo, de forma impactante los botones de esas flores brillaban como luces de árbol de Navidad, solo que estas son de color rosado y sonrió en grande antes de responder.
――Es Erin, Lee Erin.――Es un nombre hermoso, Erin.
――¿Y el tuyo?
――El mío es Park Jimin. ――Hace una reverencia como si estuviese conociendo a una princesa. ――Y soy quien te ayudara a resolver cualquier adversidad y cumplir cualquier deseo que pidas.
Dime, ¿Hay algo en lo que pida ayudarte?――Bueno... No estoy segura de tener algún deseo.
――Todo el mundo desea algo, pero solo pocos se atreven a hacer algo para tener lo que desean así que dime, ¿Qué necesitas?
――No consideró que sea necesidad pero... Me gustaría que mis padres pasarán más tiempo conmigo. Debido a su trabajo, no convivimos juntos y bueno, en casa eso hace que me sienta sola.
――Si sirve de algo. Aquí, tú eres el centro de atención, tu aquí eres esa brisa que todos necesitamos algún día. Aquí me importas a mi y siempre podrás encontrar compañia en mi.
――Necesitaba mucho escuchar eso, no sabes cuanto.
Me atrevo a abrazarlo y él me devuelve el gesto.――No tienes que agradecer nada, tú has hecho más por mi que yo por ti.
――Debo regresar a casa, tengo que hacer deberes de la escuela. ——Jimin limpió las pequeñas lágrimas que intentaron escaparse durante nuestra nuestra de afecto.
――No llores de nuevo, las flores necesitan agua del cielo, pero aún es muy pronto, te marchitaras si te excedes.
¿Acaba de insinuar que mis ojos son el cielo y mi rostro es una flor?
Sonrió como tonta con ganas de quedarme me tiempo a charlar con mi nuevo amigo.
――Volveré mañana.
Presenció el cristal llevándola de vuelta a su mundo y él por fin puede dejar de sonreír.
–Ella querrá quedarse.
–Eso es genial.
–Lo lograremos.
–Solo 6 chicas más y podremos...――Su brillo es diferente. Ella no es igual a las otras. Tiene algo.
–Eso lo hace mejor.
—Eso nos asegura que es a la que buscamos.――No se si pueda hacer esto.
—No podemos dejarla sola.
—Podemos hacer mucho por ella.
—Ella te necesita.――Y yo a ella.
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CRYSTAL CASTLE | Jimin.
Fanfic"El mundo ideal con el que tanto sueñas tiene un costo." Prohibida su adaptación sin consentimiento del autor. Obra original y terminada. Primera parte de una serie de dos libros.