Perdida en mis sentimientos.

¿por que sonríes?

-al menos dime tu nombre-
-me llamo steve-
-¿quieres saber el mío?-
-ya se tu nombre-.

Abrí los ojos y estaba en mi escritorio, que tonta, me había quedado dormida en la escuela y estaba soñando con ese momento.

-¡Samy!- dijo el profesor.

-¿qué pasa?- dije con voz un poco adormilada.

-abré la puerta-

En ese momento sentí tanto enojo ¿¡QUE TIENE EL PROFE CONTRA MI!? Siempre me manda a mi y no a los demás, ¿a caso el no tiene pies para ir a abrirla o manos?

Lo observé fijamente con cara molesta. -mejor abrala usted-

-¿qué dijiste samantha?-

-dije que mejor la- no pude terminar mi oración por que ya estaba alguien atrás mío y con su mano en mi boca.

-ella no dijo nada- contestó la persona que tapaba mi boca, un segundo, yo conocía esa voz de algún lugar.

-ahora tu vas a responder por ella- dijo el profesor molesto.

-¿ella tiene que abrir la puerta por usted?-

-¡los dos se van a dirección ahora mismo!-

-como usted diga- dijo el con un tono sin importancia.

Tomó mi mochila con una mano y con la otra tomó mi brazo y salimos del salon. Quería verle la cara, pero no me dejaba por el gorro que tenía puesto, ahí es donde decidí hablar.

-oye sueltame, no ocupó que me ayuden-

-eso no lo noté cuando te lleve a tu casa- contestó.

Me safe de su agarre y me puse frente de el, si era quien yo pensaba.

-Steve ¿por que no dejaste se lo dijera?- puse cara molesta.

-Porque sólo te ibas a ganar un castigo-

-de todas formas me van a castigar- cruse los brazos.

-al menos nos van a castigar juntos-.

Mis ojos se abrieron totalmente por su respuesta.

-eres un tonto-

-se que lo soy pequeña- tocó levemente mi cabello dando palmaditas.

Rápidamente quite su mano y me aleje un poco
-vamos a dirección- comencé a caminar.

-no iremos-

-¿cómo que no iremos?-

Sonrió y empezó a caminar a la salida -tu solo sigueme samantha-

Comencé a seguirlo -steve, ayer dijiste que ya sabías mi nombre-

-si, no es algo que tenga que explicar ¿ok?- sonrio.

-¿por que sonríes?-

-porque estoy feliz de verte otra vez-