En Mi Camino

Capítulo 7

-Punto de vista Chico-

Menos mal que me dijo que parara si no, no sabía hasta donde podría haber llegado. Me encantaba tocar su cuerpo tenía una piel demasiado suave y estaba muy buena, también hay que decirlo.

Necesitaba beber mucho más, así que me bebí dos chupitos y le acerqué uno a ella.

Quería llegar a la ultima regla ya, no aguantaba más, es mucha tentación para un hombre como yo, suerte que tenía los ojos vendados porque si viera el bulto que me a provocado todo esto... Bueno, los juegos y ella porqué joder, su vestimenta no es que ayudara a bajarlo, sus pantalones eran altos pero le hacían unas piernas y un culo. ¡Santo dios! Y por no hablar de la camiseta... tenía unas tetas, ¡Madre mía! Vale todo esto no me está ayudando para nada a bajar a mi “amigo”, tengo que dejar de pensar.

Volví a abrir la lista de las reglas ahora tocaba la 3. Estábamos a la mitad, ya solo quedaban dos para terminar y luego ya que surgiera lo que el diablo quisiera -digo diablo porqué no creo que a dios le fuera a gustar mucho lo que tenía pensado hacerle.

《3 - Como después de la regla anterior, se habrá quedado un poco fría por los hielos, vamos hacer que se caliente un poco. Ponla contra la pared para que se pueda sostener, agáchate, lo siguiente que tendrás que haces es empezar a bésala desde los tobillos hasta su vientre sin dejarte nada por besar, excepto la “zona prohibida”, pero eso ya lo sabéis, así que... ¡Qué siga el juego!》

Me guardé el papel en el bolsillo trasero del pantalón. Seguidamente, me acerqué a ella, la agarre de la cintura con las dos manos y la lleve hacia la pared. Quedó recostada contra esta, y al notal el frio en la espalda soltó un pequeño gruñido, me estaba poniendo mucho, y solo pensaba en una cosa, al igual que mi “amigo”, que se había vuelto a manifestar; pero no me podía adelantar, tenía que ir poco a poco, siguiendo las reglas. Puse cada mano al lado de su cabeza estábamos muy, muy cerca. Pasé mis labios por su mejilla, simplemente rozando su piel con suavidad, era una cosa que siempre me funcionaba con las tías, caían rendidas a mis pies y yo quería que ella cayera esta noche. Me aparté un poco y la observé. Sonreí mientras la miraba. Su pecho subía y bajaba de manera agitada.

Me separé de ella un poco y me agaché para empezar con la siguiente regla. Primero comencé con suaves besos por los tobillos, seguido de sus preciosas y largas piernas. Comencé a dar besos desviándome del trayecto y i besando más la zona interior de la pierna, pero no iba a llegar a la zona "prohibida" eso me lo reservaba mejor para luego. Noté como ella se puso algo dirigida al notar por donde iban mis besos, me hizo gracia. Iba a seguir dejando que sufriera un poco más, pero decidí ir por donde indicaba en la regla. Su cuerpo estaba ardiendo, me encantaba esa sensación, esa en la que sabes los efectos que puedes producir en ella. Iba a volver a su vientre, pero antes, me volví a dirigir hacía el interior y se volvió a tensar. Esta vez estaba aún más cerca de “ahí”. Se estaba poniendo nerviosa, y eso me gustaba, noté como tras una larga inspiración, retenía unos segundos el aire y se pegaba más a la pared. Continué dándole besos, cada vez más suaves. Estaba disfrutando, la verdad. Decidí que ya era hora de dejar esa zona, porque sino me acabaría saltando las dos últimas reglas. Me acerqué un poco más por ultima vez, ella seguía con la respiración agitada. Sonreí mientras le daba un último beso y volví a desviarme hacia el exterior de su pierna, para subir hacia sus caderas y vientres. Debió pensar que ya pasaba el peligro, porque soltó de golpe el aire que llevaba segundos reteniendo en sus pulmones, pero aun así estaba bastante agitada. Estar en su lugar, con los ojos vendados y sin saber lo que va a pasar o lo que te van a hacer debe de ser una tortura, pero bastante placentera al fin y al cabo, aunque prefiero ser yo quien lleve las riendas y ver lo que le puedo llegar a causar. Llegué a su vientre y como antes, lo volví a besar y chupar ya que sabía que le había gustado.

-Punto de vista Abril-

Joder y joder, era lo único que podía decir no me esperaba para nada lo que acababa de hacer. Osea ¡joder!, casi se va para el.. ya sabéis. Menos mal que me depilé ayer porqué sino me da algo. Pero por mas que me pusiera a 100, no no más bien a 1000, porque este chico sabe muy bien lo que hace, y borracha que estuviera por los putos chupitos, no iba a dejar que me comiera toda la cosa ¿Estábamos locos o que? Lo acababa de conocer, bueno ni eso, porque llevo los ojos vendados ¡Ni sé quién es!

Y pensar que todo esto era por culpa del idiota de Max, para demostrarle que no era una aburrida. ¿Donde estaría Max? Seguramente se esté follando a una y habrá pasado de las reglas. Tal vez debería para ya con todo esto, no tiene sentido que siga adelante si no esta Max para ver que estoy aguantando. Joder, puta rivalidad. ¡¿Por qué siempre tengo que ser así?! Pero había algo que no me dejaba parar. Era este tío. No se que tenía, pero hacía que quisiera continuar con este maldito juego.

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¡Y AQUI ESTAMOS CON OTRO CAPÍTULO! Este es un poco más corto, pero el siguiente será algo más largo. Os está gustando? Esperamos que sí, porque tenemos muchas ideas nuevas para la novela asdfghjk.

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