EUPHØRIA

21.

El término 'Euphoria' proviene de un vocablo griego que significa "fuerza para soportar", "fuerza para aguantar". La palabra, por lo tanto, permite hacer referencia a la capacidad para tolerar el dolor y las adversidades en general que se enfrentan en el camino de la persona...

- Todo acaba de comenzar -

POV de Halley

- Feliz cumpleaños a ti - mi corazón iba a la velocidad maxima. Sentir que habíamos salido de todo aunque era una mentira creada por mi mente me hacía sentir bien.  - Apaga la velas SeokJin - golpee su hombro ya que solo hacía muecas para la cámara que tenía Taehyung en sus manos. Todos aplaudimos. Bueno, los que quedábamos aplaudíamos.
- Has pedido tu deseo? - susurró Jungkook colocando su brazo alrededor de los hombros del cumpelañero. El chico asintió, con algo de tristeza en sus ojos.
- Vamos SeokJin, volverá pronto - hablo Tae intentando animarlo y quitando el brazo de Jungkook de los hombros de Jin para ponerlo en los de el. Reí al ver el acto. Chico celoso.

Todos nos sentamos en el mueble de la sala de Hoseok . Nos mirábamos con tantas preguntas que ninguno tenía o sabía la respuesta.
- Creen que esté bien? - pregunto Jin suspirando. Nadie sabía nada la verdad, pero algo en nosotros quería evitar la pregunta.
- No levanta su teléfono aún? - pregunto Jungkook mirando a Jin. El chico nego para bajar su cabeza. - El sabe lo que hace, estará bien - terminó seguro a pesar de que no creía en sus palabras.
- Ya basta de estar triste - hablo el chico con su cabello ya más largo que la última vez. - Es tu cumpleaños - terminó Tae, se levantó para traer el bizcocho hacia donde nos sentábamos.

...

Todos intentaban pensar menos en el, era lo único que podían hacer para no extrañarlo ni ponerse triste.
- No te atrevas! - grito Jin corriendo alrededor de la sala, Taehyung quería pegarle el bizcocho en la cara. A pesar de ser el más adulto, cumpliendo 25 este día, aún era un pequeño para todos ellos.
- Chicos no quiero limpiar otra vez - se quejo esta vez Halley haciendo que Taehyung se calmara. No había sido la primera vez que hacían sus desastres. Claro, ahora viviendo con tres hombres era una locura. Después de lo ocurrido, decidieron mudarse juntos por la seguridad. Era algo apretado pero ya estaban acostumbrados con todo el tiempo que llevaban. Todos rieron al unísono.

- No puedo creer que ya hayan pasado tres años - hablo Jungkook cortando un pedazo del bizcocho. - Y aún no hemos cambiado -rio para el mismo. La chica al escuchar esto lanzó una almohada a su rostro, haciendo que los demás rieran.
- Habla sobre ti galleta - dijo Taehyung riendo igual que ella. El chico hacía un mini puchero, y por primera vez se había bajado su capucha. Todos se sorprendieron. Después de que había pasado todo y Hoseok se había ido. El chico no quitaba la suera que el le había regalado y no se bajaba la capucha, solo para dormir, pero ellos mismos no sabían ya que dormían en habitaciones diferentes, pero Tae y el compartían habitación.

- J..Jungkook - Trago fuerte al ver su cabello. El chico rió pero todos estaban en un estado de choque. El chico delineó su cabello y lo movió para quitarlo de su frente.
- Tu... cabello - terminó Taehyung por la chica. Al parecer no se quitaba su capucha ni para dormir, a menos que Taehyung fuese tan tonto de no verlo cuando dormía.

Era como un cielo de sangre. Brillaba un rojo fuego en su melena. Estaba más corto de lo normal. Pero aún cubría su frente.
- Les gusta? - rio. Todos sabían que cada vez que el chico cambiaba su color de pelo, era por sus sentimientos o cuando algo grande pasaba.
- WOAH - hablo Jin tocándolo - Ahora pareces una fresa que vota humo - se burló y todos se rieron. Jungkook golpeó la mano de Jin haciendo que esté se quejara.
- Me gusta - dijo Halley observándolo fijo. El chico le guiño el ojo y ambos rieron. Taehyung aún seguía perplejo. Pero todos evitaron hacerle la pregunta del porqué había hecho eso y porqué ese color. En ese momento el celular de la chica estaba sonando. Lo miró para ver el número de teléfono. Se lo encontró extraño ya que hoy no habían quedado en verse por el cumpleaños de su oppa.