-No sé que título ponerle-

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IGNOREN EL MARAVILLOSO TÍTULO :D

One-shot inspirado en: You Belong With Me - Taylor Swift

Eran las 10 de la noche y Kuroko parecía tranquilo tumbado en su cama, estaba leyendo una novela ligera que la había abandonado hace tiempo ya que le aburría, ahora lo volvió a leer y al final terminó siendo interesante.

Tenía las cortinas abiertas, lo mismo con una de las tantas ventanas que tenía su habitación. La cual dejaba ver la casa del lado, donde vivía su vecino Akashi Seijuro, había sido despedido hace tiempo por un acto de violencia hacia uno de los empleados, aunque tampoco era su culpa que ese empleado le comenzara a insultar sin sentido, obviamente que dejarle una cicatriz en medio de la mejilla tampoco está bien.

Las luces de la casa contraria se encendieron, Kuroko levantó la vista viendo como por la otra puerta entraba un pelirrojo visiblemente cansado. El otro hizo la misma acción, sin darse cuenta sonríe al ver al peliceleste preguntándole si estaba bien a través de un papel escrito con permanente.

"¿Que tal hoy?"

El pelirrojo se quita la chaqueta y lo tira a la cama, seguido se va hacia su escritorio, toma un permanente y escribe en su libreta.

"Mal, como siempre."

La cara de preocupación del peliceleste reconfortaba a Akashi, sentía que la vida tampoco era tan mala.

"Estoy contigo..."

El pelirrojo sonríe tras leer el mensaje, le dice adiós con la mano ya que debería irse a dormir aunque siga siendo las 10 de la noche, pero al día siguiente quería intentar mejorar algo con su deber laboral.

Kuroko levantó la cabeza tras escribir otro mensaje que le había costado decidirse en escribirlo o no, vio las cortinas de la ventana contraria cerrada, se desanimó y se tiró de nuevo en su cama, cerrando los ojos.

Al despertar, ve que dejó tanto las cortinas como las luces abiertas, se frotó los ojos y su día fue más normal imposible, la noche llegó más rápido de lo que hubiese imaginado.

- ¡Feliz cumpleaños! - Chillaron a la vez su abuela y sus padres al entrar por la puerta ( No va a ser por el techo, hombre ). No se había acordado de que era su cumpleaños, posiblemente sea porque casi nunca le importa esa fecha debido a que casi nadie se acuerda de que es el día que cumple un año más de experiencia. ( Y se hace más viejo :v/ )

- Gracias... - Kuroko sonríe, ya tenía 20 años, se sentía realmente viejo en esos precisos instantes.

Sabía que Akashi le felicitaría igual, ya que siempre era él quien le recordaba esas fechas, eran detalles que le gustaba bastante de él.

Miró la ventana después de notar que la puerta se abría, observó como Akashi entraba con cierto movimiento extraño.

"¿Está borracho?" - Se preguntó internamente Kuroko.

Se sorprendió al ver otra silueta más, con más curvas y de una estatura algo más baja que justo detrás, o más bien dicho, pegado a Akashi. Estos se tiraron a la cama simultáneamente; Kuroko cerró las cortinas apresuradamente, se tiró a la cama también con cierto sentimiento que no salía de su ser.

Unos días después, los encontró a los dos en el parque felices de la vida, solamente pasó de largo al ver que ya se iban a besar de nuevo. Aunque igualmente, esa misma tarde iba a tener que ir a un partido, exactamente donde jugaba Akashi.

Él se había retirado desde que salió de bachillerato, el deporte le encantaba pero al final se rindió al ver como todos le rechazaban por no tener una habilidad realmente impactante; simples pases, decían ellos.

One shots - AkakuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora