Love Me {Dipper Y Tu}

Capítulo 33 (3/3)

Llegamos a la cabaña. Le dije a mi papá que venga por mi antes de cenar y las cuatro nos sentamos en la sala.

Las tres me miraban seriamente con la ceja algo levantada. Lanzó un suspiró y crucé mis brazos.

—¿Estan enfadadas por lo de Pacífica?

—La verdad no, pero si me gustaría que hablaras con ellas sobre tu "tema especial" —explicó Mabel.

—¿Qué tema especial? —preguntó Candy.

—______ tiene un...

—Soy mitad demonio —hable sin más, interrumpiendo a Mabel.

—¡Se los tenías que decir con calma!

Grenda y Candy se miraron, para luego volver su mirada hacia mi y saltarme encima.

—¡Nos va a matar!

—¡MUEREEEEE!

Habían comenzado a golpearme, aun que ninguna de las dos tenía mucha fuerza así que no dolía demasiado.

—¡Oigan calmense! —hable, tratando de quitarmelas de encima pero sin ningún resultado positivó, así que recurrí a mi "fuerza extra".

Me las quite de encima rápidamente y ellas se golpearon el trasero. Me senté y crucé mis piernas como un niño para verlas frente a frente.

—No les haré nada. Además ni siquiera soy "mitad demonio", solo estoy aprendiendo a controlar mis poderes ya que soy un discípulo. Y gracias a eso también me pude curar más rápido de lo normal.

Ellas me miraron asombradas, luego me bombardearon de preguntas.

—¿Puedes volar?

—¡¿Lanzas fuego azul?!

—¡¿PUEDES HACER APARECER COSAS DE REPENTE?!

—¡DEJENLA RESPIRAR! —grito Mabel—. La están acosando.

Reí incómoda.

—Si, puedo flotar un poco. También estuve practicando eso de lanzar fuego, pero no tengo tanto poder así que...

—¡HAZTE SUPER HEROE!

—¿Espera qué?

—¡Tan solo piensalo, seras la nueva SuperGirl solo que pelirroja! —dijo Candy y reímos.

—Lo lamento, pero no tengo ganas de llevar una doble vida por el momento.

—Si lo haces te haremos un traje —dijo Mabel y me guiño un ojo.

Seguimos hablando en el suelo, cuando la puerta se abrió de nuevo dejando a ver a Dipper seguido de Ford.

Ambos cruzamos miradas y sonreímos. Aaahhh no puedo con el ¿por qué es tan lindo?

«¿Por qué es tan linda?»

Miré sorprendida a Dipper y no pude evitar sonrojarme. El me quedo mirando confundido.

Dijo que soy linda. Bueno lo penso y yo lei su pensamiento si querer. ¿Qué hago?

—Vuelve a la tienda Dipper, no quiero que te metas en problemas por mi culpa —Ford palmeo su espalda y Dipper obedeció, no sin antes dedicarme una última sonrisa que hizo que me derritiera por dentro—. ______ ¿puedes venir?.

Alto ¿yo por que?.

Asentí y me levante de mi lugar para caminar detras del señor Ford, quien entro a la cocina y se sirvió un vaso con agua.

—Dipper me lo contó todo, ya sabes, lo de que tu tienes...

¡Ese maldito Pino sexy y soplón!