broken heart - ❝ milo manheim ❞ [TERMINADA]

nine

La niña tenía el mismo cabello rizado de Mike mientras que sus ojos verdes le hacían verle algo especial era una niña demasiado dulce y se veía cero maldad en ella, aún no sabía ni su edad. Ahora entendí la razón por la Mike me había citado aquí, este café tenía juegos dentro de este así que la niña salió a jugar con los demás niñas que estaban allí.

—¿Y como se llama? —Pregunte bebiendo mi café.

—Sydney...—Respondio algo avergonzado. —Betty me quería matar, pero al final dijo que era un lindo nombre.

—Yo era única. —Dije haciéndome la ofendida.

Mike me explico las razones de por qué no había ido al funeral de Mike, se había muerto la abuela de Sydney y era obligación ir a Canadá. Hace poco había llegado y Betty tenía que ir a la casa de sus padres y a darles todo el apoyo posible, Sydney era una niña energética por lo cuál no se quedaba quieta y le gusta estaba muchísimo al aire libre.

Me sentía feliz por mí mejor amigo, él había encontrado la felicidad me mostró una foto en la cuál salía una castaña de cabello corto y ojos verdes, embaraza mientras que Mike salía tomando a la niña.

—El que viene en camino es Luke. —Me sonrió mientras que yo le miraba.

Conocía muy bien a esta chica, ella estudió un año conmigo en California era demasiado buena con todos y me agradó que ella fuera la novia de Mike y le diera una hermosa familia a él. Me sentía tan feliz por él, se veía que gozaba su vida y a su mayor tesoro que era Sydney.

—¿Sabes por qué le quise poner Sydney? —Me pregunto y yo negué. —En el momento que te fuiste me dejaste vacío, y luego una pequeña premisa de cabello castaño nació y lleno ese vacío. Soy muy feliz con Betty, pero tú en un momento fuiste mi todo.

Sonrió débilmente, sabía que le hice daño pero de todos modos yo no podía corresponder a sus sentimientos menos ahora que nuevamente sigo atascada con Milo y su hermosa sonrisa que me hacía suspirar cada vez que podía.

—Y Sydney, cuéntame un poco de ti ¿Hace cuánto estás acá?

Mike le conté todo, no podía ocultarle nada aún así el se sentía de una manera mal al no llamarle y decirle que yo estaba bien pero no tenía opción, lloré por la perdida de mi madre y también por la pérdida que me había dejado a Ann, Mike me dio un apoyo condicional mientras que yo simplemente apoyaba en todo los que podía, pero aún así yo no me podía sentir del todo bien.

El celular de Mike sonó y la niña se había quedado dormida en sus brazos ya era hora de irse, acosto a la niña en la parte de atrás, en su silla y me fue a dejar a la Universidad, pronto vendría a verme y apoyarme me dijo que no me dejaría sola cuando más lo necesitaba y Mike si cumplía su palabra.

Al llegar a la Universidad el campus estaba totalmente vacío sin nada que hacer, era viernes y no me sorprendía que estuviera tan sólo, todos se iban de fiesta a casa de alguna que otra unidad, al llegar a mi habitación se encontraba Eliza arreglándose para salir.

—¿A dónde vas? —Pregunte.

—¿Se te olvidó? Hoy iremos a la fiesta que están dando las porristas. —Suspiré.

—Eliza no quiero ir, Holiday es parte de ahí. —Comenté.

—¿Y? ¡Irás igual!

Sin más accedí a las palabras de Eliza al verme vestida con unos jeans sucios y un suéter grande me reto, sin más sacó algo de mi armario una falda color negra ajustada, una blusa blanca y unos botines negros de terciopelo. Me maquillo y me arreglo el cabello en menos de cinco minutos ya estábamos listas, salimos de nuestra habitación sin antes dejar todo cerrado. Saldríamos por la parte de atrás, Jasson un chico que conocía a Eliza nos esperaría afuera con su auto.

Nos pasamos por los pasillos totalmente vacíos para que no nos pillaran, la Universidad era algo estricta para decir verdad. No sé cómo atravesamos el campus sin que ningún guardia nos viera al llegar a la puerta de afuera estaba el amigo de Eliza con Milo, quería matarme.

—Esta cerrada. —Murmuro Eliza.

—Bien, ni quería ir. ¡Es una pena! —Comenté.

—Trepa. — Miré a Eliza. — Y no es una broma, trepa.

La odiaba, de verdad la odiaba. Me quite los botines para lanzarselos a Milo que me esperaba en la otra parte de reja junto a Jasson.

—Miren para otro lado, ando con falda. —Milo solamente se rió para quedarse ahí mismo. —¡Milo!

Sin más comencé a trepar la cerca no estaba tan alta pero aún así, un paso en falso y me pegaría muy fuerte me quedé un rato mirando para ver si venía alguien, a lo lejos vi una feria y una gran rueda de la fortuna, me acordé de mi beso con Milo y cuando reveló sus sentimientos por mi.
Sin más intenté bajar, pero me resbalé solté un chillido para esperar que mi cuerpo chocará con el frío suelo, pero no fue así.

Unas cálidas manos me recibieron para yo no caerme, sin más le miré Milo se veía tan lindo como siempre.

Me encantaba de una manera horrible.

Me sentó en una parte del auto para ayudarme a ponerme mis botines, sonreí al verlo, me sentía tan feliz por tenerlo a mi lado pero de cierto modo esto no era correcto ya que él estaba con Holiday. Sin más me ayudó a bajarme y nos adentramos al auto cuando ya estábamos todos y nos fuimos directo a la casa de Holiday.

Milo posicionó una de sus manos en mi pierna y yo le miré.

—Te vez linda como siempre.

Me estaba muriendo de amor por él.