broken heart - ❝ milo manheim ❞ [TERMINADA]

sixteen

— Milo, yo. . .

Estaba ahora mismo en un debate conmigo misma, no sabía que decirle. Claro estaba, yo lo amaba al igual que antes pero pensé que todo iba a ser horrible y se iba a formar de una manera mala para ambos, no quería distraerme, menos cuando tengo a alguien a quien cuidar por ahora. Y Milo, a Milo lo amaba con locura y seguía sintiendo lo mismo que antes.

Pero creí que era hora de cortar de raíz todo esto.

— Yo. . .yo ya no te amo, Milo. — Respondí, de una manera fría.

Este me miró de una manera fría, de la misma manera que yo le había dicho una cruel mentira que se tragó, sin más salí del auto rápidamente no quería seguir ahí adentro. Comencé a caminar los pasillos y antes de llegar a mi puerta, lloré un rato, me sentía tan mal conmigo misma por mentirle de tal manera, no podía más con esto.

Quería tenerlo nuevamente conmigo pero nuevamente el destino no quiere que yo y Milo seamos felices, han pasado tantas cosas negativas para ambos, que solamente estar juntos no lográbamos ser felices. Nuevamente no puedo ser feliz con él. No ahora, no era el momento.

( . . . )

La clase de ciencias sociales había comenzado y para variar, Milo estaba conmigo en esta clase, estábamos recién entrando a invierno se notaba por las hojas de los árboles ya cubiertas con finos copos de nieves, algo estaba diferente, miré nuevamente Milo y este me dio una mirada algo fría.

Como si yo ya no existiera más para él, y era entendible, yo no podía hacer más por él. No quiera hacerle sufrir y menos hacerle daño.

— Bien, abran sus libros en la página 103 hoy hablaremos sobre... —Comenzaba a decir el profesor en cuento entro al salón.

Toda la clase fue tranquila, ya no me sentía observada por Milo y al terminar la hora de clase salí lo más rápido que pude, no quería estar ahí.

Fui directo a la cafetería para comprar sándwiches para mí y Alison, también algunas aguas de manzana para mí y de pera para Alison eran sus favoritas.
Corrí a la habitación en cuanto choque con alguien, era Holiday estaba lloraba a mares como si hubiera muerto alguien, en cuanto me miró, su mirada de tristeza se volvió odio puro.

— ¡Todo esto es tú culpa, Johnson! — Gritó la chica furiosa. — ¡Es tú culpa por aparecer y enamorar nuevamente a Milo!

— ¡Hey! ¡Yo no hice nada! — Dije a la defensiva.

— ¿Sabes cuánto me costó hacer que se olvidará de tí? — Me pregunto, aún con lágrimas. — Meses, meses me tarde en que todos tus amigos te olvidarán. — Su mirada era amenazante — Pero, apareciste ¿Y sabes qué pasó?

Se detuvo por un momento.

— Pasó que Milo me dejó por ti. — Comenzó a decir. — Ann tuvo un accidente y murió, unas de mis mejores amigas murió por ti.

— Cálmate, ¡Yo no tuve nada que ver con el accidente de Ann!

— Sí, Milo la llamo para decirle que estabas aquí nuevamente, ella corrió por la calle y la atropello un móvil. — Me explicó. — Esa es la verdad de su muerte, ¡Todo es tú culpa, Johnson!

Milo apareció detrás de Holiday y había escuchando todo lo que está me decía, me sentí herida las lágrimas no paraban de salir Holiday cayó al suelo aún llorando.

— Por tú culpa Milo no me ama y no nos vamos a casar, ¡Por qué el sigue enamorado de ti! — Grito dolida, para ponerse de pie. — Pero, yo me haré cargo que ustedes dos no sean felices.

Se secó sus ojos mientras que se acercaba a mi para empujarme un poco.

— Te haré la vida imposible, Sydney. Desde ahora.

Sin más se fue, algo dolida mientras que las aguas y los sándwiches yacían en el suelo. Lo único que estaba en mi cabeza era que yo era la culpable de la muerte de Ann, unos zapatillas se pusieron al frente mío, era Milo, me dio una mirada algo despreciable para irse de ahí.

Iba detrás de Holiday, y por lo que vi, ahora él también me odiaba tanto como su ex-novia. Tome las cosas para seguir caminando a mi habitación al llegar estaba Alison mirando fijamente la puerta, al verme salto un poco del susto.

— Hey, estás despierta. ¿Dormiste bien? — Ella asintió. — Traje desayuno. — Sonreí.

Comimos en silencio mientras que ambas escuchábamos música, algo triste para decir verdad. Extrañaba tanto a mamá, no sabía que hacer en este tipo de cosas, quería llorar y llorar. No saber ni de Milo ni de Holiday, Alison me miró con pena, con lástima.

— Me tienes a mi, ¡Todo estará bien! — Me sonrió de una manera dulce.

Todo estará bien.