treinta.

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Sentía el estrés hasta el tope, se sentía tan cansada que estaba apunto de renunciar a todo

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Sentía el estrés hasta el tope, se sentía tan cansada que estaba apunto de renunciar a todo. Espero por Felix en una banca de aquel parque, ansiosa por verlo.
Ya habían pasado alguna semanas desde que oficialmente comenzaron sus vidas como universitarios, ahora todos estaban absortos en sus asuntos, salían muy pocas veces, pero no perdían el contacto.
Hyunjin y ella no habían vuelto a hablar desde entonces, además de que sus clases no coincidían, cuando se juntaban a la hora del almuerzo, se evitaban, y la tensión seguía ahí haciendo que Jisung y Felix se sintieran un tanto incómodos.

Pasaron solo unos minutos cuando el chico llegó hasta ella con una enorme sonrisa y dos latas de soda en sus manos.

—¡Jung Areum!— Exclamó feliz el chico caminando hacia ella. La chica se levantó cuando Felix estuvo a solo menos de un metro de distancia. El chico le tendió una de la lata sin borrar su sonrisa.

—Parece que estás de buen humor.— Comentó Areum abriendo la lata. Felix asintió.— ¿pasó algo bueno?

Felix no contestó inmediatamente, lucia nervioso, y Areum no sabía cómo interpretar eso. El chico mordió su labio, tratando de elegir las palabras correctas.

—Bueno, yo...— Rascó su nuca, avergonzado.— Quiero decir, eh...

—Solo dilo, Felix.

El chico suspiro con las mejillas ya rojas.

—Regrese con Haeri.

El mundo se le vino abajo a Areum, dejó caer la soda de la impresión. Felix también se sorprendió ante la reacción de la chica y se apuró a juntar la lata.

—¿Eh?

—Se que dije que no regresaría con ella, pero... solo se dio.

Idiota.
Fue lo primero que pensó al escucharlo. Felix estaba actuando como un idiota, no lo culpaba por regresar con su ex novia, pero ambos sabían que clase de persona era.

Más que nada, se sentía todavía más idiota que Felix, le dolía admitirlo, pero comenzaba a creer que Hyunjin tenía razón. Solo había estado ilusionándose en vano, creyendo que había por lo menos un pequeña oportunidad para ella. Ese definitivamente fue un golpe bajo.

Areum sonrió de lado, tratando de disimular su mueca. Por supuesto, Felix se dio cuenta de lo que sucedía, y se sentía mal por que era consciente de los sentimientos de la chica hacia él. No sabía cuando se había dado cuenta, pero sabía que no quería arruinar su amistad con ella, la quería, pero como amiga, no podía verla de otra manera.

—Ah, ya veo.

—Eres una chica increíble, de verdad Areum...— Comentó el chico vacilando, bajo su mirada, Areum estaba nerviosa.— Pero no me gustas, quiero decir, solo como una amiga.

Ahora estaba dolida, Felix sonrió de lado como si eso remediara lo que acababa de decir. A la chica se le formó un nudo en la garganta, ¿era mejor así no?

pathetic | hwang hyunjin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora