Capitulo#16 BEST FRIENDS

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Me quite el uniforme, y me coloque un destino negro casual y un par de tenis blanco, tome la cazadora de cuero y la pase por mis brazos. Metí mi uniforme hecho bola en mi mochila, me coloque unas gafas de sol y salí del baño, camine a paso rápido y salí de la cafetería.

Hice paro a un taxi y le indique la dirección que Hank me había enviado.

Pague la carrera y mire la casa, levante las gafas dejándolas sobre mi cabeza, se escucha un poco de ruido, subo los dos primeros escalones doy un suspiro y toco la puerta, escucho los pasos y meto la mano en mi cazadora. Mi corazón sufre un mini infarto cuando veo los ojos verdes de Louis.

-¿Savannah? ¿Qué haces aquí? Y....vestida así.

¡Mierda!

Era la única palabra que se me ocurría en estos momentos ¿Por demonios Louis esta en este lugar? ¿Qué le digo?

-Busco a Peter ¿esta? – le pregunte. El asintió desconfiado, se giró y volvió adentro. Un minuto después, Peter apareció en la puerta, le Sonrei ampliamente sin decirle nada.

-¿Quién eres? – me pregunto con el ceño fruncido

-Hank dice que tu tiempo de pago se está agotando, escucha, hay un hombre en algún lugar apuntándote con una rifle – el me miro nervioso – Dame una parte y todo estará bien, no me das nada y morirás, si le dices algo a Louis yo te matare ¿entendiste? – el asintió y trago duro.

-Tengo una parte – le guiñe un ojo, el regreso adentro y cerró la puerta, levante mi mano con el dedo pulgar arriba, indicando que iba a pagarme y no tenían que matarlo. La puerta se abrió y le Sonrei de vuelta – Aquí tienes, tendré la otra parte este fin de semana, hare una fiesta en una mansión y cobrare la entrada 20 dólares, puedes venir por ella

-Invita a Louis a la fiesta, y me pagas allá – enrolle el fajo de billetes y lo metí en mi cazadora – ¡Felicidades, vivirás otro día! – Lo tome de la camisa – Si le cuentas algo a Louis, te matare – el asintió asustado.

Luego de dar el dinero cobrado, regrese a casa, tengo un pilo de tarea atrasada lo que me llevaría toda la tarde.

-o-

Me coloque los cascos, tome asiento cerca del balcón con mi libreta en mi regazo y comencé a escribir, las palabras fluyen al igual que la música. Recuerdo que Emma me decía que escribir es crear algo que no tienes, que mi obsesión por escribir es tanta que creo un mundo que quisiera tener.

Quizás ella tiene razón, quizás escribo sobre un amor que nunca tendré, sobre una familia que nunca prevalecerá, ni una vida sencilla y normal. Jamás tendré eso.

Me sobresalto al ver como mis cascos cae a mi cuello, Nicholas acomoda mi cerquillo y toma asiento enfrente mío, toma el bolígrafo de mis manos y lo deja a un lado, cierra la libreta y la deja sobre mi regazo. Me mira por unos segundos y acerca su mano, pero retrocedo y él se detiene.

-Quiero que te vayas de mi habitación, tienes prohibido entrar aquí – le dije en tono firme, le puse pausa a la música y trate de ponerme de pie, pero él me detuvo sosteniéndome por la muñeca – Su-el-ta-me

-¿Para quién es ese dinero? – me pregunto. Solté aire y parpadee, me zafe de su agarre y me puse de pie, recogí mi libreta y la metí debajo de mi almohada - ¿Por qué una chica de 17 años quiere tanto dinero, si lo tiene todo?

-¿todo? Esto no es mío Nicholas, es de tu padre y tuyo, no tengo nada. Soy una mujer que necesita cosas, como todas – caminó hacia la puerta dándose por vencido. Le puso pestillo - ¿! Que haces!? ¡Fuera de mi habitación!

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