She's kinda hot »5sos

Capítulo catorce

          

-Hey ¿Estás bien? Te he notado un poco raro.

Tyler se encogió de hombros, con una sonrisa un poco falsa.

-No es nada que no pueda manejar.

-¿Estás seguro? Sabes que puedes contarme lo que sea.

Vi un atisbo de tristeza cruzar sus ojos. Abrió la boca, con parecida decisión de sus palabras, pero la cerró de golpe.

-Lo siento, no puedo decirte.

Doble preocupación ¿Luke le había pedido que no lo contara?

-Ty –le insistí con la mirada.

El rubio apegó su frente a la tabla, quedando encorvado.

-Te juro que no puedo decirte, fue una promesa.

-¿Alguien te hizo algo?

-¡No! Al menos no...directamente.

-Me estás preocupando más.

-Tú tranquila ¿bien? Son cosas que suelen pasar.

-¿Tiene que ver con algún chico? ¿Debo matarlo?

-Eh, si, es un chico –movió su dorada cabellera algo abrumado- pero no creo que debas matarlo.

-¿Por qué? ¿Lo conozco?

Sus ojos mieles revolotearon.

-Carrera hasta la orilla.

Y sin más se lanzó contra las olas.

Ugh, pequeña rata escurridiza.

Cuando volvimos ya todos estaban jugando en el mar. Excepto Michael y Luke, ellos parecían tener una conversación bastante seria, alejados del resto.

Con mi nuevo shipp Lyler, ya ni siquiera podía chillar por el Muke.

Luke parecía tenso y renuente, mientras que el pelirrojo buscaba su mirada.

Al parecer, a ninguno le había resultado el interrogatorio.

Después de que comiéramos y pasáramos un buen rato, Calum anunció que con Gala irían a recorrer la playa, por si alguien más quería ir.

Como un acuerdo pactado, todos declinaron la oferta. Esos dos terminarían juntos, se casarían y tendrían muchos bebés.

Porque yo lo digo, si.

Pasaron unos minutos antes de que Ashton hablara.

-Hey, iré a buscar una pelota de playa a la casa.

-Pensé que la habías dejado en el auto –incliné mi cabeza, yo misma le había dicho que la recordara.

-Pues no, la olvidé –se sacudió la arena de su trasero- Jane ¿me acompañas?

-¿Qué? No, tú puedes ir solito a... - Ash le recargó la mirada- Oh, sí, está bien, yo voy contigo. 

No entendía nada, hasta que Juana miró fugazmente a Luke para después mirarme a mí.

Oh, claro.

Si no puedes ayudar con el problema, pues que lo solucionen solos.

Ahora tenía que dejar a Tyler con Luke de alguna manera, sin que ninguno se escabullera.

Jugué con el cabello de Luke por un tiempo mientras Ty hablaba con Mike. Había que romper las tensiones primero.

Estaba entretenida enrollando los rizos del rubio cuando la idea vino a mi mente.