He's That Child • [San Ha y tú]

¿Seguro de que es así?

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*narra San Ha*

Cuando llegué a mi casa estaba extasiado. Recordaba aquel momento en el que ella tomó mi mano y, como un tonto, reía y chillaba, saltaba, daba vueltas por mi habitación y luego me dejaba caer en mi cama. Incluso mi mamá, al escuchar todo el alboroto que estaba haciendo en mi habitación, me preguntó si me encontraba bien. Obviamente le respondí que me encontraba genial.
Estaba tan emocionado que dejé a mi imaginación volar. Pensaba cómo serían las cosas mañana. Llegaría a la escuela, ella me daría un beso en la mejilla, estaríamos todo el día juntos, al volver a casa, caminaríamos tomados de la mano. ¡Sería perfecto! Pero, entonces, recordé a Min Hyuk.
—Él es un perfecto contrincante —dije en voz alta, para mí mismo —. Aunque seguro nunca se tomó de la mano con ___ —ahora había vuelto a sonreír —. Pero... ella dijo que se sintió conectada con él al verlo a los ojos...
   ¿Qué debía hacer? ¿Y sí a ella le gusta más Min Hyuk? ¿Y si me tomó de la mano, pero solo como amiga? ¡Ahg! Qué frustrante. ¿Debería dejarle una nota? Sí, definitivamente debía hacer eso. Y lo haría.
Temprano me dirigí a la escuela hecho una bola de nervios. ¿Y si respondía que sí le gustaba algún chico? Si así fuera, haría lo imposible para reconquistarla. De verdad no quería perderla. Estoy tan enamorado de ella, que no permitiría que alguien la aleje de mí.
Pasé la nota por las rendijas cuidadosamente, luego de haberme asegurado de que ___ no estaba por los alrededores.
—Entonces, ese es tu plan... —dijo una voz, a mis espaldas.
—No devuelta... —dije entre dientes, casi inaudible.
¡Me habían vuelto a descubrir! ¿Cómo podía ser tan torpe? No tengo remedio... Me giré hacia esa voz y vi a Jin Woo, observándome atentamente. Se veía divertido.
—¿Cuál plan? —pretendí ser inocente, aunque si no funciono la primera vez, dudaba que funcione alguna.
—Pretender ser el admirador secreto de ___ —dijo.
—Técnicamente lo soy —dije, corrigiéndolo.
   Él asintió.
—Solo... no se lo cuentes a ___ aún —dije, suplicante.
—No lo haré si me lo cuentas —dijo, apoyando amistosamente su mano sobre mi hombro, ya que yo era mucho más alto que él y no alcanzaba a pasar su brazo sobre mis hombros.
   Cuando debía dejar una nota siempre llegaba bastante temprano, por lo que tenía tiempo de contarle. Nos quedamos en la puerta de su salón hablando sobre eso. También le dije que Dong Min sabía sobre esto, por lo que no debía preocuparse por ocultarlo de él. Cuando terminé de contarle todo, comenzamos a hablar de otros temas también, y cuando llegó Myung Joon, nos despedimos y me volví a mi salón. Ellos dos pasaban, literalmente, todo el tiempo juntos. Yo quisiera tener con ___ lo que Jin Woo tiene con Myung Joon, si tan solo pudiera...
   Al cabo de un rato, ___ apareció por la puerta y mi corazón dio un vuelco. Había olvidado que le dejé una nota en su casillero, hasta ese momento. Seguramente ya la había leído, pero ¿qué contestará? La respuesta me aterraba. Era imposible estar más nervioso de lo que yo lo estaba en el momento en el que se sentó en su lugar, a mi lado.
   El ambiente entre nosotros era raro. Ninguno de los dos hablaba y ella evitaba hacer contacto visual conmigo. ¿Será que ella se arrepiente de haberme tomado de la mano? ¿Qué debería decir para romper el hielo? En ese momento mi mente estaba en blanco.
   Varias veces intenté comenzar una conversación con ella, pero me arrepentía de lo que estaba por decir. Me sentía bastante inseguro. Quería que me mirase a los ojos. Ver su sonrisa, esa que podría ver embobado por horas. Pero, ¿cómo lograría que ella hablase conmigo sobre lo que pasó el otro día? Sería demasiado extraño comenzar diciendo: "Oye, tómame de la mano como el otro día. Pero esta vez entrelacemos nuestros dedos. Esta vez acerquémonos más que la anterior" Negué con la cabeza para quitar aquel pensamiento. Definitivamente la espantaría.
   Para cuando me di cuenta, la profesora había llegado al salón y había perdido mi oportunidad.
Cuando nos asignaron las parejas, esperaba con ansias que me toque con ella, pero no fue así. Mi compañero terminó siendo Dong Min.
—No pude conseguir que te emparejaran con ___, porque son del mismo salón y se supone que deben socializar con alumnos de otros salones, pero al menos estamos juntos —dijo Dong Min señalándonos a los dos mientras se acercaba a mí con una sonrisa.
—¿Y cómo conseguiste eso exactamente? —pregunté, extrañado.
—Conozco a varios de los alumnos que ayudaron a organizar esto junto a los profesores —contestó.
Comencé a buscar a ___ con la mirada, y cuando la encontré, la vi con otro chico que no conozco, seguramente su compañero. Era alto, grande, y traía una sonrisa que parecía traer locas a todas las chicas a su alrededor.
—¿Enserio? —dije, indignado, en voz alta—. ¿Otro chico? ¿Cómo hace para estar constantemente rodeada de chicos guapos? Está claro que ___ es demasiado hermosa como para que la pueda dejar sola por un momento sin que otros chicos aparezcan para molestarla.
—¿Celoso? —preguntó Dong Min, divertido, a mi lado.
—¡Claro que estoy celoso! Esta mañana no pudimos hablar sobre lo que pasó el otro día y ahora la veo con otro chico. ¡¿Cómo no voy a estar celoso?! —exclamé, irritado.
—¿Qué fue lo que pasó el otro día? —preguntó, indignado, seguramente porque aún no le había hablado sobre eso.
—Ella tomó mi mano mientras caminábamos camino a su casa —dije tontamente, a la vez que una pequeña sonrisa se asomaba por mis labios.
—¡¿Qué?! —exclamó, y todos voltearon a verlo.
Cuando las miradas de nuestros compañeros dejaron de estar sobre nosotros, Dong Min continuó con su interrogatorio, pero en voz más baja.
—¿Cómo pasó eso? —confundido, exigió una respuesta de mi parte.
—No lo sé, estábamos caminando en silencio y ella tomó mi mano, simplemente pasó —contesté aún más confundido.
—¿Por qué aún no lo han hablado? —volvió a preguntar.
—Tampoco lo sé, desde ese día estuve pensando meticulosamente en qué le iba a decir, incluso lo practiqué, pero cuando la vi, se me fueron las palabras. No pude decir nada. Estoy perdido... —suspiré, frustrado.
—Tranquilo, aquí está Dong Min para ayudarte. Si quieres, luego podríamos ir a hablar con el compañero de ___, con la excusa de que en realidad vamos a hablar con ella. Seguro no es ni competencia, al igual que Min Hyuk —dijo, intentando calmar mis inseguridades.
—¿Estás seguro de que es así?