Capítulo 4

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Desperté cuando los rayos del sol se colaron por mi ventana. Al principio, seguía sintiendo mi cuerpo pesado, lo que quería decir que no estaba del todo espabilada, pero, cuando sentí una respiración ajena a la mía en mi cuello, mi corazón comenzó a acelerarse. Me dije a mí misma que debía calmarme y tomé aire profundamente. Cuando moví mi mano izquierda, sentí que la tenía enredada en el pelo de mi amiga. Sí, Lexa, tu amiga. Intenté mover la otra mano, pero no pude. Luna tenía sus dedos entrelazados con los míos. Por fin me atreví a abrir los ojos y observé cómo dormía plácidamente en la misma postura que adquirimos la noche anterior. Yo sabía que debía centrarme, pero soñé toda mi vida con despertar de esa forma con ella, y era incluso más bella de lo que mi mente podía llegar a imaginar. Luna, ¿acaso estabas intentando matarme de felicidad? Pero todo se esfumó cuando miré la hora.

-Shit! – grité sin querer, ella se sobresaltó-. Sorry – reflexioné un segundo, aún un poco aturdida-. O sea... lo siento. Joder, joder, joder... - di un salto de la cama y, sin que me importara que ella me pudiese ver, empecé a desnudarme-.

- ¿Qué ocurre, Lexa? – preguntó sobándose un ojo, adormilada y absolutamente cautivadora-.

-No me ha sonado la alarma – cogí el primer vestido que vi-. T-tengo una vista... - empecé a subirme la cremallera-. A las... diez, y mira la hora... - comencé a pelearme con el vestido, pues el cierre no quería terminar de subir-. Fuck! – grité frustrada-. ¡Sube de una maldita vez!

-Déjame que te ayude, anda – se levantó y, tras dirigirse a mí, apartó mi pelo rozando mi nuca para, posteriormente, ajustar la cremallera debidamente; ante ese contacto, se me erizó la piel-. ¿Ves? Nada sale bien si te apresuras – hizo que me diese la vuelta para que la mirara-. Te ves muy guapa, Lexa – me sonrojé-. Y tranquilízate, tienes una hora todavía.

-No tengo una hora. Tengo que ir a mi oficina para recoger mis documentos, que está a media hora de camino con el tráfico que habrá ahora, y el juzgado está en la otra punta de la ciudad. Y llegar tarde a una vista que he pedido yo me va a dar mala reputación.

- ¿Tienes ordenador e impresora? – dijo Luna, pensativa-.

-S-si, en... en el salón. ¿A qué viene eso ahora?

-Dile a tu secretaria que te mande una copia digital de los documentos por correo y los imprimes. Así te puedes tomar un café mientras y, cuando los tengas, vas directamente al juzgado.

-Eso es... ¡brillante! Luna, you're a genious! – besé su frente sin pensarlo debido a mi euforia, ella me miró, sorprendida-. El móvil... ¡Ahí! – salté sobre la cama para alcanzarlo, Luna apenas daba crédito a lo que veía-.

Clarke

Clarke

Clarke

Clarke

Déjame al menos desbloquear el móvil

¿Qué ocurre?

Deberías estar aquí desde hace una hora

Sí, lo sé, me he dormido

Mándame una copia de los documentos de Héctor

Inclúyeme los datos de ADN de su ropa

¡Hoy meteré a alguien en la cárcel!

En cinco minutos los tendrás

Otra cosa, Clarke

Ms. Thompson; lawyer [Clexa AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora