Epílogo

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Adriel

Miré por la ventana, sonreí al ver a mi hijo y a mi esposo entrenar juntos.

-Papá-mi hijo mas pequeño me miraba desde la silla-Tengo hambre.

-Ya va cariño-besé su cabecita-¡Chicos a comer!-grité por la ventana.

-¿Me sirves a mi primero?-sonrió mi hijo comprador.

-Obvio que si bebé-le guiñé el ojo y le serví, dejé el plato frente a él y serví el resto.

-¡Ya llegamos!-Xavier y Darel entraron ya cambiados.

-Hola pequeñito-Xavier besó la mejilla de Theo y se sentó a su lado.

-Hola pa-Theo sonrió y comenzó a comer, los tres comian como bestias.

-Dios,mira que comen mis himbrecitos-sonreí comenzando a comer.

-Papá-llamó mi atención Darel, ahora de 18 años-¿Podemos Theo y yo ir con los primos al parque?

-Si, pero yo los acompañaré hasta la casa de los tios.

-Está bien pa.

Terminamos de comer y los chicos se fueron a aprontar arriba.

-Cuidate amor, prometo estar temprano en casa-Xavier besó mis labios, estaba cada dia mas hermoso.

-Está bien, nos vemos mi amor-le dí un último beso y salimos hacia la casa de Artax y Jonatan.

Al llegar Elias y Danna,los hijos de 13 y 16 que habían adoptado mi mejor amigo y su pareja hace años vinieron corriendo hacia nosotros.

-Vayan con cuidado-besé las mejillas de mis sobrinos y de mis hijos y fui hacia la casa de Artax.

Al acercarme y escuchar algunos ruidos decidí dejarlos disfrutar sus horas libres.

Volví a casa a pensar en todo lo que había pasado todos estos años.

Lugo de que Xavier y yo nos casamos, ambos seguimos trabajando, yo en el orfanato y Xavier en la guardia.

El orfanato se transformó en un hospital cuando todos los niños fueron adoptados.

Al no querer separarme de Theo y Darel, le planteé a Xavier adoptarlos, el ni siquiera titubeó y juntos les fuimos a dar la noticia.

Ambos se vieron muy felices en ser parte de nuestra familia,Theo era otra persona, hablaba mucho y resultaba ser un chico muy divertido.

Darel había sacado su verdadero potencial de beta y ahora entrenaba junto a su padre todas las mañanas para entrar a la guardia, mientras que el pequeño Theo luego de la escuela pasaba el día conmigo.

Imaginense la sopresa que me llevé al ver a Xavier ser tan cariñoso con los chicos, ambos amabamos a los pequeños como si fueran nuestros hijos de toda la vida.

Micah y Oliver seguían juntos en su manada, ambos venian a visitarnos cada tres meses y hablaba con ambos por teléfono constantemente, mañana vendrían a visistarnos ya que era el cumpleaños de Darel.

Xavier

-Shh-le hice una seña a Theo y seguimos caminando en silencio hasta la habitación de Darel.

Adriel abrió la puerta y entramos.

-¡Feliz cumpleaños!-Darel saltó de la cama y sonrió al vernos.

Su hermanito salió corriendo y se tiró arriba de su hermano.

Adriel y yo nos sentamos en la cama junto a ellos.

Nunca es tarde (Gay) #Wattys2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora