XVIII

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Pasaron 10 minutos y mamá seguía con la rehabilitación, Dante estaba muy tenso, sudaba mucho, su respiración era agitada, se mordía el labio inferior, suspiraba bastante seguido, se lamía los labios, cerraba sus ojos conteniendo el llanto pero no hablaba, 5 minutos más tarde todo lo anterior se duplicó, él empezó a moverse y a quejarse, decía que le dolía.

Dante: - Ay me duele.... Para, para por favor, me duele mucho - decía sin parar de moverse.

Mire a mamá y le hice una seña para que pare pero me dijo que no con la cabeza, me enoje pero no le dije nada, mientras Dante seguía quejándose de dolor.

Dante: - Basta, por favor, me duele - decía y sus ojos se llenaron de lágrimas que trataba de contener pero que iban a salir en cualquier momento.

Simona: - Mamá para por favor, te está diciendo que le duele - le supliqué.

Marilina: - Dante sé que te duele, lo sé pero no puedo dejar la sesión por la mitad, tengo que terminar, perdón.

Dante: - Pero me duele mucho - dijo con voz entrecortada - no más por favor, me duele - le suplicaba.

Marilina: - Cariño, aguanta unos minutos más, ya termino - le dijo mientras seguía trabajando y Dante estaba cada vez más dolorido.

Miraba a mi madre con bronca, estaba muy molesta, no entendía porque seguía, él le decía que pare, que le duele y ella solo seguía y le decía que resista un poquito más, como si fuera fácil, no me gustaba verlo así, sufriendo, yo sostenía su manos y él las mías.

Dante: - Simona dile que ya no más por favor, me duele - me dijo rompiendo en llanto.

Simona: - Shhh... shhh tranquilo, tranquilo, ya termina, ya termina - le dije tocando su rostro mojado.

Dante: - ¿Cuánto falta? - preguntó llorando y en voz baja que apenas pudimos escuchar.

Marilina: - Poquito muy poquito, tranquilizate, respira hondo - le dijo - si te tranquilizas es mejor.

Simona: - Respira, respira conmigo, inhala y exhala, tranquilo, no llores.

Pasaron unos minutos más y Dante seguía tenso y dolorido pero un poquito más calmó.

Marilina: - Muy bien, ya está terminamos por hoy - dijo mamá.

Dante y yo suspiramos profundamente.

Simona: - Muy bien ¿Cuándo es la próxima? - dije acariciando su rostro suavemente.

Marilina: - Mañana, Diego me dijo de Lunes a Sábados.

Dante: - Pero no quiero más - dijo él serio y decidido.

Simona: - ¿Cómo queno querés más? - le pregunté tomando una toalla para secar su transpiración.

Dante no dijo nada pero mamá se acercó a él y le dijo:

Marilina: - Cariño escuchame sé que no quieres más, que estás cansado y que te duele pero vas muy bien, si sigues así pronto vas a caminar - le dijo mirándolo a los ojos pero él no dijo nada otra vez.

Simona: - Esa es muy buena noticia- dije muy alegre.

Diego: - ¿Cuál es la buena noticia? - preguntó el patrón Diego entrando a la habitación.

Marilina: - Que tiene un sobrino muy valiente que va muy bien en la terapia.

Diego: - Muy bien Cabezón -  dijo besando su cabeza.

Simona: - Si sigue así pronto va a poder caminar. 

Diego: - Te felicito campeón eh - le dijo mirando su rostro cansado.

Dante no pronunciaba una palabra y sus ojos se cerraban de sueño.

Diego: - Perdón que no puede estar con vos cabezón, tenía muchos pacientes en la clínica y no pude cambiar ni cancelar los turnos.

Dante: - No pasa nada - le dijo medio dormido.

Diego: - ¿Y como estuvo el paciente hoy? - preguntó mirando a Dante que apenas abría los ojos.

Marilina: - Bien, muy bien. Le dolió un poquito pero como él es un muchacho muy valiente se la banco.

Simona: - Si si se la re banco - dije orgullosa.

Dante: - Tío no quiero más, me duele mucho - me dijo como mirándolo a los ojos.

Diego: - Si sé que duele pero tenés que ser fuerte y aguantar porque vas muy bien.

Simona: - ¿Por qué le duele? - pregunté curiosa.

Marilina: - Duele porque sus huesos y músculos están despertando, estuvieron muchos años sin ningún tipo de movimiento por eso duele pero después va a pasar y ya no le va a doler, sus huesos y músculos van a estar fuertes y ahí va a poder caminar - explicó mi mamá.

Simona: - Entiendo.

Dante: - ¿Entonces eso significa que me va a seguir doliendo? - preguntó confundido.

Los tres nos miramos y el patrón decidió responder su pregunta.

Diego: - Si pero es un tiempo no más ¿Si? Y vos sos muy fuerte y vas a resistir ¿Sí?

Dante solo movió la cabeza diciendo si.

Dante: - Tío estoy muy cansado, tengo mucho sueño, quiero dormir.

Diego: Está bien, descansa, nosotros nos vamos - le dijo dándole un beso.

Marilina: - Adiós Dante, hasta mañana.

Simona: - Chau Dante.

Dante: - Adiós.

El Amor Lo Cura Todo (DAMONA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora