Volver a Verte (The WANTED)

Capítulo 2

Los padres de Kate ya estaban en el auto, esperando a que su hija se despidiera de sus amigos.

Todos estaban en una fila frente a Kate, encabezada por Jess.

-No puedo creer que esta sea la última vez que nos veamos- dijo con los ojos rojos e hinchados. Sin duda había estado llorando la noche anterior.

-Jess, estaremos en contacto- dijo Kate-. Y no será la última vez que nos veamos. ¿Recuerdas lo que dije ayer? Era en serio, volveré.

-Confío en que lo harás.- Y se lanzó a los brazos de su amiga. Su cabellera rubia le cubrió la cara a Kate, pero ella no se quejó.

-Dejé algo para ti sobre el alféizar de mi ventana- le susurró Kate al oído-, búscalo más tarde.- Y la abrazó con más fuerza.

Fue un abrazo largo, y cuando se separaron Jessica se cubrió la boca con su mano y retrocedió. Se fue al final de la fila, donde Max la recibió con un abrazo.

La siguiente era Paula.

-Investigué y tal vez tu tía no se equivoque al decir que Nueva York te gustará- dijo-. Pero no dejes que te guste más que este lugar.

-Para nada- respondió Kate mientras abrazaba a su amiga.

Paula era un poco más baja que ella y Kate siempre sintió la necesidad de protegerla, incluso en ese momento, así que la abrazó más fuerte.

Al separarse, Kate le dio una pequeña caja roja. Paula la miró confundida.

-Es sólo un pequeño regalo- dijo Kate a modo de disculpa-, pero espero que te guste. Iba a esconderlo para que tú lo descubrieras después, pero ambas sabemos que no eres buena en eso.- Y le ofreció una pequeña sonrisa.

-No, no lo soy- respondió también con una ligera sonrisa-. Gracias.

Después estaba Jay, usando una camisa azul que hacía que sus ojos, del mismo color, se iluminaran y destacaran.

-No soy bueno con las palabras- comenzó-, y tú lo sabes bien. Pero creo que no está de más decir que te extrañaré... mucho... y que, cuando vuelvas, yo estaré aquí y te recibiré con los brazos abiertos... porque este siempre va a ser tu hogar...

Kate no dejó que terminara la frase. Rompió la distancia que había entre ellos y le dio un gran abrazo. Tuvo que ponerse de puntillas ya que Jay era más alto.

-Tal vez no seas bueno con las palabras, pero siempre sabes exactamente qué decir. Al menos eso creo yo.

Jay retrocedió, alargó la mano y le alborotó el rizado cabello a Kate.

Seguía Siva, que trató de darle una sonrisa de ánimos.

-¿Qué puedo decir que no te hayan dicho ellos ya?

-Di que cuando regrese mi mejor amigo seguirá siéndolo.

-Tu mejor amigo se quedará aquí esperando tu regreso- aseguró-, y seguirá siéndolo, no te preocupes.

Abrazar a Siva siempre reconfortaba a Kate, pero no ese día. Aunque la hacía sentir mejor. No bien, pero sí mejor.

Después Siva puso sus manos en los hombros de la chica y desde lo alto que era la miró.

-Tienes que ser fuerte. Nosotros lo seremos por ti. Cuando vuelvas queremos ver a la misma chica risueña de siempre, más feliz que nunca. ¿De acuerdo?

-De acuerdo- fue la respuesta de Kate. Una pequeña lágrima corrió por su mejilla, pero la limpió en seguida.

A continuación estaba Nath. Se acercó, pero sin decir nada, así que Kate rompió el silencio.