Pequeño Demonio; Monsta X

Capítulo 31

Habían salido de casa de Jooheon para ir a la de los demonios.

Kihyun y Hyungwon caminaban de un lado a otro de la sala, guardando infinidad de cosas en una pequeña mochila negra de manera frenética, desesperada.

Los humanos aun seguían de pie sin saber exactamente que hacer o que decir. 

Jooheon seguía algo perdido, pensando en que tanto podría hacer por encontrar a Changkyun y si tenia que buscar por cada rincón del maldito mundo claro que lo haría. 

Wonho lucía pasmado y algo impresionado por lo anterior, al igual que Jooheon estaba en algún tipo de shock que le hacía permanecer mudo e inmóvil como un maldito maniquí.

Hyunwoo fue el único de los tres que se movió directamente a donde estaba Kihyun y le tomó de los hombros, buscando que este repare en el hecho de que ellos tres aun estaban ahí, y lo mas importante de todo, que querían ayudar a encontrar a Changkyun, aun si lo que sea que pudieran hacer fuera mínimo.

—Bien Doctor Strange ¿Ya vas a decirnos que podemos hacer o quieres que sigamos como estatuas aquí? —A pesar de parecer un reclamo, para nada sonó a uno.

En el lenguaje Hyunwoo, que le hubiera detenido de su agitado ir y venir un segundo y le hubiera dicho aquella pequeña broma se podía traducir a un "Tranquilizate ¿si? estamos aquí para ayudarles" E inevitablemente sonrió.

Era necesario pensar con la cabeza fría si quería recuperar a su hermano vivo y entero. No podía darse el lujo de dejarse llevar por sus emociones o de no pensar bien las cosas, un insignificante error podía costarle la vida a Changkyun, e incluso a ellos mismos o a sus amigos.

Respiró profundo, calmando al menos un poco su pulso acelerado. Cerro los ojos unos segundos a la par que rodeaba el cuello de Hyunwoo con sus brazos, pidiéndole silenciosamente algo de su cariño y consuelo físico.

Estrujó el pequeño cuerpo entre sus brazos, cumpliendo la petición de Kihyun. Sólo unos segundos después se separó lo suficiente del pelirosa para besar delicadamente su frente.

—Es bueno escuchar eso, porque necesitaremos su ayuda —Habló finalmente Kihyun.

El demonio pidió a los humanos que se acercaran a él, mientras Hyungwon seguía guardando quién sabe qué en la mochila.

Tal como hizo con en libro, volvió a utilizar sus manos para hacer unos cuantos movimientos, solo que esta vez nada apareció pero la punta de su dedo anular se ilumino con una luz de color escarlata. Concentrado, dibujo en el aire con el rastro de aquella pequeña luz lo que parecía ser una caja, la cual se materializo al instante de acabar de darle forma.

Era pequeña, hecha de un cristal opaco que evitaba ver que era lo que contenía, pero la curiosidad no les duro mucho por que Kihyun saco de ella tres esferas negras.

—Antes de que pensemos en un plan lo suficientemente bueno para traer a mi hermano de regreso, y si se puede, castrar al cabrón de Yoongi junto sus mascotas, necesitó que tengan esto —Kihyun les dio a cada uno una esfera. —Siempre hay que esperar lo peor ¿no? Y si esto no sale bien van a utilizarlas cuando llegue el momento —

—¿Qué son? —

Por un momento se vio a si mismo diciéndole a Jooheon que eran las esferas del dragón pero no era el momento, no ahora cuando el chico tenía ese aspecto de ponerse a llorar en cualquier momento por la culpa de haberle hecho daño a la persona que ama. Funcionó cuándo Shownu lo comparó con el famoso hechicero supremo de esa tan afamada editorial de comics, deseaba poder hacer lo mismo por Jooheon pero sabía que lo único que le levantaría el ánimo era tener de vuelta a Changkyun.

Esa y otras cuantas razones tenía para no decirles lo que esas esferas realmente eran.

—Sirven para inmovilizar. Al romperse liberan un rayo lo suficientemente fuerte para paralizar hasta a una docena de elefantes. Es doloroso así que tengan cuidado —

Automáticamente se tensaron al tener ese tipo de objetos en sus manos por primera, y esperaban que última vez en su vida.

—Ahora —Volvio a hablar Kihyun cuando notó que los humanos no dirían nada más —Jooheon, ven a ayudarnos a Hyunwoo y a mi. Wonho irá arriba haber que puede hacer por Hyungwon —

“Te lo encargo” Gesticulo con sus labios al rubio y Wonho se fue, no sin antes asentirle con la cabeza.

Encontró a Hyungwon en su cuarto, de píe junto a la ventana. Se abrazaba a si mismo, no porque sintiera frío, sino que inconscientemente buscaba consuelo, que alguien le dijera que todo iba a estar bien aun que fuera una mentira.

Cruzó el umbral sin pensarlo y en menos de 10 segundos ya tenía a Hyungwon entre sus brazos. El demonio estaba tan absorto que la repentina sensación de los fuertes brazos de su novio rodearle le sobresalto pero era casi como si esperará por ella.

Agradecía tanto tener a Wonho en un momento como éste, justo cuando necesitaba apoyarse de alguien.

Wonho le besó delicadamente sobre su mejilla, ganándose la primera sonrisa de Hyungwon en esos días que había estado tan apagado.

—Recuerdo la primera vez que me invocaron. Por supuesto sabía lo que debía hacer, pero de ningún modo te puedes preparar para eso solo escuchándolo de la boca de alguien más. Cuando regresé a “casa” no podía dejar de llorar, en ese entonces no sabía porque, pero ahora se que me sentí tan profanado que ni siquiera noté cuando empecé a llorar. —Hyungwon lucía demasiado sereno para lo que le contaba, pero no lo interrumpió y al contrario, dejo que siguiera, aun si eso significaba que su corazón se rompiera al escuchar las vivencias de su demonio. —Esa ocasión mis hermanos durmieron conmigo. Changkyun me abrazó toda la noche y me arrullo hasta que deje de llorar —Giro un poco la cabeza para ver a Wonho y sonreírle —Acabas de recordarme aquello —

Ojalá Kihyun hubiera tenido razón en eso de que podía darle unas míseras palabras de aliento pero la verdad es que lo poco que le dijo fue suficiente para provocarle un gran nudo en la garganta que, aparte de que su estúpido cerebro no encontró nada que responderle, si hablaba estaba seguro que la voz se le quebraría y consecuentemente lloraría. A veces ser tan sensible no era nada conveniente.

—No te esfuerces conejito, desde aquí veo que tienes los ojitos llorosos —A Hyungwon siempre le había conmovido la sensibilidad de su novio, sobre todo si era por él. —Es suficiente con tenerte a mi lado...—Se giro para así abrazar a Wonho como se debía, hundiendo su cabeza en la curva del cuello ajeno y agradecía por milésima vez a quién sea que le haya permitido tener a tan hermosa persona con él, para sostenerlo ahora que tanto lo necesitaba.

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Iba a actualizar esta vaina desde inicios de semana pero tenía muuucha tarea, lo peor de todo es que tengo más para la próxima semana y hoy hice como 500 prácticas de dactiloscopia :')

En fin, tengan un lindo día/tarde/noche 💕 y perdonen, perdonen si se me fue algún error 🙇

Nos leemos la siguiente 😉