Extra; 01.

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Luna / 1 año después

Corro como alma que lleva el diablo al auto de Gastón, los malditos no me despertaron temprano.

«¿Para que te quedas estudiando hasta tarde? Ni aprendiste nada».

A dividir.

Nah, solo que se me dificulta.

- ¿Como amaneció la bella durmiente?

- Muy gracioso, Perida - hablo con un deje de sarcasmo - amaneciste de buenas.

- Amor - Nina lo mira - si no te apuras vamos a llegar tardé

- Enseguida cariño.

- Melosos - suelto con desagrado.

- Vimos que Franco te esta echando el ojo, así que, cuidadito - Gastón.

- No me interesa, no tengo tiempo para esas cosas, la compañía me trae estresada.

- En la tarde iremos a patinar, sales temprano de allá.

- Si mi capitán.

- Aquí está tu edificio, apurate que llegaras tarde, llevaré a Nina al de lenguas.

- Nos vemos en el almuerzo.

[...]

A mitad de mi clase me llega un correo, pido permiso para salir. Viene de Argentina.

“Señorita Valente, ya se han hecho unas acciones con una compañia de USA, se le avisará con anticipación si un socio u otra persona quiere comunicarse con usted.

Att: Reinaldo Gutiérrez”

Es Rey, vamos avanzando con la compañía, hemos hecho más inversiones este año que cuando mi familia lo administraba.

Ingresó al aula, mi mochila no está donde la dejé, en cambio, en mi lugar está un chavo que no conozco, buscó mi mochila, esta a un lado de Francisco Gortares, él me recuerda mucho a Matteo, es demasiado fresa y naco. Como no me queda de otra me siento junto a él, es un gran amigo, lo admito, es inversionista con mi compañía, me ha ayudado a entender todo.

- Me las pagarás...

Un chavo — nuevo — entra por la puerta «Ni modo que por el ventilador». sacudiendo su pantalón, viene lleno de tierra, sonríe algo apenado a la maestra que ni se inmuta.

- Imagino que eres el nuevo alumno.

- Así es, Kenan Morales.

- Señor Gortares, ceda su asiento al muchacho.

Internamente me río de él porque su plan no funcionó, el chavo se sienta a mi lado, continúa la clase. En toda la jornada no habló, nadita. Es parecido a Éric en ese aspecto.

«Siempre comparas a las personas con tus amigos».

Es que los extraño demasiada, en navidad no pude visitarlos, me reclamaron casí medio año por eso.
Se hace la hora de la siguiente clase, me toca dos veces seguidas, el chavo se queda ahí, el rostro neutro, ajeno a lo que pasa a su alrededor.

- ¿Tengo algo en la cara? - pregunta en voz baja.

- No, disculpa.

«Es lindo ¿Nos lo podemos quedar?».

Bastante tenemos con los dos argentinos.

«Pide uno para Navidad».

Quiero Algo Más - Lumon [QAML #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora