Pov Yunho
¨El corazón está hecho para romperse¨
Hay personas que te dicen que el tiempo lo cura todo, que el dolor es pasajero. Que las heridas sanan.
Mintieron
Solo aprendes a vivir con las heridas y el dolor. Durante tanto tiempo oculte mi pasado con el firme propósito de ser otra persona. Pensé que el tiempo curaría aquellas heridas que mi padre dejo; y no hablo de las de mi cuerpo sino de las que están en mi corazón; nunca, nunca sucedió. Quizás algunas veces duelan menos o dejen de importar, pero siempre estarán ahí clavándose en tu pecho como dagas.
¿Por qué?
Fue lo primero que pensé cuando termine de leer la siguiente página que mi esposo escribió en aquel diario, él sabía todo acerca de mi padre biológico; una sonrisa amarga cruza por mis labios y la impotencia de haber dejado que ese hombre llegara él.
Tenía la cabeza caliente cuando sujete mi teléfono y marque el número de mi padre. Al tercer timbrazo contesto.
– ¿Dónde diablos estas?–gruñí a través del teléfonos. Mis dedos dolían mientras apreté el teléfono, pero no importaba.
–Hola. Marica–escuche risas en el fondo y música a todo volumen.
No necesite más para saber que estaba en el bar con sus amigotes. Colgué el teléfono y me subí al auto, las llantas chillaron cuando arranque el auto a toda velocidad.
Cuando entro al bar, recorrí con mi mirada todo el lugar, hasta que siento una mano en mi hombro, me pongo tenso por el toque, pero mantengo la emoción fuera de mi rostro. Cuando me giro no sé lo que mi padre vio en mis ojos, pero retrocedido.
Traigo cada poco de rabia que tengo a la superficie, y golpe a mi padre en la cara, la sangre no tarde en salir de su nariz. Pero no me detengo, estampo una y otra vez mi puño en su rostro. Doy rienda suelta a todo lo que llevo dentro y lo que he cargado durante años.
Ya no era un niño pequeño. Ahora era un adulto
Ya no estaba asustado. Ahora solo tenía odio.
¿Quizás mi padre tenga razón? No somos tan diferentes.
Ambos teníamos esa ira creciendo por dentro, estábamos rotos, queríamos hacer daño
Los brazos de Yoochun están sosteniéndome fuerte, mientras me separa y evitan que siga golpeando a ese hombre que está en el suelo con sangre en su rostro,pero con esa sonrisa de suficiencia, que solo hace que me moleste más.
–Eh. Marica–dice levantándose. Mientras con la palma de la mano se limpia la sangre que le escurre del labio y escupe la sangre al suelo. ¿Qué diablos te pasa?
Me quito a Yoochun de encima, mientras empujo a mi padre contra la pared.
–Jaejoong–gruñí.
Si las miradas mataran estoy seguro que mi padre estaría bajo tierra en este momento.
–Vaya–dice riéndose. Creo has descubierto nuestro pequeño secreto. Estas enfadado por eso.
–Aléjate de él–grite encolerizado.
El estallo en carcajadas, mientras me empujaba. Su sonrisa se agrando.
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LO QUE NUNCA TE DIJE
FanfictionJaejoong y Yunho llevan casados durante cinco años, en un matrimonio donde las peleas son cosa de cada día, se casaron enamorados pero en algún momento el amor se acabó dejando heridas en sus corazones. O solo es falta de comunicación y el amor s...