PARTE 16 RESPUESTAS

475 42 7
                                    



Pov Jae


"No hagas  preguntas si sabes que no puedes soportar las respuestas"

Accidente

Golpe, sangre

Vidrios rotos

Frío, humo, explosión

Cuando desperté, o al menos tuvo conciencia todas esas palabras trataban de darle sentido en mi cabeza.

Y después todo paso deprisa. Esquive el auto negro, choque contra la barandilla, no pude frenar y lo siguiente que supe es que mi auto había volado por los aires. Dando vueltas de campana. Sentí la sangre caliente deslizarse por mi frente y llegar hasta vi boca, dejándome un sabor a metal.

El fuego era de color naranja- rojo con llamas, expeliendo todo el calor sobre mi cuerpo y espeso humo negro me rodeaba; deslizándose por garganta y dificultándome respirar, sabía que tenía que salir del auto, pero mi cuerpo estaba tan pesado y no podía moverme. Mi pierna punzaba y se había quedado enganchada con algo.

A lo lejos veía unas personas correr y gritar en mi dirección, sus palabras no tenían sentido para mí. Supongo que querían ayudarme.

Mis ojos pesaban y solo quería cerrarse, mis pulmones dolían y único en lo que podía pensar era en que iba a morir.

Dicen que cuando uno está al borde de la muerte, todos los recuerdos pasan por tu cabeza con un flash. Tuve una remembranza de todos mis momentos. Yunho estaba en todos ellos, pude ver claramente su rostro mientras todo se volvía oscuro.

Cuando abrí los ojos, vi la luz que se filtraba por la ventana; tan fuerte que mis ojos ardieron. No sabía dónde estaba pero había un olor familiar. Desinfectante y alcohol.  Estaba en un hospital.

Genial. Estaba de vuelta.

Trate de incorporarme, pero no pude, me dolía demasiado. Demasiado.

Había una vía intravenosa en mi brazo derecho; podía verla metida en mi piel debajo de mi bata. Oí llorar alguien e intente incorporarme otra vez.

–– ¿Mamá? –– dije o lo intenté, me costaba hablar. Podía sentir el sabor a metal  en mi boca y ese persistente dolor de cabeza que me impedía hablar.

–– Oh, hijo ––dijo ella acercándose. Puso su mano en mis hombros, suavemente. Tocándome como si tuviera miedo de que me rompiera. Podía sentir sus dedos temblar.

––A despertado. ––dijo la voz de mi padre detrás de mamá.

No sabía lo que estaba pasando. Pero mi madre y mi padre estaban llorando lo que me asustó. Intentaban recordar pero mi cabeza estaba toda revuelto. Los recuerdos estaban ahí, sin embargo. Podía recordar a Yunho y nuestras peleas. También recuerdo vagamente esa luz blanca brillante, que hacían que mis ojos quemaran. Más allá mi mente estaba en blanco.

¿Qué había pasado?

Un médico entro dejándome más confundido. No se comportaba como los típicos médicos era mucho más amable.

–– ¿Cómo esta luz Jaejoong? ¿Es demasiado brillante, Jaejoong? Voy a tomarte la presión arterial ahora, Jaejoong. ¿De acuerdo? Todo está bien

Pero esa presión en mi pecho no se iba, entonces me congele en mi lugar; Yunho y yo habíamos estados en el estacionamiento abrazados por lo que parecieron horas, cuando solo habían sido unos minutos. Esa luz blanca que hacía que mis ojos quemaran. Un auto acercándose a toda velocidad.

LO QUE NUNCA TE DIJEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora