Bea llamó al telefonillo y subió a casa de Hugo. Faltaba media hora para las doce, la hora a la que habían quedado. Era demasiado pronto, pero no podía esperar en la calle porque se estaba haciendo pis por culpa de Cecilia. Ella era la que había insistido en que saliera pronto, ella era la que le había hecho beber casi un litro de agua antes de salir para que se recuperara de la resaca.
Se quedó sin aliento cuando la puerta se abrió, ante la visión del desconocido que la recibió. Aquel hombre era un dios griego de perfectas proporciones y cuerpo hercúleo que apenas llevaba puesta una toalla blanca de un tamaño ridículo. Bea se quedó bizca un par de segundos por la impresión. Después miró hacia atrás para ver si le estaban gastando una broma.
—¿Vienes a ver a Hugo? —preguntó aquel hombre. Bea solo fue capaz de asentir con la cabeza. —Soy su compañero de piso.
—Beatriz, llegas media hora pronto. Yo también te echaba de menos —Hugo la saludó con una sonrisa, el pelo mojado y únicamente unos pantalones cortos.
—¿Puedo usar tu baño? —dijo Bea con urgencia, parando el juego y abandonando toda esperanza de manejar aquella situación con dignidad.
—Al fondo a la izquierda.
Fue dando zancadas hasta donde le había indicado, entró en el baño y cerró la puerta de golpe.
No tardó en terminar, pero decidió esconderse dentro del baño hasta que aparecieran los demás. Ya encontraría una justificación para estar allí tanto tiempo.
El baño no era muy grande, era antiguo y estaba cuidado y decorado con mucho gusto. No era el baño que se imaginaba que tendría alguien como Hugo. Tenía una gran cantidad de productos de belleza masculinos y un espejo grande. "Del tamaño del ego de Hugo", pensó Bea.
Sacó el móvil y vio que sus amigas habían escrito en el grupo que compartían. Había escrito hasta Eli, que solía estar muy ocupada. Para cotillear siempre estaba disponible. Otra que respondía rápido a la llamada del chisme era Lara. No tenía pelos en la lengua. Solía crecerse cuando tenía audiencia y Raquel siempre le reía las gracias. Camino intentaba en vano poner orden. Para sus amigas verla besar a Hugo, su enemigo jurado, debió ser un shock. Estaba segura de que necesitaban comentarlo y reírse un poco a su costa.
*** J0v3n3s&bruj4s
10:50 * Eli: nada? besaste a esa cosa delante de todo el mundo
10:50 * Eli: B, ahora probablemente tengas sidafilis
10:50 * Raquel: jajajsjajagsha
10:53 * Lara: me vais a perdonar pero bien por B, ya le estaban saliendo telarañas y el machistoso tiene un polvazo
10:53 * Raquel: jajaajajajafjajjaj tiaaaaaaaaaaaa
10:54 * Eli: Lara de verdad?
10:54 * Camino: el físico no lo es todo
10:54 * Camino: hay más cosas
10:54 * Lara: como qué?
10:54 * Eli: como no ser un psicópata
10:55 * Lara: Eli relaja, que solo se lo ha frungido
10:55 * Camino: ugh
10:55 * Lara: ugh? A ti te mola Ivanka Trump
10:55 * Raquel: Jajajajaaaaaaajajajaja
10:56 * Camino: no empecéis otra vez, es solo una fantasía
11:34 * Bea: ...
Lara tenía razón, Hugo tenía un polvazo y acababa de comprobarlo. Si vestido era guapo sin camiseta era puro vicio; tenía hasta un tatuaje enorme que le recorría el costado y le subía hasta el hombro. Pero claro, al lado de aquella aparición divina sacada de un calendario de bomberos que le había abierto la puerta, Hugo era bastante normalito.
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Si me dices que no
Romance¿Y si descubres que el chico que te detesta en realidad está loco por ti? Hugo no soporta a las feministas y Bea no soporta a los fuckboys como él. Para poder ir de viaje con los dos, sus amigos aseguran a Bea que Hugo está pillado por ella y a Hug...