El Regreso ( CEATD)

Cap 13

El silencio invadió el gran salón, un silencio que helaba los huesos de cualquiera ahí, los susurros se hicieron presentes, nada de esto le importo a Hipo, quien veía a Astrid con dolor.

Estoico: ¡Astrid!- dijo mientras se acercaba a Hipo y Astrid- ¿ como lo llamaste?- dijo impactado

Astrid miro a Estoico sorprendida, para después ver a Hipo, a quien trato de encontrarle algún tipo de expresión en su rostro, pero no, el solo estaba perdido en algún punto en su mirada, anhelando una respuesta, Astrid regreso la mirada a Estoico y suspiro pesadamente, no existía palabra alguna que pudiera decir, solo negaba lentamente con la cabeza, como si eso le fuera a ayudar con el problema que tenía sobre los hombros

Estoico: ¿Hipo?- dijo casi en un susurro

Hipo estaba con la mirada perdida en algún punto en el piso, al escuchar su nombre se tenso notoriamente , finalmente suspiro resignado

Hipo: se lo que vas a decir- dijo mientras dirigía su mirada a Estoico, quien se encontraba sorprendido- que ¿por que lo hice?, que ¿como pude irme sin decir nada?- Hipo ya se encontraba al borde de la histería, solo gritaba, estaba desconcertado- si, FUI UN COBARDE, PREFERI HUIR LEJOS CON CHIMUELO QUE AFRONTARTE- respiro un poco para calmarse - pero, creí que estarías mejor sin mi, que todos lo estarían,¡ sabía que era la vergüenza de todo berk, pero eso no me importaba!- dijo soltando un suspiro - lo único que me dolía era saber que yo era tu vergüenza mas grande- dijo con dolor en sus ojos, todo se reflejo a cada palabra que decía - anda- hizo una leve pausa-¡ gritame!, ¡¡haz algo !!- dijo mientras lo veía con dolor - nunca fue mi intención regresar a berk- dijo en un tono de voz muy bajo, mientras cerraba los ojos con fuerza- tal vez ya no quieras volver a saber de mi, te fallé, a ti y a todos, y si, soy un cobarde- dijo esto ultimo mientras levantaba la cabeza, mostrando lo contrario de lo que acababa de salir de sus labios, el dolor en sus ojos era visible para cualquier persona en el gran salón, Hipo jamas se había sentido tan expuesto, jamas, pero sabía que el huir ya no sería una solución, su corazón ya no le permitiría marcharse y dejar a Astrid, pero chimuelo estaba al inicio de sus prioridades.
Hacía tiempo que Hipo había apartado todos esos sentimientos, y el hecho de regresar a berk hizo que todo explotara en su interior.
Finalmente tras un largo silencio, Estoico avanzo hasta donde se encontraba Hipo, quien dio unos cuantos pasos hacía atrás, le era casi imposible tratar de adivinar lo que Estoico pensaba en esos momentos, no había nada que pudiera describir su expresión facial, finalmente coloco ambas manos en los hombros de Hipo, y sin decir nada mas le dio un gran y fuerte abrazo, eso desconcertó a Hipo quien no correspondió el abrazo, sino hasta escuchar un par de sollozos de su parte, ese abrazo, fue como exhalar tras haber aguantado la respiración por mucho tiempo, fue reconfortante, fue liberador, simplemente fue lo que tanto padre e hijo necesitaban desde hacía más de 10 años, en esos momentos nada pareció importar, todos los problemas que tuvieron se disolvieron tal como la nieve ante la presencia del sol.

Estoico: me alegra tenerte frente a mi- dijo sin soltar a Hipo- creí que me esperarías desde el Valhalla- dijo apartándose lo suficiente como para verlo- eres un gran guerrero, de eso ya no tengo duda- dijo sin dejar de verlo

Hipo estaba en un conflicto consigo mismo, se sentía un completo cobarde, tenia bastante cosas con que lidiar en ese momento, su padre, chimuelo o Astrid, quien seguía tras el

Hipo: papá...- dijo casi en un tono inaudible- no puedo dejar a chimuelo- dijo apartando la mirada

Estoico- no tienes por que hacerlo, nos han salvado, y me ha traído a mi hijo de vuelta- dijo regalándole una gran sonrisa -MI HIJO, HA VUELTO A CASA- el grito de parte de los vikingos de berk ensordeció a Hipo, quien no tenia palabras, y sus pensamientos solo se centraban en alguien, en Astrid,

Estoico empezó a caminar al centro del gran salón tomando a Hipo por los hombros, quien no apartaba la vista de Astrid, quien había cambiado su mirada de una de odio a una triste, Hipo trato de descifrar por que Astrid se sentía triste, todo esto lo tenía muy inquieto, conforme Hipo se alejaba, poco a poco iba perdiendo a Astrid entre la multitud que se juntaba alrededor de Estoico e Hipo

Musa♤