El cielo se tornó de colores cálidos por la partida del sol, Astrid se encontraba en el bosque, tenía que regresar a Berk antes de que obscureciera pero no pudo evitar quedarse un rato a contemplar la vista. Unas manos tomaron su cintura y la acercaron a su cuerpo, para después besar su cuello
Astrid:¿ donde estuviste ?- pregunto al darse cuenta de que era Hipo
Hipo: resolviendo unos asuntos- susurro en su oído- pero, ¿Y tú, que haces aquí?, ¿qué fue lo que paso?- dijo apretando la más contra su cuerpo
Astrid: ¿por qué supones qué algo pasó?-dijo girando un poco su cabeza
Hipo: porque se que vienes aquí cada que intentas no matar a alguien- dijo en tono divertido- así que...¿qué fue lo que paso ?- pregunto nuevamente, Astrid dudo un momento si decirle o no pero no tenía caso pues sabía que si le decía, Hipo querría tomar cartas en el asunto pero ella podía solucionarlo por sus propios méritos
Astrid: nada - dijo la más tranquila y desinteresadamente que pudo, se giró y unió sus labios para desviar la atención del tema e Hipo correspondió gustoso, se dejaron llevar hasta que los besos se hicieron más deseosos y las caricias no tardaron en llegar
***
Conforme la escena frente a ella seguía, sentía como su rostro se tornaba completamente rojo, el calor le subía a la cara y le empezaba a faltar el aire, no pudo evitar que las lágrimas se propagaron por su rostro, tuvo que ahogar un sollozo pues no quería que la vieran así, al voltear nuevamente y comprobar que la escena se volvía más intensa, no pudo soportarlo y se alejó lo más rápido que pudo de ahí.
Jamás se había sentido de esa forma, sentía un grito atrapado en su garganta, sentía como si una daga se le clavada en el corazón cada que su mente le mostraba aquella imagen de Hipo, tan cómodo, tan feliz y deseoso de mujer....una mujer que no era ella y un sentimiento de soledad se apoderó de Dorothea por primera vez en 18 años, sabía lo que se sentía un corazón roto, se sentía impotente pues esto no era como aquella vez hace años cuando Hipo se marchó el día de su compromiso, esto no se sintió como aquel día pues en ese entonces la sensación de pertenencia seguía siendo parte de ella pero ahora lo veía y no permitiría volver a sentir eso nunca más, ella merecía un amor, alguien que la hiciera sentir en el cielo, ella quería a alguien en específico...y lo conseguiríaUna vez que no hubo rastro en su rostro de llanto, Dorothea se dirigió nuevamente a Berk y una vez que terminó de comer se dispuso a marcharse pues no le apetecía ver a nadie, estaba tan sumida en sus pensamientos que no se percató que Hipo estaba justo frente a ella, quien con algo de miedo paso junto a ella sin dejar de verla como si estuviera esperando algo de su parte, al sentir la mirada Dorothea volteo y al cruzarse con sus ojos verdes, nuevamente sintió aquella punzada atravesar su corazón, debido al miedo de que las lágrimas se le escaparan desvío rápidamente la mirada y se alejó casi corriendo, todo era muy reciente como para saber sobrellevarlo
A Hipo le extrañó, pero no más de lo que le alivio no tener que soportarla.Dorothea continuo con su camino tranquilamente hasta que vió a Astrid a lo lejos que se encontraba junto a una casa, pero esta vez en vez de sentirse triste o intimidada, se molesto bastante por lo que no pudo evitar acercarse a perturbar la paz que la invadía
Dorothea: hey .... ¿iris?- dijo acercándose mientas hacía una mueca como si se encontrará confundida por el nombre
Astrid: Astrid - corrigió con desprecio, sabía perfectamente que Dorothea conocía su nombre y en efecto así era
Dorothea: si bueno... como sea- dijo como si la situación le resultará nefasta - bueno, con eso de que tu he Hipo se llevan tan bien, me preguntaba si de casualidad sabes que es lo que más le apetece a Hipo por el desayuno- dijo en su típico tono inocente y presumido
Astrid: ¿y para que quieres saber eso?- dijo algo fastidiada
Dorothea: tengo pensado prepararle algo, pero...- dijo en tono ingenuo hasta que Astrid la interrumpió
Astrid: por que no mejor te dejas de juegos, ¿crees que por que puedes controlar a todos los que te rodean, podrás hacer que la gente se interese por ti?, déjame decirte algo...sólo eres una niña berrinchuda y caprichosa, mejor madura y date cuenta que el mundo no es como tú cabecita te lo muestra, no puedes obligar a alguien a quererte...- Dorothea interrumpió
Dorothea: no pretendo hacerlo- dijo lo más inocente que pudo, pero por dentro le hervía la sangre
Astrid: entonces déjame decirte que Hipo no está interesando en ti y no lograrás que lo haga con tus truquitos - dijo con aires de superioridad, una cosa era que fastidiara a Hipo pero otra muy distinta era que se metiera con ella, una vez que dijo eso, Astrid se dio media vuelta para marcharse pero algo se interpuso en su camino, era el brazo de Dorothea, que golpeó la pared con su puño impidiéndole el paso a Astrid quién giró la cabeza sorprendida en dirección a Dorothea la cual está vez la observaba con una mirada que irradiaba ira
Dorothea: ten cuidado Astrid- dijo en un tono duro y completamente alejado de su tono habitual el cual dejó a Astrid sin palabras- y esta vez sí tómalo como amenaza directa, nunca nadie me ha impedido tomas lo que quiero y lo que quiero es a Hipo...así que más te vale no causarme problemas, juego rudo, y lamento informarte que no soy quién crees que soy, así que andate con cuidado- Dorothea simplemente escupió las palabras cual veneno se tratase y volvió a golpear fuertemente su puño contra la pared pero Astrid nisiquiera parpadeo pues no se iba a dejar intimidar, Dorothea estaba viendo a Astrid como una amenaza cuando en realidad no era así
Musa♤
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El Regreso ( CEATD)
FanfictionHipo decide irse con chimuelo antes de que alguien supiera de el, la vida de Hipo cambia completamente cuando regresa a berk por un accidente Musa♤