El Regreso ( CEATD)

Cap. 45

Hipo tenía pocas opciones, sabía que una gran invasión estaba a la vuelta de la esquina, también sabia que conforme pasaban los días era menos probable que su padre mejorara y ya había pasado 1 semana desde el insistente, necesitaba ayuda de alguien que supiera de guerras y batallas tenía una cosa en mente, pero esperaba que no fuera necesaria, deseaba que alguien le diera una mano, ahora era el jefe de Berk temporalmente y su falta de experiencia era obvia y tenía que malabarear entre el entrenamiento de los jinetes y el hecho de ser jefe, necesita un plan de respaldo más sólido que el de unos cuantos jinetes inexpertos pero no estaban tan mal aunque aún era necesario pulir estrategias y crear otras, necesitaba pensar en algo
《Pídele ayuda》 dijo una voz en su interior pero descartó la idea pues no quería más problemas de los necesarios y sabía que si le pedía ayuda a esos viejos conocidos se traería problemas personales, además, ¿ qué tan factible era que quisieran ayudarlo después de aquel... malentendido?

Flashback

Tras salvarle la vida a un jefe de una aldea lejana, Hipo se convirtió en un invitado al cual trataban como a un rey e incluso un vago sentimiento de pertenencia le inundó el pecho aunque ya hacia casi 3 años había abandonado Berk pero Hipo era un solitario y eso no le molestaba, claro que aunque le rondó por la cabeza la idea de permanecer ahí lo descartó, no necesitaba de nadie en su vida salvo chimuelo, el era su único amigo y el único que necesitaba

Hermes: Hipo, que alegría verte- dijo al verlo entrar, Hermes era el hombre al cual le había salvado la vida y además el jefe de la aldea

Hipo: usted me mandó hablar- dijo en un tono neutro

Hermes dejó pasar aquel comentario frío por parte de Hipo y continuo- sabes lo agradecido que estoy de que te cruzadas en mi camino- al no recibir respuesta continuo- es por eso que he decidido pagar mi deuda.

Hipo: no le estoy cobrando nada - dijo aún muy Cerio aunque no sabía a donde quería llegar con todo esto.

Hermes: eres un claro ejemplo de valentía- dijo ignorando las palabras de Hipo- y sería un honor que formadas parte del mandato... es por eso que mi hija me ha insistido en que te recompense- Hipo tuvo que evitar rodar los ojos al escuchar nombrar a Dorothea, hija de Hermes, era una joven...muy joven, ingenua e insoportable chica

Hipo: es un honor pero no merezco nada- dijo interrumpiendo

Hermes: muchacho, siempre tan modesto- dijo en un tono suave, finalmente el hombre corpulento con la gran barba negra se puso de pie y camino en dirección a Hipo- te estoy entregando mi mayor tesoro, algo que ningún hombre hasta ahora se ha merecido, pero tu...- dijo señalándolo con el dedo mientras acentúa con la cabeza- pero tu muchacho te lo has ganado- dijo tratando de suavizar sus expresiones pero no tenía ni idea a lo que trataba de llegar- es por eso que he decido darte la mano de mi hija en matrimonio

Hipo abrió los ojos sorprendido, el no quería ningún tipo de responsabilidad que lo atara a nada y mucho menos deseaba desposar por obligación a alguien a quien apenas soportaba

Hipo: yo no le he pedido la mano de su hija- dijo buscando la mejor forma de zafarse de aquello

Hermes: Dorotea me dijo lo bien que se llevan y no me extraña nada que hayas sido tan caballeroso y respetuoso con ella, cualquier otro se hubiera cegado por su belleza - esta vez Hipo no pudo evitar fruncir el señor, Dorothea no era fea pero también era insoportable y no dejaba de insinuarse y hacerse la tonta y cada que soltaba esa risita era como si le taladrarán la cabeza, si había sido caballeroso era por que no deseaba ser grosero por todas las atenciones que habían tenido con el y fue respetuoso porqué sus principios le decían no gritarle a una mujer, además, ella no le atraía pues su corazón siempre fue de una mujer en específico, una con una cabellera rubia y unos ojos azules como el cielo y Dorothea tenía el cabello negro, y unos ojos color miel, tenía bastantes pecas que le daban un color rojizo a sus mejillas y en tanto no abriera la boca era hermosa,- ademas de que así podría seguir con mi plan de descanzo y estar seguro de que dejare el trono a alguien mas que apto para ello- hizo una leve pausa- Dorothea a elegido bien- dijo mientras le brindaba una sonrisa de aprobación, en tanto a Hipo quien estaba tratando de asimilar todo, perdió la oportunidad de decir algo más en su defensa, una vez que el nudo en su garganta se esfumó casi por completo se dio cuenta de que Hermes ya se había marchado del lugar y la confusión se volvió rabia pues no dejaría que nadie planee su vida sin su consentimiento

Fin de flashback

Musa♤