Capitulo 32: Nuevo Enemigo

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Narra Kaito

Era martes y Aoko seguía sin levantarse temprano para darme de desayunar, no recordaba lo mal que saben los panes en la panadería cerca de la escuela, por lo menos llega a la escuela y me da comida decente.

Me inquietaba un poco un mensaje que recibí la noche de la cita de Kid y Aoko, me lo había enviado el abuelo y decía que tuviera cuidado con un nuevo detective que acababa de llegar a la ciudad.

Debía investigar un poco del sujeto y monitorearlo para que no me sorprendiera con alguna trampa. Espere a que el día terminara y tome rápido mis cosas para salir hacia el trabajo de mi abuelo, baje las escaleras y me detuve en mi casillero para cambiarme los zapatos, mientras lo hacia me percate de una presencia a mis espaldas.

- ¿No deberías estar con Aoko? - pregunte esperando por su respuesta

- Ire a su casa más tarde - contesto cortante la inconfundible voz de la mejor amiga de Aoko, Keiko creo que se llamaba

- Estas más seria de lo usual - trate de crear una conversación

- Y tu nos molestaste a Aoko como siempre - ¿Porque le preocupa eso?, a Aoko igual no le gustan

- Tengo mis razones - me defendí

- ¿Como cuales? - esa pregunta me tenso

- No son de tu incunvencia - es lo primero que se me ocurrio - Nos vemos - le dije sin voltearme y saliendo del instituto

- ¿Que le pasa? - alcanze a escuchar antes de salir completamente

Camine unas cuantas calles hacia la estación de tren, todavía era temprano así que tendría que esperar a que el abuelo se librara de la gente, como a las 6:20 o 6:30. El tren no tardo mucho y llegue temprano con el viejo, me vio cara de hambre así que se tomo la molestia de irme a comprar ramen a la otra calle, quise pagárselo pero el siempre se niega a aceptar dinero poniendo la excusa de "No puedo dejar que usted maestro lo pague todo", efectivamente no lo paguare todo pero que al menos me deje ayudar.

Pasarón las horas y por fin el último cliente se fue, de tanto esperar ya me empezaba a dar sueño, pero me lo tuve que contener, un nuevo enemigo no se toma a la ligera.

- Bueno, ¿Comenzamos? - le pregunte al viejo levantándome y estirandome

- Por supuesto, sigame amo - dijo girandose hacia la pared

El abuelo camino fuera del mostrador hacia un mueble con varios vinos y licores de los cuales no distingo, extendió su brazo y saco una botella de color azul con una etiqueta de color blanco y letras en dorado, "Fabulous" decia la etiqueta. En el espacio donde estaba la botella había un botón rojo, el abuelo lo presionó y luego volvió a meter la botella, el mueble se recorrió unos pocos metros a la izquierda dejando ver un pasillo oscuro, entramos en el.

- ¿Como se llama el nuevo? - pregunte rompiendo el silencio

- Su nombre es Hakuba Saguru, es conocido como el mejor detective de la ciudad de París - explico Jii

- ¿Paris? - pregunte dudoso

- Si, le gusta salir de viajes a distintos países para probar a los ladrones y asesinos de estas - me parecio raro eso - Su próxima presa es el ladrón fantasma Kaito Kid, quiere ver quien es más astuto - termino

- Bueno, los dos sabemos que nadie me ha atrapado - intente alardear

- Si, pero este detective es especial, el lee los antecedentes de los ladrones y luego los busca en su propia base de datos, una vez tiene sospechosos se acerca a ellos sin que se den cuenta y los atrapa en el acto - se notaba que el viejo estaba nervioso

- Ya tranquilo, podre ser el mejor pero tendré cuidado - puse mi mano en su hombro para tranquilizar lo

- Esta bien - dijo aclarando su garganta - Sigamos - continuo recto por el pasillo

Llegamos a una habitación oscura con una mesa cuadrada y dos sillas en medio, unas pantallas con un teclado y una silla enfrente, la habitación estaba iluminada por luces blancas en las cuatro esquinas, este es el centro de trabajo de Jii.

- Buscare información del detective, usted joven necesita hacerle mantenimiento a sus equipos - me dijo el viejo

- Esta bien, si tienes problemas me avisas - le dije sentandome en la mesa

El abuelo se volteo y se sentó enfrente del "computador" buscando en todos los sitios posibles todo acerca de este nuevo enemigo, yo por otro lado saque de mi mochila de la escuela una bolsa más pequeña de color azul marino, la vacíe sobre la mesa y de ella salieron varios de mis cotidianos y siempre funcionales accesorios de magia.

Las horas pasaron y Jii recolecto una gran cantidad de papeles con los datos del detective, siempre me sorprende con la cantidad de información que sabe este hombre.

Comenzamos a organizar todos los papeles, al final solo quedo una pequeña pila de hojas que el abuelo debía leer para darme los datos más relevantes, con la primera parte de la investigación concluida me despedí del viejo y me puse mi traje de Kid, ya era tarde como para tomar el tren.

Volé unos pocos minutos antes de darme cuenta de que eran ya las 10:47, mi sorpresa no era por la hora, sino porque aún había luz en la habitación de Aoko, es de mala educación espiar el cuarto de una dama, pero no creo que una miradita haga daño.

Aterrice cuidadosamente en el techo de su casa y camine despacio hacia la ventana, até una cuerda al techo y la use a modo de apoyo para ponerme a la altura del vidrio, este estaba entre abierto. Mire cautelosamente y me sorprendí de ver a dos chicas totalmente agotadas descansando, una tirada en el suelo en medio de varias almohadas y la otra apenas con una pierna sobre la cama, el resto de ella estaba boca arriba tirada en el suelo, esta era Aoko.

- Tuvieron una buena fiesta aquí - hable bajo entrando por la conveniente mente abierta ventana

A Kaito le encantaría dejarlas así, tomarles varias fotos y compartirlas con los compañeros de la escuela, pero ahora tengo puesto el traje de Kid, por lo que debo ayudarlas, no sin antes tomar múltiples fotos en múltiples ángulos.

Una vez terminado el show, cogí a Aoko en brazos y la cargue cual princesa para acomodarla bien en su cama, le robe a Keiko una almohada que tenia en su pie y se la puse a Aoko, la cobije un poco con una cobija de varios dibujitos de frutas en ella. Ahora debía acomodar a la otra.

Alcanze a ver un futón en la esquina de la cama, junto con la mochila que yo sabia que es de Keiko, hize espacio al lado de la cama y abrí el futón, era blanco por fuera, dentro tenia un tierno estampado de plátanos, con mucho cuidado levante a Keiko y la deje encima del futón, se movía demasiado así que solo pude tirarle una cobija encima y darle uno de los muchos peluches del piso para abrazar.

- Descansa niña traviesa - dije dirigiendo me hacia Keiko - Tu también mi dama - volte a ver a Aoko con una sonrisa y salí de la habitación no sin antes apagar la luz

Debieron de tener una gran pelea de almohadas o algo, el cuarto era un campo minado de cobijas y peluches, Keiko acaparo todas las almohadas. Mejor me duermo también, mañana tengo que venir a despertar a Aoko para que me de mi desayuno.

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Hola a todos,
"Fiesta de pijamas",
bueno... mas o menos

Primero una disculpa por publicar hoy, es que mi teléfono esta un poquito mal y no le está sirviendo el Internet, así que tuve que transcribir todo el capitulo a la computadora ya que no lo tenía guardado.
TnT

Llevare a arreglar mi teléfono, pero no se cuando quede bien así que por ahora les dejo un capítulo un poco largo.
( * ^ *)

Bueno, yo me despido, actualizaré lo más pronto posible
TwT

El Mago del AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora