Capítulo 60: Familia Adinerada

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Narra Aoko

Estoy muy preocupada, hace ya una semana desde que hice mi exitosa presentación, pero Kid no me ah venido a ver, estaba algo preocupada por no verlo ni oír de el, así que le pregunte a Chikage si sabía algo de el.

Ella tampoco lo había visto desde el día del robo, tampoco Jody ni Anne sabían que le había pasado, también me hablaron de algunas cosas que no me había dado cuenta en el robo, me sorprendió el saber que Kid fue ese guardia tan difícil de vencer, eso explicaba muchas cosas, pero volviendo al tema, me alarme al escuchar que ninguno sabía donde estaba Kid, por lo que decidí ir a buscar a la persona menos indicada para ayudarme.

[UNAS HORAS DESPUÉS]

No estoy segura de si esta es la mejor de las ideas pero no me queda de otra. Me acerqué con temor a la puerta de la gran mansión y una vez estaba frente a la enorme reja, toque el timbre a un lado de esta y una pequeña cámara salió de arriba de este.

- ¿Quién es? - pregunto la voz de un viejo hombre desde la cámara

- Este... hola, buenas tardes - hable nerviosa por la cámara - Mi nombre es Aoko Nakamori, ¿Esta Akako en casa? - hable tímida

- Mmm, ¿De donde la conoce? - pregunto la voz algo molesta creo

- Soy una compañera de la escuela - respondí tranquila

- Espere aquí... - hablo la voz antes de que la cámara entrará de nuevo en la pared y me volviera a quedar sola

Espere unos pocos minutos hasta que las enormes puertas de metal se comenzaron a abrir, y la voz del viejo en el timbre volvió a sonar.

- La señorita Koizumi la recibirá en un momento, por favor entre - hablo amable el viejo en la radio

Levante una pequeña caja que traía con migo del suelo y camine hacia adentro de las puertas, justo cuando pase por ellas, estas se empezaron a cerrar, dejándome encerrada entra un largo tramo de jardín, que llevaba hasta la interpretó es la mansión de Akako.

Camine hasta la puerta y volví a tocar el timbre, ¿Quien quiere dos timbres en su casa?, no tube que esperar casi nada, ya que una sirvienta llegó a la puerta y me abrió, recibiendo me calidamente.

- Buenos días, bienvenida a la residencia Koizumi, ¿Puedo ayudarla en algo? - hablo feliz y sonriente la mujer de apariencia joven, poco más grande que yo

- Este, hola, mi nombre es Aoko Nakamori, estoy buscando a Akako - hable algo extrañada, el viejo de la radio y la sirvienta parecían ser opuestos, y eso que casi no hable con el viejo

- Es un gusto Aoko, mi nombre es Nyoko Koizumi, pero puedes llamarme sólo Nyoko - hablo feliz la mujer

- Qué lindo nombre - se me salio sin querer

- Gracias, pasa querida, iré a buscar a Akako - contestó sonriente dándome el paso

Cuando metí un pie en la casa me quede pálida, sabía que Akako era rica por sus padres, pero esto era ridículo, el resividor era una mismisima sala de exhibición de un museo, y las escaleras eran tan grandes como para que un auto subiera y bajará por ambos lados de estas, ¡Ambos lados!, Nyoko no tardó en dar se cuenta de mi sorpresa, ella solo río, luego de unos minutos de apreciar el resividor, Nyoko me dirigió a lo que ella dijo era la sala de espera, lo cual era solo una sala de toda la vida, pero con los sillones y adornos más bonitos que se pudieran imaginar, todo era mas blanco que las hojas de mis cuadernos, tanto que hasta mareaba.

- Puedes sentarte, iré a avisarle a Akako que tiene visita - hablo amable Nyoko

- ¿Cómo?, ¿Qué ella no me dejo pasar? - pregunté extrañada

- No Aoko - río un poco - Julio fue el que te dejo pasar, el es por así decir el mayordomo principal de Akako - me explico Nyoko

- Ah, bueno gracias por explicarme eso - le contesté

- Con permiso, iré a buscar a Akako - dijo cortez dejándome en la extensa sala de espera

Me dio tiempo para contemplar toda la habitación, había muchas cosas que en la vida podré pagar con lo que gana papá, había televisiones colgadas encima de un hermosa chimenea de color negro con blanco, los sillones parecían de piel, pero una vez te sentaba estos eran lo más suaves posibles, además de que había hermosos cuadros por todos lados, no pude evitarlo y termine acostándome en el sillón, parecía estar en una nube.

- ¿Estas cómoda? - hablo la voz de Akako detrás mío

Salte del sillón tirando dos cojines con la acción, ¿Cuando llegó?, si cuando Nyoko se iba escuche el eco de sus pasos.

- Akako, este... lo siento, digo... ¿Qué tal? - hable nerviosa levantando los cojines

- Qué tal querida, no te preocupes por los cojines, de todas maneras iba a cambiar ese sillón - hablo con su clásico tono de presumida

- Bueno este... - tartamudee

- Sólo dímelo y ya, no vine a perder mi tiempo con una chica que no sabe lo que quiere - Se burló dándome la espalda

- Espera, necesito pedirte un favor - llame su atención

Akako giro levemente su cabeza, para después hacer una señal con la mano y que su mayordomo nos dejará solas.

- Dime de que se trata - hablo con un tono tranquilo, creo

- Quiero que me ayudes a encontrar a una persona - ha le llendo al punto

- ¿Y se puede saber de quien estamos hablando? - pregunto aún de espaldas

- Quiero que encuentres donde esta Kaito Kid - dije firme

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Hola
TwT

Chan, chan, chaaan...
Suspenso...

Primero que nada perdón por por el suspenso, pero creo que hacía falta un poco, y segundo, el capítulo lo publique hoy porque regresare antes de lo que pensé a clases, así que volvemos al horario normal.

Bueno, solo eso, así que hasta la próxima
TuT

El Mago del AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora