Haters

Anabel

Empecé a desesperezarme, oí la cama moverse y me desperté de golpe.

- ¡Au! Oye cuidado.

- ¿Qué? Nelly. . .

- Hola genio, no tienes el sueño ligero ¿no? Llevo tratando de despertarte hace media hora.

- No, digo sí. Lo siento aún sigo medio dormido.

- Bueno, levanta ya, que ya te preparé el amuerzo.

- ¿Cómo? - dije incrédulo. Esto no estaba pasando ¿o sí?

- Jajaja, vamos James tenía que agradecerte de alguna forma y ya que tenía hambre - se encogió de hombros- vamos levanta. 

- Nelly no tenías que hacerlo.

- Vamos James, déjate hacer y levanta. ¡Vamos levanta! - seguía sin moverme porque la impresión no me dejaba. Ella se me acercó y empezó a hacerme cosquillas. 

- ¡No! ¡Basta! - decía sin dejar de reirme - ¡Basta Nelly! 

- Levántate entonces pendejo. - me quitó las sábanas y salí riendo de la cama. La seguí hasta la cocina y me senté cuando ella me lo indicó con la mano. - Solo son milanesas con papas fritas y sé que de seguro haces ejercicio y esto no está en tu dieta, pero bueno es lo que hay.

- Nelly en serio no tenías que hacerlo , pero - dije viendo que abría su bocota para replicarme - te lo agradezco mucho, de verdad. 

- Bueno, está caliente, sírvete. 

- Ok, vamos a probar esto.- Ella asintió, demonios estaba bueno. Las papas crocantes y las milanesas deliciosas. ¡Que la dieta del gimnasio se vaya a la remierda! - Joder está muy rico, gracias.

- Es lo menos que podía hacer ¿no? - me sonrió levemente. Tan pronto como comí el primer bocado no pude dejar de comer. Estaba bastante bueno. 

- Bueno, creo que es el momento perfecto para hablar ¿no crees? - dijo cuando terminó de comer.

- ¿Por qué lo dices?

- Bueno, ustedes se apaciguan cuando están bien comidos y ya que dices que está rico, supongo que estás calmado ahora.

- Bueno bueno, lo siento por como me enojé. Pero tú solo no me dejas  . . .

- James, estoy tratando. - dijo mirando su plato - Vamos lanza tu primera pregunta.

- Bueno, emm no sé por donde comenzar.

- Trata.

- Nelly, ¿cuántos años tienes de verdad? - ella rompió a reir. No quería presionarla, quería que fuera una conversación más que un interrogatorio.

- ¿Es en serio? - asentí.- Dieciocho, los cumplí hace un mes.

- ¿Qué día?

- Agosto, 17.

- Oh, y bueno iba a preguntarte cuál era tu color favorito pero supongo que es el negro ¿cierto?

- Sí, y el azul. Son mis favoritos.

 - Ya. ¿Nombre completo?

- Oh, esa es buena. - me miró a los ojos y luego desvió su mirada y al fin la agachó-  Anabella Clourese Adams - dijo suspirando. 

- ¿Anabella? - dije dudoso. Wow, creí que Nelly era su nombre de pila.

- Bueno prefiero Nelly, es más corto. Y mis padres me decian Anabella...

- Podría decirte Anabel. - dije sin filtrar mis pensamientos.

- Suena bonito, pero por favor no.