SKUAD - THE NOVEL [T1 y T2]

Temporada 1 - IX. "La Terrible Noche"

Una lágrima cayó de la mejilla de Tarifa. Rodeando su mejilla. La mesa se quedó callada en ese momento. Con el pelo descolocado aún me atreví a mirar con rabia a Logan por volver de aquella manera.
Tarifa se levantó tirando la silla en la que estaba sentado. En ese momento la incomodidad pasó a ser terror por qué podría pasar. Me levanté para intentar calmarles pero no hice nada. Fui un simple objeto de distracción en el foco del problema. Logan se quedó callado y intentando buscar una forma en la que excusarse.
-No es lo que más me duele. Lo que más me duele es que pude confiar en ti. - Dijo mirando hacia su novia. La novia se levantó encarecidamente buscando una razón. - Lo que más me duele es que creí confiar en todos vosotros. - En ese momento metió la mano en el bolsillo y para nuestra sorpresa sacó un anillo que tenía guardado. La novia se quedó paralizada como todos los demás en el momento que el anillo rodó por el plato de la cena. Por poco no se manchó de ketchup.
Tarifa empujó a Logan con cierto odio malsano y subió hasta su habitación dónde se encerró haciendo la maleta. Todos se quedaron murmurando sobre lo sucedido. Logan lo había jodido todo. Subí hasta la habitación de Tarifa y le vi llorando sobre la maleta. Me acerqué hasta él y le consolé lo que pude.
Tarifa oficialmente nos iba a abandonar. Iba a abandonar el skuad. Por culpa de un incidente estrepitoso. Cerré con pestillo y me acerqué hasta él mientras hacía la maleta. Con mis dedos amansé la impotencia que caía por las lágrimas de Tarifa. Y con mis labios le pude decir que encontraría alguien mejor. Y que tampoco sería yo.
Me levanté y caminé hasta abajo para dar la noticia de que Tarifa se iba. La novia no paraba de llorar. Logan no se acercaba a ella tampoco. Salva sin embargo si. Ayudandola a dejar de llorar poco a poco. Mis ojos se clavaron en Víctor que estaba sorprendido por aquel caos.
Me senté en mi habitación para ir a dormir cuando me dio curiosidad que estaría ocurriendo en la habitación de Víctor y su novia y que estarían cotilleando sobre el incidente de la cena. Así que con el pijama me acerqué hasta su puerta y puse la oreja cómodamente en la puerta. Nunca debí hacerlo.Nunca debí hacerlo.

Por que descubrí que Laura sabía que había estado con él en el baño por haberle arañado la espalda. Y que no me llevaría nada bueno.