𝙳𝚎𝚜𝚌𝚘𝚗𝚘𝚌𝚒𝚍𝚘𝚜 ⌫

❤TRECE❤

Entre en mi habitación y tire todo encima de la cama. Nada más entrar Suga se puso de pie y se acerco a mí.

- ¿Qué ocurre? - Me dijo intentando mirarme, pero yo no dejaba de caminar de un lado a otro.

- Mira lo que me hicieron - Le dije a punto de llorar, señalando mi pelo.

Suga me agarró y me pego a él.
Para a continuación abrazarme, y comenzar a acariciar mi espalda.

- Ya esta - Me dijo intentando que así me relajara.

- No - Dije llorando.

- ¿Quieres ir al centro comercial? Así compramos un tinte rosa y acabamos de teñir todo tu pelo - Me dijo mientras me separaba de él, para que así le mirara.

Asentí mientras agarraba las llaves de la habitación. Suga agarró las suyas también, se puso unos zapatos. Y salimos de la habitación.

Mientras caminabamos por el pasillo vi a Tae de lejos, hablando con sus amigos.

- No - Agarre a Suga por su muñeca, para que dejara de caminar.

- ¿Qué? - Me pregunto Suga, él aún no había visto a Tae.

- Esta Tae - Tire de su brazo y nos escondimos detrás de una pared.

- ¿No quieres que te vea? - Me miro a los ojos y me pregunto.

- ¿Tú que crees? - Le mire y señale mi pelo.

- Tampoco esta tan mal, yo lo veo bien - Me dijo mientras miraba mi pelo por encima.

- Es que me da vergüenza verle - Le confesé.

- ¿Por? - Me pregunto preocupado.

- Me a-acoste con é-él - Agache mi cabeza, la verdad me daba vergüenza decirle a Suga lo que hice.

- ¿Ya no eres virgen? - Levante mi mirada y comencé a mirarle.

- No - Le dije.

Suga me agarro de mi brazo y tiro de mí.
Comenzo a llevarme con Tae. Cuando nos estabamos acercando Tae nos miró. Su cara cambio al momento de verme el pelo. Se aparto de sus amigos y vino junto a mí.

- ¿Qué te paso en el pelo? - Me pregunto.

- Las chicas del baño me tiraron un tinte rosa en el pelo - Le dije.

- ¿Como eran? - Me pregunto, seguramente ya sabía quién había sido.

- Eran tres, una rubia... Una de pelo castaño y la otra pelirroja - Le dije.

- Vamos ahora mismo a verlas - Me dijo Tae agarrando mi mano.

- No, voy a ir con Suga al centro comercial - Le dije mientras impedía irme con él, y miraba a Suga.

- Pues vale, vamos - Me dijo Tae.

- No... Quiero ir solo con Suga - En el momento en que dije eso, Tae me miro seriamente. Mientras que Suga me miraba sorprendido.

- Vale - Tae soltó mi mano y dejo que me fuera con Suga.

Salimos del edificio donde estaban las habitaciones y Suga comenzó a reírse.

- ¿Qué ocurre? - Me mire.

- Tae se asustó - Me dijo.

- No entiendo por que, la verdad - Le dije a Suga.

- Su ex-novia le dijo una vez lo mismo, y fue porque se iba a acostar conmigo - Me confeso Suga.

- ¿Dejaste que le pusieran los cuernos a Tae? - Me puse delante de él y le mire a los ojos - me acabas de desilusionar como persona Suga - Le dije.

- ¿Ya te habías ilusionado conmigo? - Me miro a los ojos e hizo una de sus caras coquetas.

- N-no - Dije nerviosa.

- Vamos anda - Paso su brazo por encima de mis hombros y comenzamos a caminar.

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Ya una vez en el centro comercial, estabamos en una tienda especializada en peluquería.
Suga estaba mirando cremas para cabello, y yo mientras mirando los tintes. Agarre dos botes y me acerque a Suga.

- ¿Qué te parecen estos dos? - Le enseñe los tipos de rosa que había agarrado.

- Están bien - Me dijo, aún sin mirarme.

- Suga... ¿Podrías al menos mirarme? - Le golpee en el hombro para que así me hiciera caso.

- Es que no se que aroma agarrar, mira esta crema huele a vainilla y esta a papaya - Me dijo mientras me enseñaba las cremas.

- A mí me gusta la vainilla - Le dije.

- Pues entonces vainilla - Dejo el bote de crema con aroma a papaya a un lado y comenzó a mirar mis tintes.

- Este - Señaló un tono pastel.

- Vale, pues este - Deje el otro y nos dirigimos a el mostrador donde debíamos pagar lo que estabamos comprando.

- Hola - Suga saludo a la cajera y ella le sonrió.

- Hola - Respondí la cajera.

- Me llevare estas dos cosas - Suga le dejo los botes en el mostrador y ella comenzó a pasarlos por la caja.

- A mí me gusta más el de papaya - Miro a Suga, refiriéndose a que debería haber cogido el de papaya.

- Me alegro, pero es que a mi novia le gusta el de vainilla - Le respondió él.

Suga después de eso me señalo, y la cajera me miro seriamente.

- Ahora como tengo novia, no quieres seguir ligando conmigo ¿verdad? - Suga miro a la cajera a los ojos, agarro la bolsa y se fue.

- ¿Porque digiste que soy tú novia? - Le pregunte.

- Para que me dejara en paz - Agarró mi mano y comenzamos a caminar.

Hasta el siguiente
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