Preludio - parte 4 de 5

3K 141 62
                                    


Comenzaba otro nuevo día en el pueblo de Ponyville el cual lucia muy tranquilo... de hecho demasiado, las caras de los pobladores no mostraban esa alegría desbordante que siempre tenían, los únicos que mantenían esa sonrisa eran los niños ponis que jugaban sin preocupación alguna.

Nos vamos a una tienda de postres mejor conocida como Sugar Cube Corner donde se encontraba una chica de pelo esponjoso color rosado atendiendo a unos clientes.

―Muchas gracias y vuelvan pronto ― dijo con una gran sonrisa, despidiéndose de los clientes.

Una vez la tienda estuvo vacía, el pelo esponjoso de la chica se volvió lacio y adquirió una coloración mas grisácea.

―Cuatro meses― musito tristemente Pinkie Pie.

Ya habían pasado cuatro meses desde la desaparición del dragón y también de lo sucedido en la boda. La alegría tan característica en ella había disminuido después de todo lo que paso pero supo sobrellevarlo, fingiendo una sonrisa para todos sus conocidos, claro que dicha sonrisa no pasaba desapercibida por sus amigas.

''¡Se preocuparon mas por su felicidad que por él!''

Esas palabras... le dolían en lo más profundo de su ser, se supone que su elemento era la risa, tenía la misión de alegrar a todos sus más allegados, pero falló al olvidarse del pequeño dragoncito, al cual ni siquiera invito a la vista del familiar de Lyra a pesar que él le ayudo. Ahora si es que volvía a aparecer Spike, ya no iba a asistir a ninguna de sus fiestas.

Tin!

El sonido de la campana indicaba que alguien había entrado por la puerta, lo más seguro es que fuera un cliente por lo que rápidamente cubrió su tristeza con aquella falsa sonrisa... no sabía cuanto podía durar con esa mascara.

.

―¡Wow Rainbow, superaste esta vez tu propia marca! ― grito alegre Scootaloo al ver como su ídolo aterrizaba luego de ejecutar tres veces seguidas la Reinplosion Sónica.

―No es suficiente ― dijo simplemente la chica de pelo arcoíris elevándose de nuevo unos metros del suelo.

*Vaya que esta muy motivada para que se esté esforzando tanto estos meses* ― pensó orgullosa la niña de pelo morado.

*Cuatro meses* ― pensó Rainbow Dash con el ceño fruncido preparándose para ejecutar su mejor movimiento.

Lejos de sentirse triste, la pegaso mas se sentía frustrada y enojada, durante estos meses trataba de aplacar esos sentimientos entrenando hasta llegar al límite, pero aun así no era suficiente.

''¡Ustedes lo abandonaron!''

Para ella que era el elemento de la lealtad, eso era como si lo huera traicionado, por eso se sentía frustrada, pero también enojada, en un principio con ella misma pero ahora ese enojo se había dirigido al dragón extraviado, ya que por su inmadurez de escapar de los problemas y no enfrentarlos o hablarlos, todas ellas estaban más que preocupadas... la más cercana a él había entrado en un cuadro de depresión preocupante.

―Idiota ― soltó Rainbow para luego lanzarse a hacer su Reinplosion Sónica.

Se había prometido a si misma que el día que apareciera el dragón, lo golpearía tan fuerte y le diría en su cara que el estado emocional de todas era por su culpa, antes que Celestia cumpliera lo que les había dicho ese día en la boda.

.

Una chica de lacio pelo rosado y alas amarillas se encontraba dándole de comer a los animales fuera de su casa, pero entonces unos leves golpes en sus rodillas llamaron su atención. Al voltear se encontró a su conejo Ángel reclamándole comida mientras sostenía su plato vacio.

Spike The HunterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora