28

11K 1.5K 701
                                    

Mes 2

Día 25 

*******

Comedor

10:23 AM

Harley suspiró mirando a Quill, esperaba que se quemara con el jodido café que tomaba, si eso sería lindo.

-¿Por qué me miras como si quisieras que me hiciera daño?

El menor negó.-No sé de qué hablas, Peter. Yo te estoy mirando como miro a todo el mundo, no eres especial.

-¿A todos los miras como si planearas su muerte?

-Puede ser. ¿Te gustaría más morir apuñalado o electrocutado? Puedes sugerir algo más. Soy todo oído.

Quill se rió.-No puedo creer que me trates así. ¿Qué te hice? Recuerdo que en estos días no he hecho nada malo, Harley, no entiendo tu actitud en estos momentos.

¿Qué no había hecho nada? Se la ha pasado escuchándolo sobre las chicas que entraran al reality, lo único que dice es que ya quiere conocerlas y... no, no está celoso, sólo que es molesto.

-No te lo diré si no sabes.

-Eres peor que cualquier novia que tuviera.

Harley bufó.-Lo lamento por ellas, soportarte a ti es difícil.

-¿No pueden estar sin pelear?-Sam se sentó en una de las tantas sillas de la mesa y tomó unas galletas.-Están peor que Loki y Thor, esos dos ya están calmados, pero quedan ustedes como reemplazo, genial.

-Yo no quiero pelear, es él que todo lo que hago para él es malo, nada de lo que haga está bien.-Quill bufó.-Harley, mejor ve lo que haces en tu vida y deja de criticar la mía, soy feliz en ella, pero tú... ¿Acaso eres feliz en la tuya?

Sam los miró a ambos, ahora maldecía haberse levantado temprano, hubiera sido mejor quedarse en su cómoda cama y no tener que ver esta pelea.

-La diferencia es que yo tengo que ver por la felicidad de mi madre, Peter, no importa lo infeliz que pueda ser mientras ella esté bien, no importa si mi vida se cae a pedazos.-Harley se levantó de la mesa dejándolos solos.

Sam suspiró.-Deberías intentar hablar con él, pero con calma y no empezar a maldecirse enseguida.

******

Habitación de Clint

11:14 AM

Clint abrió los ojos, su brazo se sentía dormido y eso era porque estaba debajo del cuerpo de Pietro, sus cuerpos estaban enredados entre sí y no le molestaba para nada.

Llevó su mano al rostro del menor, con su pulgar quitó un poco de baba que tenía en la comisura de su labio. Su vista recorrió toda la cara de Pietro, una leve sonrisa se formó en sus labios.

Llevaba conociéndolo dos meses y él sólo cada vez iba queriendo más al menor. Pietro era una persona maravillosa, él sólo no dudaba en decir lo que pensaba o en defender lo que apoyaba, además lo que más ama es ese amor que tiene hacia su hermana, sabe que él haría lo que fuera por Wanda.

Adora esa forma en que tiene de escucharlo cuando le cuenta historias sobre sus hijos o de la granja o de cualquier cosa, ellos simplemente pasarían horas escuchando al otro hablar.

El platinado se movió quedando más recostado en su pecho, lentamente sus ojos se fueron abriendo.-Hola.-Su voz sonaba adormilada.

-Hola, niño.

"Compartiendo Casa Con Desconocidos"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora