La Debilidad de la Llama.

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La Debilidad de la Llama.


" La vida es totalmente efímera. " Pasó página, con el único acompañamiento del total silencio en el aula. Con varios pares de ojos sobre ella y un grueso libro entre sus manos. " Y es curioso, como burdo a la vez, que algunas personas piensan en lo contrario cuando nuestra existencia misma, esta plagada de tanta basura, que si hemos vívido más de un año es un completo milagro. " La profesora de idiomas vio por un instante a cada uno de sus alumnos en silencio y cerró el libro que tenía sobre sus manos con lentitud.

" Nadie tiene la vida comprada. " Tragó lentamente saliva, mientras su mirada se centraba sobre él.

Un chico se cabellera larga carmín con puntas doradas, que estaba sentado en la parte trasera del aula, con un grueso libro entre sus brazos.

" Aunque, si nos dejamos vencer, ¿No seríamos egoístas por impedir que el mundo éste sin nuestra hermosa y por que no decirlo, encantadora belleza? " El timbre sonó y todo se volvió en una gruesa capa nubosa. Ñ

" Somos mundos únicos y diferentes. El no permitir que nadie nos corrompa, es nuestra misión principal en la vida. " Algunos murmullos resonaron en el aula, hasta que en un momento a otro, el silencio lo cubrió todo y el mundo se hacía borroso totalmente.

Abrió lentamente los ojos. Con un dolor agónico anidando sobre su cabeza, que golpeaba constantemente la zona de la frente como la nuca.

  - Por favor... Tengan cuidado... - Giró ligeramente su cabeza, cuando oyó la voz de un desconocido cerca suyo.

  - Tiene que portar esa mascarilla por lo menos una media hora. - Cerró los ojos lentamente para volverlos abrir y poder ver como tres personas se encontraban cerca de la entrada de la habitación, hablando.

  - Lo entendemos, Doctor. - Miró como su hermana asentía lentamente con el rostro serio y la mandíbula tensa.

Mientras veía de reojo, como la mirada confusa de su hermano mayor estaba posada sobre de ella.

  - Una enfermera vendrá en un rato, para quitarle la mascarilla de oxígeno. - Torció un poco los labios curioso.

" ¿Pero de qué mascarilla estaban hablando? " Se preguntó confundido el pelirrojo, antes de percatarse de una ligera presión sobre su rostro y una extraña corriente de aire, que golpeaba la zona de su nariz y boca.

   - Y por favor, chicos. No le digan nada que lo termine alterando. No es bueno para su salud experimentar emociones fuertes, en estos momentos. - Ambos jóvenes asintieron, mientras la mirada marrón de la menor regresaba hacia donde estaba el médico.

  - Perdone de nuevo. - Oyó la voz grave y nerviosa del poeta, sobresalir un poco sobre aquél ambiente tan tenso, que rodeaba a los presentes.

  - No se preocupen. Sé que no querían que esto sucediera. Fue un accidente. - Desordenó con cariño el cabello añil del menor. - Debo irme. A las 5 vendré a ver como sigue su amigo. - Comentó el mayor, caminando lentamente hacia la salida de aquella habitación de color blanco. 

" La visa esta llena de altas y bajas. " La profesora de valores se sentó en medio del círculo que había formado con los pupitres de sus alumnos.

" Nadie tiene el derecho de llevarnos al infierno, si no hay una respuesta a ello y que sea lo suficientemente válida. " Miró a todos sus alumnos, parados en la parte trasera de sus asientos.

La Llama y el Gato.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora