La pequeña Vongola

¿Donde esta Nami-chan?

Ya había amanecido el sol tenía un resplandeciente color que daba una caída sensación, un chico castaño se removió en su cama y al sentir que no había un bulto pequeño a lado de él dio un salto repentino sacando las sabanas de su cama para darse cuenta que la pequeña no estaba y lo peor su tutor espartano no lo despertó como acostumbraba ser estaba algo preocupado pero conocía a Reborn y pues Nami tal vez estaría desayunando como siempre se cambió de ropa y bajo a desayunar por alguna razón esta vez no se había tropezado con sus propios pies.

-Buenos días a todos -se hizo notar el castaño al entrar en la cocina donde su madre cocinaba grandes cantidades de comida, Bianchi la ayudaba a cortar verduras y los niños jugaban, pero faltaba una- eh ¿Dónde está Nami-chan? -esa pregunta llamo la atención de todos los adultos presentes.

-eh que Nami-chan no estaba dormida contigo Tsu-kun -sonó confundida la castaña mirando igual que la pequeña no estaba presente.

-¿Qué? No está conmigo pensé que había bajado.

-Sawada acaso has perdido a esa pequeña -hablo la de cabellos rosados mirando con el ceño fruncido al castaño.

-que no -hablo el castaño preocupándose más, pero no era el único.

-oh no ella es muy pequeña para estar por ahí -hablo la castaña que fue llevada por el escorpión venenoso hacia una silla para que se sentara.

-tranquila mama ella estará bien tal vez se fue a jugar con algún niño -hablo la peli rosada lanzándole una mirada furtiva al castaño- Sawada la encontrara ¿verdad?

-Etto yo...

-Tsu-kun eres un buen hijo no te esfuerces mucho buscando a Nami si -sonrió la castaña mirando a su hijo.

-si Okasa (acabo de aceptar y no sé qué hacer) -temblaba de lo nervioso que estaba, pero sintió un pesor en su cabeza.

-Si mama Dame-Tsuna buscara a Nanami -si era su tutor el que estaba encima de él sí que pesaba un poco más desde que la maldición fue retirada.

-Reborn -hablo el castaño- ¿Cómo quieres que haga eso?

-Dame-Tsuna -lo pateo en la cara dejándolo caer en el suelo- para eso están tus guardianes -sonrió- Reuniremos a tus guardianes.

Algo estaba mal y todos lo sabían esa niña con solo un grito los hizo quedarse estáticos sin poderse mover, aunque ellos quisieran no podían y lo peor había dejado inconsciente a ambos azabaches que habían dejado destruida aquella sala ahora estaban tirados sin conciencia ¿Quién o qué era esta niña? Es que de verdad acaso era una broma habían salido ya de su transe cuando vieron el espadachín acercarse a la niña.

-¡voiii que hiciste mocosa! -grito rompiendo los tímpanos de todos, pero sin poder hacer que los azabaches inconscientes salieran de su sueño.

-Y-yo lo siento -dejo ver sus lágrimas para abrazar al albino de cabellos largos.

-¡voiii ¿qué haces?! -grito sorprendido al ver lo repentino.

-shishishi parece que alguien tiene un problema -rio el rubio- ¿Dónde está esa rana aún no hemos terminado? -miro para todos lados encontrado sé con dos de cabello verde que se miraban con un rostro de asco.

-shushu eres un fantasma -hablo queriéndolo ahuyentarlo.

-shushu eres el monstruo del lago Ness -hizo lo mismo que el contrario ambos querían ahuyentar al otro.

-Jo estos niños son tan lindos, pero ¿qué haremos con el jefe y esa niña que aún no se despiertan?

-Matemos a esa mocosa por haber tocado al jefe y a sus amigos igual matémoslo -hablo el guardián del rayo acercándose a los niños.