MAKTUB CACHÉ

Sorpresa 2/2

Apenas entramos todos gritaron "Sorpresa" ella quedó estática, no comprendía que era lo que pasaba y por qué habían fotos suyas con todos los chicos alrededor del teatro. Todos corrieron a abrazarla y a darle detalles que cada uno le había preparado, la tomé de la cintura y la senté en la primera fila del teatro frente a una pantalla gigante. Miré a Sebas y acenti, el entendió la seña y empezó a reproducir el vídeo.

Narra Poché

En el vídeo que había editado para Calle, aparecían las fotos de cada uno de los compañeros de aula, aparecieron fotos de los mejores momentos compartidos durante este tiempo con ella, habían mensajes de cada uno, todos le deseaban lo mejor a la chica, cada uno le demostraba lo valiosa que era. Calle se encontraba llorando en silencio sin desviar su mirada de aquella pantalla, mientras tanto yo no despegaba mi mirada de la chica, analicé cada una de sus expresiones intentando leerla, observé con sumo detalle cada parte de su perfecto perfil, sus cejas bien contorneadas, sus pestañas largas, su nariz perfecta, finalizando mi recorrido  en sus labios carnosos y rojizos, detuve mi mirada en aquella parte recordando su sabor y lo suaves que son e inconscientemente mordí mi labio inferior.

No puedo creer aún que haya besado a  semejante mujer ¡besé a mi amiga y tengo novio! Joder, todo es muy confuso, todo es muy complicado... no debiste seguir ese beso Poché... Pero es que ella es tan hermosa, tan frágil pero a la vez tan fuerte, es delicada y amorosa, es perfecta... ella merece el cielo ¿Por qué la vida me la quita cuando más la siento cerca? Sé que después de que se vaya nuestra amistad terminará deteriorándose. Todo ha pasado tan rápido que ni siquiera he podido aceptar el hecho de que la perderé.
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Después de observar el vídeo, Johann cantó dos canciones de amistad, una de Laura Pausini y la otra de Enanitos Verdes, con eso logró poner a todos muy sentimentales. Después hicieron un compartir y cada uno se despidió de Calle.
Los chicos quedaron en reunirse en la tarde en casa de Calle para despedirla formalmente ya que en el instituto la habían acaparado los demás.

Narra Poché
Estábamos sentados en diferentes partes  de la habitación de Calle, Sebas nos hacía reír con todas sus ocurrencias, luego Kim puso música y empezó a bailar retando a Mario al finalizar sus pasos, Mario era un poco tieso pero le siguió el juego sin problema alguno, hizo unos pasos y me señaló para indicar que me retaba a mí, me paré y le seguí el ritmo a la canción, mis movimientos eran fuertes y los chicos solo me alentaban a seguir, cuando me cansé le extendí la mano a Calle quien estaba sentada en el sillón de su habitación, la chica no dudó en tomar mi mano y se paró a bailar pero no me dejó sentar, me bailó muy cerca sin importar que los demás estuvieran ahí, aunque no me tocara el solo hecho de tenerla en frente bailando de esa manera hacía que mi respiración se agitara, se movía súper bien, sus movimientos eran limpios y rítmicos, pareciera que ya tenía la coreografía preparada, por un momento solo éramos las dos en aquella habitación, quería tocarla, quería tenerla cerca, hasta que escuché que me llamaban
- Poché, te toca a ti ¿O acaso te dejarás ganar de Calle?- preguntó Pau, mientras yo intentaba comprender que era lo que pasaba, pues mis pensamientos estaban sumidos en aquella chica.
- Es que díganme ¿quién puede ganarle con esos movimientos? Yo me rindo- solté mirando fijamente a Calle, mientras ella se ruborizaba.
- Señoras y señores, tenemos una ganadora, un fuerte aplauso para la señorita Calle- gritó Sebas con tono de presentador y levantando la mano de la chica mencionada. Después de eso, todos aplaudimos.

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- Amor ¿Estás bien?- me preguntó Mario abrazándome por detrás. Yo me encontraba en el balcón, mirando al cielo. Mis pensamientos estaban en mi papi, en Daniela, en lo que había pasado con ella y en lo que me hacía sentir, pensaba también en mi relación con Mario, a pesar de que él era tan especial sabía que no estaba enamorada y me dolía no poder quererlo como él a mí.
- Sí, todo bien- dije sin nisiquiera darle la cara. Él besó mi cuello y me volteo para quedar frente a frente y luego besar mis labios.
- Bueno princesa, yo venía a despedirme, ya está tarde y mañana madrugo.
- Vale cariño, cuídate mucho y que te vaya súper- sonreí y le di un pico. El solo le observó y después de un largo rato comenzó a hablar...
- Poché ¿Ni siquiera vas a ser capaz de preguntarme que tengo que hacer mañana temprano? ... Que estúpido soy, esa no es la pregunta... Lo que quiero saber es si en realidad te importa un poco lo que pase conmigo, últimamente estás más distante, intento entenderte, intento darte tu espacio pero cada vez te siento más lejos, siento que lucho solo por mantener esta relación.- se quedó en silencio por un momento demostrando desilusión en su cara, tomó aire- sabes que no tienes que decir nada, mejor me voy, hasta mañana Poché.- besó mi frente y se retiró, estas eran nuestras típicas peleas, yo prefería quedarme callada, sabía que si hablaba terminaría lastimandolo y creo que él lo sospechaba porque nunca me presionaba a decir algo.

Después de aquella situación decidí entrar a la casa para seguir compartiendo con los chicos. Nos quedaríamos todos a dormir esa noche, haríamos una pijamada para poder acompañar a Calle al aereopuerto y despedirla, quería hablar a solas con ella pero siempre estaba rodeada de gente, era normal, a todos nos afectaba de cierta manera su partida. Nos quedamos dormidos como a la 1am y ella tenía que estar allá a las 6am.
Después de llegar al aeropuerto y hacer sus pendientes normales para abordar el avión con su padre ella se despidió de cada uno de los presentes. Solo faltabamos su madre y yo.
Se acercó a mí, nos miramos a los ojos, no sé por cuánto tiempo, me sonrió y me abrazó fuerte, fue uno de esos abrazos que no quieres que terminen, sentía la calidez de su cuerpo, sentía su corazón palpitar, mi cara quedó undida en su cuello y desde esa posición pude satisfacer mi sentido olfativo, su aroma se impregnó en cada parte de mi ser y mi cuerpo se tensó ante aquella situación, pude notar que ella también se erizo al sentir como inhalaba cerca de cuello, me dió un beso en la frente y  acercó su boca a mi oído...
- Eres única, jamás olvidaré lo vivido contigo, estos últimos días han sido buenos gracias a ti. Espero que el destino nos vuelva a juntar.- al terminar de hablar me abrazó más fuerte y puso su frente en mi hombro, me di cuenta que había empezado a llorar porque sentía como caían sus lágrimas a mi piel, ya que tenía mis hombros descubiertos.
- Y tú eres perfecta, no sé que nos depare el destino, pero no pienso dejarte. Cuídate Daniela Calle.- dije sin dejar de llorar, era imposible ser fuerte con esta chica y más en estos momentos. Nos separamos y me empine para darle un beso en la frente, gesto que hizo hacerla sonreír, por fin pude volver a ver aquella sonrisa perfecta que en mi opinión era la más hermosa que había visto.
Me guiñó un ojo y procedió a despedirse de su madre, mientras lo hacía anunciaban el último llamado para abordar. Su madre se veía destruida, era la primera vez que se separaban y les estaba costando mucho. Daniela se separó e inmediatamente se fue sin mirar atrás, al cruzar la puerta su madre se desplomó y todos corrimos a ayudarla.