Oscuridad, astros, luz

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Yo soy todavía mortal,
divagando en el plano astral,
pensando en lo desconcido
de mi pensamiento perdido.

Somos polvo de estrellas,
hijos de una fantasía bella,
más allá de la luz que nos calienta
en una infinidad eterna.

Navego en mares negros
allá arriba
donde nada parece real
y sin vida.

Somos versos del poema del universo,
que nos ofreció su paraíso secreto
con la condición de la mortalidad,
la seguridad de un final.

Aún siendo mortales,
seguimos siendo arte,
con astros en el cuerpo
y materia oscura en la mente.

Vivos en lo desconocido,
curiosos por lo secreto,
fascinados por nuestro propio brillo,
ocultos en un rincón bello.

Laberintos por dentroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora