Los días habían transcurrido con tranquilidad. Ya le habían sacado los puntos a Blas y se encontraba en perfectas condiciones de salud.
Junior se preparaba ansioso ya que el día del famoso almuerzo en la casa de los padres de Blas había llegado.
-¿Estás seguro de que está campera y esta remera quedan bien? -
-Amor te cambiaste como 3 veces ya. Vamos a llegar tarde-
-Pero es importante Blas , es la primera vez que voy a tu casa, no quiero verme feo-
-Estás hermoso. Tranquilo- dijo el mayor apoyando sus manos sobre su pecho y dándole un corto beso
-Estoy nervioso-
-¿Qué decís? si mi vieja te adora. La última vez que hable con ella me dijo: más vale que cuides a mi nene Blas Martín-
-Jaja en serio?-
-Si, ya te quiere más a vos que a mí me parece-
-Que exagerado! Pero ¿y tu papá?-
-Mi viejo es tranquilo, no es el tipo más cálido del mundo, pero ya viste que tiene buen humor así que tranca-
-¿Y tus hermanas? Anita hoy tenía algo con la familia del novio, otro día la vas a conocer. Y Lucía...bueno Luci es lo más dulce que hay-
-Bueno...Me quedo más tranquilo, che ya cargaste el bolso en tu auto?-
-Si ya tenemos todo listo-
- Osea que...cuando terminemos el almuerzo, vamos a nuestra casa no?- dijo el menor mirándolo sugerente
-Si bebé- dijo el mayor tomándolo de la cintura
-Feriado puente- dijeron los dos al unisono. Se dieron un beso y entre risas, salieron del cuarto tomados de la mano.
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Blas y Junior bajaron del auto, el menor cargaba en sus manos la tarta de manzana que le había prometido a su suegra.
Blas tocó el timbre y miró su novio
-Estás bien Junior?-
-Si yo bien. ¿Y vos? Te ves un poco serio-
-Es que me acabo de dar cuenta que es la primera vez que traigo a alguien formal a casa-
-Me estás jodiendo ? Estaba tranquilo y ahora me pusiste nervioso- dijo el menor golpeando delicadamente con su puño el brazo de Blas
-Perdón es que me gusta que seas vos, es lo que siempre quise- dijo el mayor metiendo sus manos en los bolsillos un poco avergonzado
-Aww sos un lindo- dijo el menor acercándose y dándole pequeños besos sin advertir que la puerta se abría
-Nora! llegaron los chicos! Les tiro un balde de agua fría y te los mando para la cocina.- dijo una voz masculina
-Viejo! Eh Hola-
-Hola Coqui, ya te veo recuperado- dijo Martín dándole una fuerte palmada en el brazo
-Si estoy 10 puntos-
-Se ve que te cuidaron bien- dijo tosiendo falsamente y mirando al menor
Junior estaba rojo de la vergüenza
-Hola Junior- lo saludó el hombre
-Hola- dijo el menor haciendo un gesto con la cabeza
Martín los invitó a pasar y al instante la madre de Blas apareció usando un delantal.
-Mis amores - corrió Nora a su encuentro envolviendo a los dos en un caluroso abrazo
-Ma... mamá estás aplastando la tarta de manzana- se quejó Blas
