Junior se prendía los últimos botones de su uniforme negro frente al espejo. El reflejo lo mostraba sonriente, con sus hoyuelos más marcados que nunca . La puerta del baño del bar se abrió de golpe sacándolo de sus pensamientos.
-¿Ya está listo chef? - preguntó Blas asomando la cabeza por la puerta. Su sonrisa era casi más grande que la de Junior.
-Vení...-pidió el menor
El bartender se paró detrás y apoyó su mentón en el hombro del menor, envolviendo su cintura con sus manos.
Se miraron por unos minutos a través del espejo hasta que el joven de rulos habló.
-¿Y? ¿Cómo estamos?-
-Nervioso- contestó Junior
-Va a salir todo bien- susurró con voz tranquila el bartender dejando un pequeño beso cerca del cuello del menor
Junior cerró los ojos y luego se volteó para abrazar a Blas de frente. El mayor lo envolvió con un brazo y con su otra mano libre le hizo unos leves masajes en la nuca, sabía que eso siempre lo calmaba.
-Bueno...- dijo Junior incorporándose para mirarlo - dame un beso y vamos. Ya estoy listo-
-Así me gusta- dijo el mayor juntando sus labios para luego salir de su mano.
************************************
Junior picaba y rebanaba verduras con gran velocidad. Flor, su amiga del curso de gastronomía, sacaba del horno una fuente con varios moldes.
-Ya estamos chef- dijo la joven que había ido a ayudarlo por el día.
Después de varias ideas y varias charlas con su hermano, el menor se había decidido por un menú más clásico semanal, y un solo día de menú especial dado que era lo que los costos les permitía.
Dante había dado el ok, pero ahora estaba ante la prueba de fuego, quería que todo salga perfecto y que los clientes se fueran satisfechos.
-Dejame ver- dijo el menor tomando la bandeja con un paño para revisar los moldes
-Amor tengo dos pedidos más - dijo Blas entrando a la cocina con dos papelitos
-Dáselos a Flor- contestó Junior sin mirarlo mientras con cuidado desmoldaba unos de los mil hojas de papa.
Blas entregó los papeles a la joven y se quedó mirando lo que Junior hacía. El menor llevaba una bandana negra en la cabeza, seguramente para evitar que alguno de sus cortos cabellos caigan en la comida. Se veía hermoso, con el ceño fruncido buscando prolijidad en cada detalle. Cortó un par de hojitas de perejil y decoró los platos a medida que servía. Luego saco otra fuente con la carne, que depositó en una tabla y cortó en rodajas semi gruesas. Sirvió 3 en cada plato junto al mil hojas, y tomó una fuente con salsa de mostaza para servirla sobre la carne.
-Blas vení llévate esto para la 9 - dijo mientras limpiaba los excedentes de salsa con un paño blanco
-Que concentrado que está señor chef- dijo el bartender parándose a su lado
-Callate tonto- sonrió el menor mientras le entregaba los platos
Blas le devolvió el gesto, y salió por la doble puerta llevando la comida.
************************************
Entrada y plato principal habían sido un éxito, por lo que solo restaba despachar los postres.
-Flor y el pote de helado? - preguntó el menor mientras terminaba de servir sobre los platos varios brownies de chocolate perfectamente cortados.
-Uy me olvidé de subirlo, está en el freezer del depósito-
