Doble Atracción {Voltron} - Shklance

Bueno o malo

Aún en mi cuarto trataba de razonar lo que había sucedido hace apenas una hora.

En cuanto habíamos llegado a casa, Allura explicó todo lo que había sucedido y el problema que teníamos entre las manos. Mis padres solo mantenían una expresión de asombro y después... sonríeron. Al parecer estaban bien con la idea de que su hijo saliera con dos sujetos y que uno de ellos le ganaba por bastante años.

--¡¿Por qué mi destino tenía que ser tan cruel?! --exclamé al aire y me puse boca abajo. Sentía que podía llorar de la frustración.

Unos suaves golpes que provenían de mi puerta me hicieron incorporarme. Ya sabía de quien se trataba.

--Si solo vienes a burlarte, te sugiero que vengas con Marco y Luis, así se gastan sus chistes en una sola noche, Verónica.

--Por mucho que quisiera hacerlo, no podría ahora. No soy tan insensible como ustedes. Además, ya hablé con ellos y por lo menos esta noche te dejarán tranquilo.

--Eso explica porque tanta tranquilidad --reí.

--¿Puedo pasar?

Me hice a un lado con una reverencia exagerada.

--Deberías reedecorar tu habitación. Ya no eres un niño.

--Lo dice la que tiene a sus ídolos de la Academia en posters gigantes en cada rincón de su cuarto.

Los dos reímos.

--Lance, sobre lo que está sucediendo... ¿Cómo te sientes?

Miré a mi hermana. Ella se veía preocupada y no podía dejar que se sintiera así por mí.

--No es nada del otro mundo. Solo tengo que elegir a uno de esos dos hombres y todo habrá terminado.

--Pero tú no eres...

--Sé que no lo soy --me comenzaba a alterar--. Pero, ¿qué puedo hacer?

--¿Intentaste reusarte?

--Digamos que no tuve de otra más que aceptar.

Verónica me miró un par de segundo y yo conocía esa expresión.

Había algo que me estaba ocultando.

--Solo recuerda que siempre, hay una opción.

--¿Qué cosas dices con una cara tan seria? --reí, pero ella no cambiaba esa expresión.

--Buenas noches, Lance. Mañana será un nuevo día --Verónica salió de mí cuarto dejándome esa gran duda.

--Lance, hijo, ¿cómo te sientes hoy?  --preguntó mi mamá con ligera angustia.

--Bien, como siempre --respondí fingiendo estar relajado.

--Hijo, sobre tu situación...

--Papá, no quiero hablar de eso.

--Lo quieras o no, vas a hacerlo --su tono era más severo--. ¿Cómo pudiste dejar que esto pasara?

¿Pero qué demo...?

--¿Estas insinuando que fue mi culpa?

--El sistema nunca comete errores, Lance, y el IBC es solo tuyo.

Me levanté de mi lugar con  brusquedad y salí de casa azotando la puerta. Lo último que escuché fue a mi mamá quejándose con su esposo.

--¿Pero qué demonios se cree? Esto claro que no fue mi culpa...

<<¿O sí?>>

--Mmh... ¿mal momento? --una voz me sacó de mis pensamientos.

--¡Shiro! --exclamé asustado cuando vi de donde provenía.

--Disculpa, no fue mi intención asustarte.

--No no, fue mi culpa por estar distraído. ¿Desde cuándo estás ahí parado? --pregunté preocupado de que haya escuchado algo de la conversación con mi padre.

--No mucho. De hecho creí que se me hacía tarde.

--¿Tarde para qué? --arquee una ceja.

--Para acompañarte a la académica, por supuesto --Shiro sonrió y podría jurar que estrellas salieron de sus ojos.

<<Heh, lindo>>

Por primera vez todos los ojos estaban puestos en mí... o eso me hubiera gustado pensar, si no fuera por el hombre que caminaba a mi lado.

--Shiro, no me tienes que acompañar hasta mi salón --murmuré por la atención recibida que no era por ser yo.

--Disculpame, es que la nostalgia hizo que me dejara llevar --respondió mirando a su alrededor--. Este lugar sigue teniendo el color azul deprimente en las paredes.

--¿Estudiabas aquí?

--Claro. Graduado con honores.

--¿Y ahora a qué te dedicas?

--Eh...

--¡Lance! --Hunk llegó corriendo hasta mí--. Amigo, ¿cómo estás? ¿Cómo te sientes?

--¿Bien? ¿Por qué tan preocupa-

-- Los rumores se expandieron por toda la escuela --me interrumpió--. Eres de lo único que hablan, en especial las chicas.

--Oh no...

--¡Sí! Ahora mismo están --Hunk se calló y miró al sujeto alto de mi lado--. Él es...

--Hunk, él es Shiro --suspiré--. Shiro, él es Hunk. Mi amigo.

--Mucho gusto --ambos extendieron sus manos con un breve apretón.

--Lance, creo que debo irme --se acercó a mi oreja--. Te estoy causando demasiado problemas.

--¡Ah, sí! --me alejé por la sorpresa.

Shiro se fue y los ojos seguían puestos en él.

Me giré y vi a mi amigo con una mirada  mezclada con emoción, alegría y curiosidad.

--¿Qué?

--No, nada... digamos que se verían bien juntos --levantó sus hombros sonriendo.

--Cállate.

Hunk aguantó la risa y comenzó a hablar de algo que ignoraba. Yo aún sentía el calor de Shiro cerca de mi oreja; la cubrí con mi mano y sentí que me sonrojaba.

Tal vez esto no va a ser tan malo.

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Quiero aclarar que Shiro no es un vagabundo xD sí tiene trabajo.

El próximo capítulo será con Keith:3

¡Gracias por leer! Y disculpenme, sé que esperan con muchas ansias la actu, por suerte ya terminé uno de mis longfics y ya puedo preocuparme por los demás uwu

Gracias por comentar, votar y por todo ❤

Por cierto... No sé cuándo voy a actualizar.