L o o k M e.

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Las tiempo parecía ir volando al instante que crucé la puerta, justo después de haber cortado lo único que me unía a Taehyung. No logré comprender el motivo de mis lagrimas o por qué el peso sobre mí no había desaparecido y aparentemente no tendría respuesta sin importar las veces que le diera vueltas en mi cabeza por lo que terminé me auto-convenciéndome en creer que sólo era un último efecto del hilo rojo del destino antes de que se desvaneciera por completo.

Fue entonces cuando decidí volver a mi rutina a pesar de sentir que todo el mundo se movía más rápido que yo durante los siguientes días.

Era como si en un parpadear ocurrieran miles de cosas y yo no me diera cuenta. En algún momento ya me encontraba siendo despertado por mi alarma y justo después, las clases ya habían concluido al igual que el día. Ni siquiera estaba seguro si mis apuntes estaban correctos y eso incluía también las tareas y proyectos durante el transcurso.

–Minnie... ¿Jimin? ¡Jimin!–

Una voz provocó un sobresalto en mi cuerpo, sacándome de mi extraño trance. Mi mano por si sola dejó de hacer garabatos sin sentido en mi libreta y vi a mi costado encontrándome con una mirada preocupada de Jeongyeon. ¿Estuvo todo el tiempo ahí?

–¿Qué te sucede? ¿Te sientes mal?– Insistió cuando a pesar de tener mi atención ella, no hablé.

–Lo siento, sólo estaba distraído ¿Qué decías?– Aligeré la situación con una nerviosa sonrisa.

–Estábamos a punto de comenzar la reunión del club, Taehyung no tarda en llegar. Le mandamos un mensaje–

–Ya veo...– Mis labios apenas pudieron formular esas palabras, apenas caía en cuenta que me encontraba en la aula del club y a pesar de lo sucedido, tratar de evitar a Taehyung sería casi imposibles por detalles como estos.

Desde aquel día, no he sido capaz de sacarlo de mi cabeza. Cada detalle aparecía fugazmente en mi cabeza, su expresión, palabras, todo.
Estaba seguro que corté el hilo, era sencillo de comprobar mirando mi dedo meñique donde ahora sólo colgaba un trozo del hilo y luego de unos centímetros se apreciaba el extremo. Entonces... ¿Por qué?

Todos mis pensamientos pasaron a un segundo plano al escuchar la puerta abrirse. Traté de juntar toda mi fuerza de voluntad para mantener mis ojos sobre mi libreta mientras los miembros presentes le daban la bienvenida a Taehyung, casi completamente paralizado.

–Lamento la demora. Tengo suerte que aún no lleguen todos–

–En realidad sólo falta Taemin-ssi, también le mandamos mensaje así que no tarda en llegar–

La voz de Taehyung parecía normal, tranquila y con ese toque amable que hace unos días había dejado de escuchar. Dejándome llevar por mis instintos, miré en dirección a la puerta cruzándome únicamente con los ojos de Taehyung.

Fue como si de un pequeño destello se trata. Aparte mi vista en cuestión de segundos automáticamente, casi un reflejo.

–¡Ah! Soy el último en llegar. Lo lamento, será mejor comenzar con esto–

Taemin apareció siendo igual de repentino como siempre. 

La clásica reunión dio inicio y, otra vez, perdí la noción del tiempo prefiriendo centrarme en mil y un cosas que no tengan nada que ver Taehyung. Extrañamente él también estuvo callado durante la reunión, a menos de que le preguntaran una o dos cosas como máximo. 

Cuando todo finalizó, todos los miembros salimos del aula en la misma dirección ya que en su mayoría habían concluido con sus clases del día.

–¡Jimin hyung!– 

Soulmate✄Vmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora